Crónica de Teenage Fanclub: Explosión descontrolada de felicidad

Kafe Antzokia, Bilbao Uno nunca ha sido muy dado al contacto físico, no porque nos repugne la gente (bueno, a veces sí), sino por la firme creencia de que cada cual debe tener su propio espacio vital libre de injerencias... Ver artículo