Crónicas
La Polla Records + El Drogas: El poder de la nostalgia
«Es impresionante cómo tanta gente de distintas generaciones se reúne para cantar con un grupo que sigue socialmente vigente»
11 octubre 2019
Wizink Center, Madrid
Texto: Alejandro García Aguejas. Fotos: Hughes Vanhoucke
La nostalgia es un arma muy poderosa en el mundo artístico. Es la razón por la que triunfan las precuelas, los remakes, los biopics, las series con referencias ochenteras o el regreso de las grandes bandas. Y es que la nostalgia es tan poderosa que hasta grupos que nunca habían tocado en grandes pabellones vuelven y agotan las entradas a las pocas horas de salir a la venta. Sin duda La Polla Records es una banda referente en el punk español - quizás por público el mayor exponente del género - , y esta vuelta para no quedarse ha hecho que sus seguidores no perdieran la oportunidad de escuchar en directo canciones que les han acompañado durante tantos años en sus reproductores. Y si además le unes a El Drogas, queda un espectáculo muy potente.
Hay quien ha criticado esta vuelta, y es cierto que estos reencuentros huelen más a querer tener una buena jubilación (merecidísima) que a una razón estrictamente musical. Pero si alguien se merece tocar en grandes escenarios es Evaristo, un hombre que lleva 40 años con el punk por bandera y sin pelos en la lengua. Nadie le puede dar ni una sola lección sobre qué es el punk, más que nada porque sin él y La Polla muchos jóvenes, ahora con crestas y pulseras de pinchos, no se hubieran acercado a esta música.
Enrique Villarreal, El Drogas, está siendo el invitado de lujo para abrir los conciertos. Acaba de sacar un disco quíntuple, pero siendo el contexto que era, el grosor del repertorio fueron canciones de Barricada. Dos decenas de canciones en algo menos de hora y media. La primera fue “Okupación” seguida de “La silla eléctrica”. Aún los presentes apuraban sus cervezas fuera, pero a medida que iban cayendo canciones como “En punto muerto”, “Barrio conflictivo” o “Tentando a la suerte”, el palacio se iba llenando.
El Drogas no habló y el concierto fue muy directo. Clásicos como “Frío” (original de Alarma) o “Todos mirando” hicieron enloquecer a la gente que poco a poco ya entraba en calor. Tuvo algunas palabras a favor del Ecuador indígena que se está manifestando. También se acercó al foso en “Oveja negra” y el pabellón casi se cae con “No hay tregua”. El concierto terminó con “Azulejo frío” y “Blanco y negro”, teniendo ya a los presentes preparados para la que se avecinaba.
En las pantallas se mostraba una cruz en llamas y tras un: “Hola, muy buenas” de Evaristo, empezaron con “Salve”. Con la gente metida desde el primer minuto, La Polla Records no echó el freno de mano. Más de 40 canciones en dos horas. Continuaron con “Memoria de muerte”, “Así es la vida” o la divertida “Lucky man for you”. Absolutamente todo el palacio estaba bailando, saltando y cantando estos himnos que siguen tan vigentes como hace 40 años.
La puesta en escena consistió en un gran telón al fondo y varias televisiones sobre el escenario. Evaristo estaba como siempre en su salsa: moviéndose por todo el escenario y haciendo esos gestos obscenos y provocativos que tanto les gusta a sus fieles. Tiene mérito llegar a esa edad haciendo punk y no hacer el ridículo.
“Delicuencia”, “Gol en el campo”, “Los siete enanitos”, “Eutanasia”… No paraban de caer canciones, con un sonido atronador, mientras los minis iban volando y el sudor aumentando. Es impresionante ver corear a 15.000 personas la mítica “Txus” o escuchar cantar al unísono la frase “¿Quieres identificarnos?, tienes un problema…” de “No somos nada”, un clásico de nuestra música. Se mezclaban entre los presentes cincuentones que viven de la nostalgia y jóvenes nostálgicos de lo no vivido; y de manera agitada no hubo ni descanso ni paz en el concierto. Simplemente algunos parones para beber agua y algún que otro comentario jocoso de Evaristo.
“Ellos dicen mierda”, “Johnny”, “Carne para la picadora” … Seguían y seguían cayendo las canciones y las energías no cedían. Los seguidores más acérrimos no pueden tener queja porque cayeron prácticamente todos los clásicos. El concierto terminó con “Odio los partidos” y “Así casca la vasca”, casi como un coitus interruptus, ya que ni se despidieron. No hubo ni palabras sentimentales por la ocasión ni nada parecido. Solo música derrochando fuerza y energía.
Fue histórico. No sé cuándo volveremos a ver a un grupo de punk español llenar un palacio de los deportes o una plaza de toros. Es impresionante cómo tanta gente de distintas generaciones se reúne para cantar con un grupo que sigue socialmente vigente. Pero por unas horas el mundo no existía y los presentes se sintieron libres.
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8 comentarios
Oleeeee
Todavía estoy esperando por parte de alguien del grupo que expliquen el porqué Txarly no forma parte de esta reunión, si tan siquiera se lo propusieron y si de veras está tan grave como para no poder tocar. Básicamente esta versión de LPR no es más que Gatillazo con el añadido de Sumé y Abel.
Quizás les critiquen por haberse reunido por la puta pasta pero ya me gustaría ver a otras bandas tener el potencial en directo de los históricos LA POLLA RECORDS lo cual lo veo de puta madre esta reunión para la peña que aun no ha tenido la ocasión de verles ya que por mi parte a mí me encantaría verles.
Sigo flipando con la critica de este concierto.
Estais sordos o que cojones oisteis?
Una puta bola de sonido con continuos problemas, perdidas y gambazos.
El pobre Sume de mitad para delante no dio ni una nota. No hicieron ni una cancion de manera minimamente correcta.
Para mi totalmente justitos para cumplir el expediente del peor de los conciertos que he visto de la banda (y no han sido pocos).
Por otro lado un drogas demoledor y barriquero. 10 sobre 10
Totalmente de acuerdo. Tenia que escuchar con mucha atención para reconocer las canciones. Peor sonido imposible. Y no me lo explico xq el drogas sono de lujo
Bueno. Es un homenaje que se dieron la banda y el público. Un homenaje a sí mismos, respectivamenteñ. . Un \'porque nos da la gana tocar\" por un lado y un \"nos da la gana venir a veros \" por otro. Nostalgia para el público cincuentón y un decir \"los he visto\" para los menores de esa edad. A partir de ahí el sonido da igual. Por otro lado, nunca llevaron a la NASA en sus conciertos.
No da igual Luis. Has pagado 40 pavos y el grupo telonero sonó de miedo. No llevaron a la NASA, pero llevan tecnicos de primera linea (y ya los llevaban en los 90). Y aunque todos los que tocamos la cagamos de vez en cuando, un grupo profesional como LPR no se puede permitir este sonido y estos errores de ejecucion. Esto no quiere decir nada mas. Iria a verlos 20 veces mas, y lo pase de miedo. Pero fallaron demasiado y sonaron como el culo. Salú.
Pues yo estuve en el concierto y ni cuenta me di del mal sonido que dices ni de los errores de ejecución. Pero vamos, igual que las muchas otras veces que los ví en directo, hace años. Ni me he fijado nunca si el Sume tocaba mejor o peor. Será que soy muy simple y me quedo con el mensaje de sus canciones (ese me lo sé de pe a pa) y con lo necesario que es que se escuche en estos tiempos de m....... Que en eso si que hemos ido a peor. Para mí un conciertazo.