Crónicas
Green Day + Violets: Intenso pero… ¿Corto?
«Una noche muy especial, que recordar con agrado y en la que creo que, aunque la mayoría de la gente esperase una actuación más larga, en modo alguno defraudó en cuanto a actitud, entrega y profesionalidad por parte de Green Day»
30 octubre 2019
La Riviera, Madrid
Texto: Mariano Muniesa. Fotos: Leonardo Sierra / Warner Music.
Con motivo de la actuación de Green Day como cabezas de cartel el 2 de noviembre en el MTV World Stage Sevilla, el evento que cierra la #MTVMusicWeek, con menos de una semana de antelación y en un tiempo récord se organizó un concierto en Madrid del trío norteamericano muy especial.
Por primera vez en mucho tiempo (Green Day es ya desde años un grupo de categoría mainstream, para recintos como Wizink Center, grandes festivales o estadios) y quizá por última vez en España, el grupo daría un concierto en una sala como La Riviera, con entradas nominales a un precio bastante más caro de lo habitual, y dándole a este evento el carácter de show histórico e irrepetible en el año del 25 aniversario de la edición de su mítico ‘Dookie’, y presentando su nuevo single. Obvio es decir que las entradas volaron a pesar de su precio, el sold out fue absoluto y el concierto no defraudó… en parte.
Desde Barcelona vinieron para abrir el show como teloneras Violets, trío barcelonés que apenas tocaron seis canciones, pero que cumplió a la perfección con su papel, contagiando su entusiasmo y su energía a toda la gente que ya casi llenaba la sala pasadas las 20:00 de la tarde. Tal y como dijo por el micrófono su cantante y guitarrista Glory, estaban alucinando por poder telonear a Green Day, banda de la que se declaraban fans incondicionales, además cuando iban a tocar entero un disco como ‘Dookie’, lo que para ellas era como un sueño hecho realidad. Violets hace un tipo de punk rock melódico, pero muy agresivo y muy potente en directo, sus temas son como ráfagas de metralleta y se nota que disfrutan en el escenario, que lo dan todo con sinceridad y honestidad. Creo que, en su estilo, es una formación que transmite frescura, fuerza, emoción y les auguro un futuro realmente prometedor.
Con tan solo unos minutos de retraso sobre el horario previsto y con “Bohemian Rhapsody” de Queen y “Hey Ho! Let's Go” de los Ramones a modo de intro, finalmente Green Day salieron a escena recibidos por un público entregado desde el primer momento, que estalló en una ensordecedora ovación nada más ocupar cada uno de ellos su lugar en el escenario y arrancar la aproximadamente hora y media de show que nos ofrecieron.
El grupo obviamente se sentía en su salsa ante una audiencia tan enfervorizada y en un ambiente tan poco habitual ya para ellos y, en consecuencia, salió a matar y a morir desde el primer momento. Ese nervio genuinamente punk rock que les hizo grandes en todo el mundo volvió a recorrer el escenario de La Riviera en un show que, en esta primera fase centrada en los temas de ‘Dookie’, nos hizo vivir momentos realmente memorables, en especial cuando atacaron “Burnout”, “Welcome To Paradise” y “Basket Case”, temas en los que la gente se entregó incondicionalmente, montando pogos como si fuera la última vez en su vida que los fueran a montar e incluso haciendo volar vasos y hasta minis llenos de cerveza sobre el público, lo cual motivó que, al menos desde la zona en la que yo estaba, el personal de seguridad sostuviera alguna que otra discusión con gente muy exaltada que se prodigaba seguramente demasiado en estos lanzamientos.
Ni que decir tiene que “When I Come Around” fue otra de las más celebradas de la noche, en la que se vio a unos mejores Green Day, y de las que más disfrutó el público asistente.
A excepción de algún “¡Viva España!” y algún escueto comentario para presentar algunas canciones, el set no tenía prácticamente ni un segundo de tregua ni de parón. Siguiendo el ejemplo de sus buenos maestros los Ramones, prácticamente empalmaban una canción con otra, animaban al público a unirse a la fiesta en todo momento e incluso, hacia el final del show, no tuvieron problema en que un asistente al concierto disfrazado de Pantera Rosa (la proximidad de Halloween, ya se sabe) se subiera al escenario, hiciera coros durante unos segundos con el grupo y luego el propio Billie Joe Armstrong le instara a saltar del escenario para nadar entre la gente.
Más allá de los temas de ‘Dookie’, sonó su nuevo single, “Father Of All…”, muy bien recibido entre toda la gente que evidentemente ya lo conocía y lo coreó de principio a fin, y en el final, en el último bis, una versión fabulosa de “American Idiot” y una no menos excelente “Jesus Of Suburbia”.
Es de suponer que en un concierto con un ritmo tan trepidante, donde cada uno de los temas fue casi más escupido que interpretado, hora y media de show se hiciera corta y quizá por ello se palpase en mucha gente un sentimiento de decepción e incluso de no disimulado enfado cuando a las 22:37 se encendieron las luces de La Riviera y, como es desagradablemente habitual, el personal de seguridad empezar a decir en menos de cinco segundos a todo el mundo que se tenía que ir, “por favor”. Abucheos, silbidos y algún que otro “hijos de puta” se escucharon a medida que los roadies del grupo empezaron a recoger el equipo y quedó claro que no habría más bises. Es comprensible que ante el pago de una entrada bastante cara, y seguramente en el caso de mucha gente que había venido desde fuera de Madrid (saludé y charlé con colegas y conocidos que habían venido desde Pamplona, Santander o Vigo, entre otros lugares) se esperase más de un concierto especial, pero… también hay que tener en cuenta que Green Day nunca se han caracterizado por ser un grupo de conciertos muy prolongados.
Una noche, en cualquier caso, muy especial, que yo personalmente recordaré con agrado y en la que creo que al menos, aunque la mayoría de la gente esperase una actuación más larga, en modo alguno defraudó en cuanto a actitud, entrega y profesionalidad por parte de Green Day.
Set 'Dookie':
Burnout
Having a Blast
Chump
Longview
Welcome to Paradise
Pulling Teeth
Basket Case
She
Sassafras Roots
When I Come Around
Coming Clean
Emenius Sleepus
In the End
F.O.D.
All By Myself
Set 2:
Minority
Bang Bang
Revolution Radio
Father of All...
Holiday
Boulevard of Broken Dreams
Brain Stew
Paper Lanterns
I Was There
Know Your Enemy
American Idiot
Jesus of Suburbia
- Entrevista a The Dire Straits Experience: “Nunca olvidamos que la historia de Dire Straits terminó en España” - 12 noviembre 2024
- Entrevista a Juan José Castellano (Guitar Legends Hall): “El museo no es un espacio estático, queremos que tenga vida y que pasen cosas en él” - 7 noviembre 2024
- Crítica de Sínkope: Creer y luchar - 31 octubre 2024
5 comentarios
Excelente crónica.
Me gustaría hacer una reflexión. Hay peña que critica por criticar: Si hacen un show de 2 horas y media, que Billie Joe no para de hacer el payaso y de decir \"eeeooooos\"; y si tocan 1 hora 40 minutos a piñón, que es un concierto corto... ¿¡27 temas en 1 hora 40 minutos!? Eso es un ritmo que ni Metallica señores...
Yo, personalmente, eché de menos el nuevo single de la NHL y Good Ridance como cierre.
Como anécdota, \"I Was There\" fue patética pero simpática. Tuvieron que reiniciarla y Billie Joe no se acordaba de la letra (en un momento llegó a soltar \"I\'m fucked\"... xD ).
Gran concierto, sin duda alguna.
Prefiero a una verdadera banda de la movida Punk Rock estadounidense como son RANCID y no esta parodia de banda que han querido ir siempre de "Punkies" y nunca han sido tal cosa.
Que tú prefieras Rancid a Green Day es respetable.
Pero te guste o no, Green Day formó parte de la 3a oleada del Punk californiano junto con Rancid (924 Gilman Street).
Es más, Tim y Billie Joe son amigos íntimos. Billie Joe ha colaborado para Rancid, han girado juntos, etc.
El único delito de GD fue dar un volantazo en 1994, pasando de ser una banda de Punk Rock a ser una banda de Power Pop Melódico, que les llevó a la fama y a ser rechazados por los puretas del movimiento Punk por firmar un contrato millonario con Reprise.
Para mí, hicieron lo correcto porque los dos primeros discos de GD (de estilo Punk Rock clásico que perfectamente podrían haber sido firmados por Rancid) sonaban muy mal y eran muy aburridos. Y con Dookie empezaron a sonar muy bien, muy frescos, desenfadados y divertidos.
Supongo que para ti, todo esto que acabo de contar es a lo que tu llamas parodia...
¿\"Hey Ho! Let\'s go\" de los Ramones????