CYPRESS HILL: FLUJOS HARDCORE

6 julio, 2012 2:46 pm Publicado por  1 Comentario

Sala La Riviera, Madrid

Antes que el título del artículo haga que los malpensados empiecen a pensar a cosas sucias, hay que decir que “flow” (flujo, en inglés) es la técnica del hip hop para pronunciar palabras o sílabas por encima de los beats y hacerlas encajar con el ritmo.

Se supone que los rockeros somos gente abierta de mente, así que no debería sorprender la crónica de un grupo de hip hop en una página web de esta índole. Aparte del hecho que los “talibanismos” no van con los rockeros que saben apreciar la música como cultura en general, muchos de vosotros ya sabréis que ellos también han sabido mezclar el rap con el rock en discos como ‘Skull & Bones’ (2000) o ‘Stoned Raiders’ (2001). Otros trabajos tienen un ambiente oscuro y angustioso, también propio de un disco de rock pesado, como lo fueron ‘Black Sunday’ (1993) o ‘Cypress Hill III: Temple of Boom’ (1995)’. Además uno de sus frontman, B-Real, lleva años relacionado con bandas como Deftones o Fear Factory a través de proyectos paralelos (véase Kush) y el productor y DJ de la banda, DJ Muggs (quien por cierto no apareció en el escenario con ellos) ha trabajado con U2 o Slash (una versión del “Paradise City” para un single suyo). Entre los artistas que han colaborado con Cypress Hill se incluyen Sonic Youth, Rancid, Rage Against the Machine o SOAD. Aparte de estas credenciales, un servidor nunca se cansará de decir que de los cientos conciertos que ha visto, uno de los más recordados sería precisamente su actuación en 1996 en el Festimad. Es una banda que atrae desde a los que están inmersos en la cultura urbana hasta a los metaleros, y hubo abundancia de ambos (aunque no llenaron la sala), las camisetas de nuestros grupos se mezclaban con las gorras de baseball hip hoperas en aparente armonía.

Sobre el escenario, la mesa del DJ y el set de percusión latina, ya que Cypress Hill siempre han lucido con orgullo sus raíces latinas, B-Real tiene ascendencia mejicana y cubana, y el otro vocalista, Sen Dog, es de Cuba… this is for the raza. Es imposible quedarse parado y no botar cuando suenan temas tan pegadizos como “When the Shit Goes Down”, “Tequila Sunrise”, “(Rock) Superstar”, “I Wanna Get High” (donde B-Real se encendió un canuto enorme aunque ignoro si era marihuana de verdad), “How I Could Just Kill a Man”, “Hits from the Bong” y, cómo no, “Insane in the Brain”. El “porrero” tiene un estilo de rapear muy nasal que contrasta con el de Dog, más contundente y arisco, haciendo así un buen contraste. Por otra parte, no faltaron tampoco los duelos entre el DJ y el percusionista permitiendo así que los dos vocalistas se tomaran un respiro entre tanto “flow”. La única pega sería el mal sonido (sigo pensando que a esta sala solo se le puede sacar el jugo con un ingeniero avispado, en otros bolos ha sido mejor) que no permitía que los samples se oyeran con claridad, y la percusión sonaba a veces con chasquidos.

Lo dicho, hip hop de la vieja escuela, y no los engendros estos del gangsta rap y el R’n’B’ promovido por las discográficas, es la otra cara de la misma moneda con el rock: un grito de rebeldía de la clase obrera y de los desfavorecidos y una actitud desafiante ante el conformismo y la autoridad.

Texto y foto: Yorgos Goumas

Etiquetas: , , , ,

Categorizado en:

Esta entrada fue escrita por Redacción

1 comentario

  • vedder dice:

    pues si fuera los talibanismos de algunos metaleros konozco algunos kasos de gente metalera k de ahi no salen y apenas konocen mas musika por lo que su inkultura musikal es muy palpable el rock tiene cientos de ramas asik viva el rock-metal y derivados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *