El Pecado

El pecado

Rock Estatal Records (2020)

Por: David Esteban

8

Estupendo debut discográfico de la banda madrileña El Pecado, rock n’ roll de primera categoría que no duda en adentrarse en terrenos más propios del hard rock con las rasgadas voces de José Carrasco y Sergio Carrasco, y una cuidada lírica llena de metáforas como señas de identidad.

Que mejor manera de comenzar cualquier opera prima que con una colaboración de altura, en este caso, la de Carlos Escobedo de Sôber en el corte titulado “Acorralado”. Rock duro de corte moderno y ritmo marcado que fusiona a las mil maravillas las voces de los protagonistas.

Especial atención a las letras tan elaboradas y trabajadas del álbum, pues parecen más propias de una banda de rock poético y urbano al estilo de Marea, Sínkope y similares que de una banda de las características musicales y estéticas de El Pecado. Ahí es donde creo que puede residir parte del gran atractivo de la banda: magnífica combinación entre rock n’ roll y metafóricas letras, críticas por momentos, ocasionalmente comprometidas, crudas incluso y, desde luego, siempre bellas. Ese es el caso de “Arrecife”, cuya bonita letra adorna un corte musicalmente intenso.

Más heterogénea que las anteriores, “Pánico” esconde cuidados y seleccionados sonidos sintetizados perfectamente, conjugados con el riff principal y, de nuevo, la magistral colaboración del líder y bajista de Sôber. En contraste, de atmosfera mucho más relajada se muestra “Ecos al Amanecer”. Más accesible, se trata de un rock ligero cuya base lírica no es ni mucho menos ligera, pues denuncia, de manera elegante, el drama de la migración y los refugiados, realidades tristemente tan presentes hoy en día.

Marcando diferencias con las anteriores, “El Narcotraficante” es la mixtura perfecta entre rock moderno y estrofas rapeadas gracias a la colaboración de Roberto Myzepk y Recluso, del grupo de rap Pura Konciencia. Retornamos a estándares más rock convencionales en “Cinco Locos”, donde la voz de José se llena de dramatismo perfectamente acompañada por las guitarras de Sergio Carrasco y Javier Pulido más la contundente base rítmica formada por Julián Rubio al bajo y Juan Lorenzo Moreno a la batería. En la misma onda, “Angelina” esconde cierto halo de rock andaluz en el estribillo para conformar un apasionado corte que contrasta con “El Fallo”, donde una étnica y predominante base rítmica progresa para entregarse al máximo en un veloz y clásico rock duro.

En la parte final, el ritmo pesado y marcado de “La Visión” cuenta una historia llena de metáforas y referencias bíblicas, otorgándole al tema un encantamiento especial. “Tóxico” termina de despedir un álbum a base de buen y gustoso rock de corte moderno que demuestra las ganas y el ímpetu de una banda que aglutina la fuerza del debutante y la experiencia del veterano. Muy recomendables.

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Esta entrada fue escrita por Redacción

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