Crónicas

Rock in Vivo 2: Quiet Riot, Lita Ford y Dokken

«Nos montamos en la máquina del tiempo del Dr. Brown hacia los años 80»

Vivo Beach Club, Carolina, Puerto Rico

Texto: Lechón Atómico. Fotos: Galdy Tommy Rivera

En la isla del encanto, capital del ron del mundo y en un día espectacular de verano de cielo azul y sin ninguna nube, con una tarima enclavada en la misma arena, a unos quince metros de la orilla del mar, así se dio el Rock in Vivo 2 a cargo de “Caribbean Concert Events”.  El lugar fue el “Vivo Beach Club”, un club de lujo en la hermosa playa del pueblo de Carolina, a minutos de San Juan, en Puerto Rico. En esta segunda edición tuvimos la dicha de presenciar a Quiet Riot, Lita Ford y Dokken.

“Estos conciertos ochenteros atraen a muchísima gente de nuestra edad”. Así lo dijo Arturo, vecino del pueblo de Juncos, quien había llegado desde temprano para apostarse frente a la baranda y agarrar el concierto en toda su plenitud. Arturo tiene razón, pues vuelve a ser la edad promedio entre los asistentes entre 45 y 55 años. Cómo no iba a ser de esa manera si las bandas que se anuncian en esta serie de conciertos son de la época gloriosa del rock, los años ochenta.

La prueba de sonido de Dokken justamente acababa cuando dejaron entrar al recinto a la gente. Poco a poco las almas fueron llenando los bares y arremolinándose frente a la baranda. Entonces aparecen varios amigos en la tarima que no me esperaba, integrantes de Constantly Crashing, The Finger y Black Kharma conformaron una banda de versiones que se llamó All Star Jam Band. Estos muchachos deleitaron al público comenzando con “Psycho Circus” de Kiss, le siguió “Big City Nights” de Scorpions, “Born to Be Wild” de Steppenwolf, “Give Me All Your Love” de Whitesnake y finalizaron con el clásico “I Can’t Drive 55” de Sammy Hagar.  La verdad es que All Star Jam nos montó en la máquina del tiempo del Dr. Brown hacia los años 80. Muy buena opción para calentar los motores de lo que se avecinaba esa noche.

Con el clásico de Queen “We Will Rock You” como una breve introducción, así comenzaron a aparecer los músicos de Quiet Riot en la tarima. Esta vez vino una versión muy diferente de Quiet Riot, que ahora tiene como cantante al joven James Durbin, ganador de una de las ediciones de American Idol. Este cantante sí que tiene voz para el rock. Sí, James Durbin, el mismo que cantó a dúo con Judas Priest junto a Rob Halford en una noche especial de American Idol. James se tragó aquella tarima haciendo suyo el tema clásico y duro “Run for Cover”. ¡Qué puñetazo para comenzar! Luego le siguió “Slick Black Cadilac” y “Mama We Are All Crazy Now” donde James demostró que puede cantar mucho más arriba. Siguieron con la balada “Love’s a Bitch”, que apagó un poco el fuego, pero lo volvieron a encender con una no esperada “Condition Critical”. Aunque ninguno de los músicos originales conformó la banda y muchos esperaban a Frankie Banali, esta versión de Quiet Riot se lo curró. Luego siguió “The Wild and the Young” y una que me gustó muchísimo, “Let’s Get Crazy”. Las más esperadas fueron las últimas: “Cum On Feel the Noize” y el clásico “Bang Your Head!”. ¡Guau! Inesperada formación, con inesperado resultado.

Muchos comentaron esa noche que Lita Ford fue quién se llevó la mejor parte. En realidad fue porque era la más esperada de la noche. Esta era la primera vez que la banda pisaba la isla, así que lo dio todo, pero todo, en el escenario. Esta leyenda viva del rock nos dio un bolo tan bueno que me pareció corto. Pudimos pillar la lista de temas a tocar y esto fue lo que la diva del rock americano nos brindó: Arrancó con el tema “Gotta Let Go”, siguiéndole “Larger than Life” y “Relentless”. Luego tocó “Playing with Fire”. Luego su baterista, Bobby Rock, se lanzó un solo de batería sólido y entretenido para darle introducción luego al tema “Can’t Catch Me”. Durante el concierto, varias veces la diva cambiaba su instrumento haciendo mucho más regio e interesante su show. Uno de los temas que no esperábamos y que nos llevó en una máquina del tiempo hacia la época de The Runaways fue el clásico “Cherry Bomb”. La piel se nos puso de gallina con el éxito de los ochenta “Close My Eyes Forever”, que muchos pensaban que no iba a tocar y ella lo hizo con su doble guitarra blanca. ¡Brutal! Para cerrar la noche tenía que venir el tema ochentero “Kiss Me Deadly”, el cual fue el más vitoreado por el público.  ¡Según muchos, fue el bolo de la noche!

Una leve llovizna hizo que algunos de los presentes empezaran a irse, así que sin encomendarse a nadie arrancaron los Dokken con su show. El sonido estaba bueno, sus músicos, tremendos, pero Don Dokken, aunque físicamente estaba ahí, él como que no. Aunque el show arrancó muy bien con “Don’t Close Your Eyes”, los que creían que iban a ver al Dokken de los 80 o una versión equivalente se fueron desilusionados. Con un poco de falencias en la voz de Don Dokken, la banda nos brindó “The Hunter” y “Kiss of Death”. Se nota que los problemas de salud que ha tenido desde el 2010 hasta hoy le han afectado. Como todo un veterano se presentó a la batalla con sus cicatrices y heridas. Aunque Don Dokken muchas veces no cantaba pedazos de las canciones, sus músicos lo ayudaban bastante y cubrían, no excelente, pero de forma razonable, alguno que otro bache. Con todo y eso pudimos disfrutar de temas como “Just Got Lucky”, “Breaking the Chains”, “Dream Warriors”, “Into the Fire”, “Too High to Fly”, “In My Dreams” y “Tooth and Nail”, los cuales disfrutamos echándonos al cuerpo una que otra cerveza y tragos de ron entremedio. Al final disfrutamos tanto que se lo perdonamos todo.

Debajo de las estrellas y con amagues de lluvia madrugadora se acabó el concierto. Ya estoy preparándome mentalmente para la tercera entrega.

Redacción
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3 comentarios

  • Juandie dice:

    No son ni la sombra de las inmensas que fueron estas bandas en los 80 pero a su manera y con otros componentes dieron dignos recitales en el país caribeño con una Lita Ford muy mayor como se puede observar en dicha foto pero que sigue igual de inmensa como en sus mejores años a través de esos grandes temas.

  • Tony dice:

    Esto de grupos míticos sin ningún miembro original debería ser considerado delito...

  • Jose A. Rodriguez dice:

    Un tremendo concierto con apenas tres semanas de promo por internet nada de radio, prensa y tv hubo una asistencia respetable y poder de convocatoria. El lugar que escogieron para dar este evento fue uno excelente yo diría que es el mejor lugar a hora mismo en Puerto Rico para este tipo de conciertos

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