Crónicas
Gato Ventura + La Sombra del Grajo: Haciendo el animal
«Se despidieron con el público disfrutando y agradecido por la preciosa, irrepetible, increíble y, sobre todo, rockera noche que se acaba de vivir en el local»
26 noviembre 2022
Ambigú Axerquía, Córdoba
Texto y fotos: Alberto Sarel Cañete Zamorano
Gato Ventura
Las puertas del Ambigú Axerquía de Córdoba se abren para disfrutar del doble concierto llamado "Haciendo el animal", realizado por La Sombra del Grajo y la banda de Gato Ventura. El público no cesa de entrar con júbilo. Los vasos (llenos) se deslizan por la barra hacia todas las manos. El ambiente se va caldeando desenfrenadamente. No tardan cuatro personas en subir al escenario.
La Sombra del Grajo se presenta, y el público se acerca. Los focos, rojizos y azulados, iluminan a los intérpretes. Arrancan las primeras notas. La banda comienza el concierto con su convencional introducción acompañada del tema "Alma de rock" y el público comienza a animarse.
La puesta en escena es enérgica, entregada, fuerte. Le sigue "Por no llamarme libre". El público se entrega. El ambiente acompaña a la música. La mirada del público está atenta. Sus oídos, disfrutando de la música que tanto adora: rock and roll en vivo, en estado puro.
La Sombra del Grajo
Para cuando comienza a sonar "El día que yo me muera", el público ya está acompañando a la banda con su letra. Las primeras melenas se agitan entre el suelo y el techo. La banda es consciente de esto y, al interpretar "Traspié", no hay cuerpo humano que no esté en movimiento, ya sea sobre o bajo el escenario.
El público mueve su cabellera, toca instrumentos en el aire, canta la letra. La Sombra del Grajo ya tiene al público ganado, la banda está disfrutando y eso se hace ver, pues conforme avanza cada tema, se sienten más libres en el escenario. Se nota que ya es algo que viven continuamente, como un déjà vu que, paradójicamente, es el siguiente tema que tocan.
A continuación, arrancan "Donde lloran los poetas" y "Por quererte tanto", temas totalmente inéditos, marcando un ritmo distinto en el concierto, jugando con los estados emocionales del público sin que éste deje de disfrutar. Este ritmo se prolonga durante "Para siempre todavía".
El público se emociona, se observa entre sí, y sus corazones se llenan de los mejores sentimientos existentes. Al iniciar las primeras notas de "En tu agujero", la rítmica y el ambiente vuelven a cambiar, y el público, de nuevo, cambia de actitud. Vuelve la fiereza, el arrojo, la picardía que escala progresivamente con el siguiente tema, "Quimera".
Finalmente, comienzan a cerrar su sesión acompañados de Gato Ventura y Eugenio Vila, interpretando juntos "Ceniza y revolcón", el que posiblemente sea el tema más rockero de todo el concierto. La gente se entrega ante su letra pícara, su melodía acelerada, su ritmo desenfrenado. El público se convierte en uno con todos los intérpretes sobre el escenario, y las baquetas acometen sus últimos golpes, lo que provoca que la gente alce sus brazos en júbilo por la adrenalina acumulada, despidiéndose en el escenario.
Los intérpretes se dirigen a descansar, y el público a consumir y a ver qué productos hay en la mesa de merchandising, comprando camisetas, parches, discos, pines y púas, entre otros.
Gato Ventura
Gato Ventura y su banda no tardan en iniciar su concierto con el tema "Corazón de madera". El público vuelve a acercarse al escenario.
Los focos etalonan a los intérpretes de los mismos colores, generando un ambiente cálido sobre las tablas. Sigue el tema "Ya puede caerse el cielo", así como "Soltaré", ambos con unos acordes salvajes, característicos del estilo rock urbano propio de la banda.
El público se desinhibe, se convierte en uno con la música. A continuación, el cantautor Carlos Puya sube a escenario para unirse a interpretar "Mis últimas palabras" junto a la banda, un tema más lento pero al que no le falta hermosura.
Posteriormente, vuelve la inercia rockera en su máximo esplendor con "Córtame las penas" y "El desaire". El público está dedicado a cantar, disfrutar, bailar, mover sus nucas al ritmo de cada tema, con el brillo en sus miradas que muestra un vínculo con la banda, tan cercana y conocida en la ciudad de las tres culturas.
Continúan "Las musas y tú" y "Condenados", generando un punto de inflexión que destaca por la soltura, sagacidad, bravura y amor al rock.
El estilo andaluz aunado con el urbano, unas letras tanto románticas como salvajes interpretadas por una voz agravada y, sin embargo, todo ello obtiene un cambio de aires con la versión que tiene la banda del famoso tema "La llorona", la cual el público también canta.
No tardan en volver a su estilo propio con "Podrán cortar todas las flores", esta vez acompañados por Ezequiel Delgado, vocalista de La Sombra del Grajo. Como en todos los directos, los vocalistas pronunciaban: "Y aunque no me puedas ver", siendo acompañados por el público pronunciando al unísono: "Siempre estaré contigo".
El siguiente tema interpretado es "Todos los gatos son pardos". Al acabar, los demás miembros de la banda bajan del escenario, quedando Gato Ventura solo, presentando un tema inédito, "Sin palabras", a voz y guitarra tocada por sí mismo. Un tema emotivo, finalizando el concierto y despidiéndose con el público disfrutando y agradecido por la preciosa, irrepetible, increíble y, sobre todo, rockera noche que se acaba de vivir en el local Ambigú Axerquía de Córdoba.
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1 comentario
Cojonudo resumen hacia el buen concierto que se marcó GATO VENTURA ante sus paisanos presentando su nuevo álbum de estudio junto con esta buena banda telonera como fueron LA SOMBRA DEL GRAJO.