Crónicas
Whisky Caravan + Versoix: La noche de que te hablé
«No me cansaré jamás de alabar y exponer hasta donde pueda la inmisericorde grandeza de estos cinco señores. Mientras van o vienen, recordaremos estas más de dos horas de finales de primavera como la noche de que te hablé»
8 junio 2024
La Riviera, Madrid
Texto: Javier Pérez. Fotos: Sandro Santos
Después de más de año y medio presentando ‘Imaginaciones’ por todo el país, la gira “Los últimos en pie” daba carpetazo en Madrid, en una sala destinada a los grandes, como es La Riviera. Si no se llegó al sold out, debió faltar poco. El poder de convocatoria de la banda crece sin miramientos; como debe ser.
Versoix, invitados de excepción a la fiesta, se presentaron a una hora en la que todavía, a pesar de ser algo habitual desde hace tiempo en la capital, la gente apuraba la llegada. De tal forma, debo reconocer que el ambiente en estos primeros compases era tibio, y eso que el recibimiento fue más que amable en todo momento.
Supieron sacar el jugo a la ocasión, disfrutaron de tres cuartos de hora sobre las tablas, y se bajaron con una gran actuación a sus espaldas. “Lo fugaz y pasajero”, “El cristal”, “Oscuridad”, “Círculo de tiza” con Danny Caravan (como en la versión de estudio) y el final con “Lo que fuimos” armaron un interesante esqueleto. Les puse el ojo cuando vi que hoy estarían aquí y he descubierto un grupo que, a medio camino entre el rock urbano clásico, la escuela poética de Robe y lo que vino detrás y un embalaje alternativo en lo musical, forma un compendio que dará alegrías.
Whisky Caravan no tardarían demasiado en ocupar el escenario. Venían a aprovechar el tiempo al máximo y con una leve intro en la pantalla de fondo “Algo en que creer” iluminaba la noche madrileña con potencia y electricidad. Estos primeros momentos se envolvieron en una maraña sónica y, como había sucedido con Versoix, la caja de la batería y la voz opacaban guitarras y bajo. Afortunadamente, mejoró rápido la ecualización y “Enemigos” retumbó con violencia, prácticamente enlazada con “Larga carretera”.
El fulgurante arranque de la velada puso en pie a la ahora ya sí nutrida audiencia, ávida de recibir la bendición que supuso “La guerra contra el resto”, engalanada de fondo con imágenes bélicas. “Días de niebla” y “No estás muerta” entroncaron con “Elvis”, una de las nuevas que veremos si acaba en un futro nuevo LP o se queda en el limbo como canción suelta. A mí me supo a gloria, pero tanto esta como “Los lobos”, la otra novedad reciente, aún necesitan más escuchas atendiendo a la reacción de la audiencia.
Entre ambas caería “Aviones”, con un precioso vídeo llevando la canción con skylines de varias localizaciones; muy trabajada. El tiempo volaba a caballo entre “A salvo en el dolor” y “La última luz”, una removiendo los cimientos y la otra desangrando las entrañas.
“Genie”, que hoy sí tocaba en detrimento de “Sólo un susurro”, enarboló ese deje heavy que siempre les ha sentado tan bien. Cuando salí del impacto generado, “Quiero” se alargó acurrucándonos.
El primer bis acaeció con pesadumbre, esa que supone enlazar “Kintsugi” y “Las últimas piezas” en un magistral ejercicio musical aterciopelado en resultado, doloroso en concepto y único en su especie. “Aquí y ahora” pilla a Danny a contrapié en la entradilla, y al finalizar el último acorde, sin adornos innecesarios, presenta a la banda para volver a despedirse.
Por el tiempo que llevaban ya gastado, levemente se me pasó por la cabeza que igual estaba hecho, aún sabiendo que faltaban algunas que tienen que sonar sí o sí. Fue Víctor Fraile quien no dejó lugar a la duda espetando que no se iban.
He aquí, pues, el segundo retorno, con una encrucijada ganadora: brutal “Imaginaciones”, gigante “Naufragio” y evocadora “Hacia ningún lugar”.
No muy amigos de versionar nada, se guardan siempre en la última un espacio para recordar la grandeza de la música, hoy con un ligero retazo del “Salir” de Extremoduro y el trasfondo de U2.
Hablando de covers, a mí no me habría importado escuchar “Buena chica”, pero esta vez el setlist os diría que rozó la perfección.
Como después nos comentaba Alberto Martínez, guitarra del grupo, ahora es día cero. Me consta que llevaban mucho tiempo preparando esta bendita ejecución. Toca parar y esperar, pensar en el futuro.
No me cansaré jamás de alabar y exponer hasta donde pueda la inmisericorde grandeza de estos cinco señores. Mientras van o vienen, recordaremos estas más de dos horas de finales de primavera como la noche de que te hablé.
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1 comentario
Pedazo de resumen hacia el gran concierto que se marcaron los madrileños WHISKY CARAVAN presentando su nuevo álbum en La Riviera ante sus paisanos y con VERSOIX la cual estuvo a la altura como digna banda telonera.