TRIVIUM: ¡TRIUNFALES!

Sala La Riviera, Madrid

Este concierto ponía el final a una semana muy intensa, cargadísima y para todos los gustos, lo que seguramente ocasionó que la entrada la noche del domingo fuera muy floja.

Al principio la visita de los americanos se anunció junto a la compañía de AS I LAY DYING, pero cancelaron la gira seguramente porque no les sería rentable, ya que en las mismas fechas de los conciertos ibéricos estaban tocando en Canadá. Aun así, el cartel fue un auténtico lujo, con TRIVIUM como cabezas de cartel y como grupos invitados CALIBAN y UPON A BURNING BODY. Estos últimos tenían la tarea de abrir la noche y lo hicieron realmente bien, ganándose bastantes seguidores nuevos. Los de Texas lo dieron todo sobre las tablas de La Riviera, contagiando a toda la sala con su energía. Tocaron temas como “Showtime”, “Carlito’s Way” y “Texas Blood Money” y todos los miembros, trajeados, no pararon un momento quietos, especialmente su tatuadísimo cantante Danny Leal que animó constantemente al público, con el que conectaron desde el principio. Dieron buena cuenta de sus dos discos más temas como “Once Upon a Time in Mexico” o “Sin City”. Muy buenos estos chicos que se encargaron de calentar al público con su Deathcore, que está ahora de moda.

Los siguientes en salir fueron CALIBAN. Tengo que reconocer que este tipo de grupos no me suelen gustar demasiado, pero la verdad es que en directo me convencieron sobremanera, y es que lo bordaron desde el principio. Venían presentando un nuevo disco “I’m Nemesis”, del cual tocaron bastantes temas como “Dein R3.ich” o “Davy Jones”. Con un montaje especial, un telón de fondo (más grande que el de Trivium)  y con plataformas con el nombre del grupo, los alemanes no nos dieron tregua, haciendo que la gente hiciera desde walls of death, hasta el circle pit más particular que jamás he visto, ocupando la mayoría de la sala y dando vueltas alrededor de las famosas palmeras de la misma.

Tuvieron el bonito detalle de dedicar “We are the Many” al tristemente desaparecido cantante Mitch Lucker (SUICIDE SILENCE), y además tocaron el tema de sus compatriotas RAMMSTEIN “Sonne”, que les quedó de lujo.

Lo dicho, un concierto muy bueno, para mí los mejores de la noche, y que pusieron las cosas difíciles a los cabezas de cartel.

La expectación era máxima para ver a los americanos TRIVIUM, que venían presentando su quinto disco de estudio “In Waves”. A día de hoy son una de las bandas jóvenes más importantes, pese a no haber metido mucha gente en Madrid.

Comenzaron con el tema que da nombre a su nuevo plástico, con Matt Heafy muy sonriente, Corey Beaulieu brutal con su guitarra, Paolo Gregoletto contundente con el bajo y el batería Nick Augusto muy rápido, lo que ocasionó que en “Entrance of the Conflagration” se perdiera. Siguieron con “Like Light to the Flies”, “Rain” y “Into the Mouth of Hell We March” ofreciendo un concierto espectacular, sonando tremendos y con una puesta en escena muy buena, sobre todo por parte de su cantante, que ahora se muestra como un frontman muy sólido y confiado, recordando en ocasiones a James Heitfield.

Continuaron con “Down form the Sky” de “In Waves” y la ya mencionada “Entrance of the Conflagration” en donde demostraron estar muy seguros de sí mismos cuando pararon el tema al confundirse su batería. La volvieron a reanudar desde el “turu turururu” del solo de Heafy según comentó el voceras de forma jocosa.

La entrega tanto por parte de la banda como del público estaba siendo espectacular, incluso se vio a gente pasando por encima de las cabezas de la masa, cayéndose alguno de cara en el foso, lo que provocó que Matt pidiera al personal de seguridad que hubiera dos personas alerta cada vez que alguien llegara al foso, añadiendo que no quería terminar en la cárcel. Todos sabemos el motivo por el que lo dijo.

Prosiguieron con “Black” y “Watch the World Brun”, y la frenética “Ember the Inferno” fue cantada por Corey, como viene siendo habitual desde hace algunos años. El concierto ya iba llegando a su final pero no podían faltar los que son los dos singles más conocidos de Trivium, “Built to Fall” y “Dying in your Arms”, y atacaron también con el tema que les dio la fama que tienen hoy en día, “Pull Harder on the Strings of Your Martyr”.

No cortaron para hacer el paripé habitual antes de los bises, sino que optaron por tocar todo el concierto del tirón, arañando tiempo para poder meter un tema más. El final lo pusieron con “Torn Between Scylla and Charybdis” y “Throes of Perdition”.

Muy grandes los TRIVIUM, que han pasado en pocos años de ser una promesa a ser una de los grupos más importantes del panorama metálico moderno.

Texto y foto: Alfonso Dávila

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