Entrevista a Opera Magna: “El virtuosismo es necesario, pero no es lo único”
26 enero, 2016 1:40 pm Deja tus comentariosConsagrados como referente del power metal estatal más sinfónico y orientación al virtuosismo, los valencianos Opera Magna no se cansan de dejarnos con la boca abierta y vuelven a sobrecogernos con ‘Del amor y otros demonios. Acto II’, trabajo con el que arriban al ecuador de una trilogía en la que las emociones humanas se ensalzan en base a melodías penetrantes y magistrales laberintos instrumentales con el neoclasicismo muy presente. JAVIER NULA, uno de los dos guitarristas del sexteto, guía a JASON CENADOR por las vicisitudes de su nueva creación.
¿Qué novedades musicales se puede extraer de este segundo acto con respecto al primero de la trilogía?
“Al tratarse de la segunda parte de una obra aún por terminar, es lógico que siga en la misma línea que el ‘Acto I’, tanto por pertenecer al mismo proyecto como porque desde Opera Magna buscamos nuestras propias señas de identidad en cuanto al sonido. Sí que es cierto que en este segundo acto hemos dado más importancia a las orquestaciones, que si bien anteriormente la tenían, en este nuevo acto toman un protagonismo aún mayor”.
Virtuosismo hay a raudales en esta obra, e incluso habéis coqueteado más que de costumbre con el progresivo en el quinto y último tema, “La trampa del tiempo”. ¿Hasta qué punto es fundamental la pericia técnica a la hora de afrontar un tema de Ópera Magna?
“Pienso que en nuestro estilo el virtuosismo y la técnica son necesarios, pero obviamente no es lo único. Al final se trata de que los temas lleguen al público, que lo enganchen, y para eso hace falta técnica, pero también otras cosas que transmitan. Digamos que las canciones que componemos nos tienen que atraer, buscando un sonido en particular, un feeling que te hace sentir que estás ante un buen tema. Y luego, por supuesto, los solos con mayor o menos virtuosismo que llamen la atención en un género como el power metal”.
El aspecto sinfónico sigue cotizando al alza, con un trasfondo neoclásico al que parece imposible que renunciéis, ¿es una seña de identidad?
"Si algo caracteriza a Opera Magna es la parte sinfónica"
“Sí, yo pienso que si algo caracteriza a Opera Magna es la parte sinfónica. En algunos cortes más neoclásicos, en otros más llevados hacia las grandes bandas sonoras de compositores como Morricone o Elfman, pero ese tipo de orquestaciones que no son simplemente testimoniales, sino que encuentran un sentido dentro de la composición forma ya parte de nuestra identidad como banda”.
El power metal es uno de los géneros más expuestos a acusaciones de linealidad, y Ópera Magna está metido de lleno en ella. ¿Se hace complicado introducir variables estilísticas palpables en un estilo como el vuestro?
“Supongo que como en muchos estilos musicales, cada vez es más difícil sorprender a un público que tiene al alcance de su mano tanta música, muchísima de ella de gran calidad. Como se suele decir, está casi todo inventado, y a estas alturas creo que es más que un logro conseguir tu sonido, tus características propias que te hagan reconocible. Siempre hay quien puede jugar al “esto me suena a...”, pero al fin y al cabo acaba siendo algo normal. Aun así, desde Opera Magna siempre intentamos con cada trabajo darle una vuelta de tuerca al estilo, encontrar fórmulas que aun no hayamos exprimido, en la medida de lo posible”.
Cada una de las partes de esta saga se están grabando aparte e inmediatamente antes de su publicación, ¿ha habido mejoras en la producción a vuestro modo de ver en este disco?
“La mejora en cuanto al resultado final yo creo que se percibe bastante. Al final ha quedado un disco bastante redondo, y a pesar que a toro pasado siempre se te ocurren cosas que podrías haber hecho, ya sabemos que en esto de la música se trabaja muchas veces a contra reloj, porque si te duermes un poco el público puede perder algo de interés. De todas formas, creo que el resultado ha sido el esperado por la banda y de momento, la acogida parece confirmárnoslo”.
La épica y las emociones humanas siguen fundiéndose en vuestras letras, ¿cuál es el denominador común de los mensajes que podemos extraer de ellas?
“En ‘Del amor y otros demonios’, tanto en el primer como en el segundo acto, la temática es siempre la misma: el amor. Si es cierto que tratamos de contar una historia, acerca de una persona que se plantea el hecho de dejar de sentir, por el arma de doble filo que en muchas ocasiones se convierte este sentimiento. El acierto o el error ante la forma de afrontar un sentimiento tan fuerte como es el amor creo que sería un poco la línea a seguir en ‘Del amor y otros demonios’.”
¿Qué podemos esperar de los conciertos de la gira que llevaréis a cabo este año y para la que ya se han confirmado varias fechas? ¿Volveréis a América Latina?
“En esta nueva gira que empezaremos en el mes de mayo presentaremos el nuevo material en directo, con toda la ilusión y las ganas que llevamos poniéndole a esto desde que empezamos. Quien ya nos ha visto en directo sabe lo que puede esperarse, y por nuestra parte vamos a darlo todo. En cuanto a América Latina, estamos ya en movimiento con algunas fechas que esperamos que lleguen a buen puerto y podamos confirmar lo antes posible”.
¿Cuándo saldrá a la venta el tercer acto de ‘Del amor y otros demonios’? ¿Serán una tónica las sagas en vuestra discografía o tenéis ganas de afrontar un disco al uso?
"Parece que hubiera un cierto miedo a reconocer la gran cantidad de grupos emergentes que hay ahora mismo en la escena"
“De momento estamos centrados en preparar la gira de nuestro segundo acto y, aunque como antes te comentaba que en la música se trabaja un poco a contrarreloj, queremos cerrar cuanto antes la trilogía de un proyecto como este. En cuanto a fraccionar el disco, la verdad es que no lo hemos planteado. De momento para 'Del amor y otros demonios' se planteó así, pero tenemos que terminar la trilogía y luego veremos a ver qué ideas ponemos sobre la mesa”.
¿Por qué el power metal español – incluido el cantado en inglés aunque no sea vuestro caso – no trasciende más allá de nuestras fronteras europeas tanto como se merece por su calidad técnica y compositiva?
“Creo que viene un poco como consecuencia de lo que te comentaba anteriormente. Hay muchas bandas buenas, tanto en el power metal como en otros géneros, que se merecen un mayor apoyo para poder llegar a más lugares del mundo, pero al final acabamos quedándonos con los grupos de toda la vida, como si hubiera un cierto miedo a reconocer a la gran cantidad de grupos emergentes que hay ahora mismo en la escena. Si a eso le sumamos un género como el power metal, que en los últimos 15 o 20 años ha estado tan trillado, tenemos la situación actual”.
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