Crítica de Cronómetrobudú: Esperanto
1 diciembre, 2016 2:46 pm 5 Comentarios
Autoeditado
8/10
Los burgaleses Cronómetrobudú vuelven a la carga con ‘Esperanto’, un disco que no dejará indiferente a nadie y que experimenta con una diversidad de sonidos muy difícil de encontrar en cualquier grupo actual. Dicen que las “nuevas” bandas (sobre todo nacionales), si de verdad quieren salir adelante, tienen que mostrar al público algo distinto. Cronómetrobudú lo está haciendo (y de qué manera) y, sin embargo, a donde más está llegando su música es a Latinoamérica, habiendo incluso acompañado a Mägo de Oz en su gira del 2015 en México.
Siempre con la premisa de un sonido potente y mucho violín, lo que les da un toque de folk (supongo que de ahí la gira con Mägo) mucho más apreciable, sin embargo, en su anterior trabajo, ‘Ama-Gi’. Es por ello que para ‘Esperanto’ han tratado de mezclar todavía más estilos. Dicho folk rock se ve muy reflejado en sus dos primeros cortes, “El loco de tu fiesta” y “Nada”, elegido este último como single del disco y que cuenta con videoclip en el que muestran su lado más gamberro (aunque las letras sean en realidad bastante serias).
En “Esperanto” y “Piel sobre piel” empiezan a jugar con la electrónica, pasando luego al hard rock más puro en “La llama” o acercándose al metal con los riffs de “Hijos de un dios menor” y “El ciego en la autopista”. También experimentan con la música árabe en el comienzo y final de “El rey pasmado” y “Terciopelo y ternura” (con un fragmento en libanés antiguo), e incluso con el rap en "#Saharalibre", al más puro estilo de Narco y con una clara reivindicación. “Luna (louna)”, que también cuenta con un fragmento en esperanto, aparece como la canción más sosegada. El colofón final lo da su versión del clásico mariachi “Cielito lindo”, dedicado a su cada vez más numeroso público mexicano y en la que colaboran la voz de Txus di Fellatio, la guitarra de Carlos y la flauta de Diego Palacio, todos ellos miembros de Mägo de Oz.
Ya entendéis un poco mejor lo que quería decir al principio, ¿verdad?
Manuel Gamarra
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5 comentarios
Un acierto usar el nombre del Idioma Internacional (ESPERANTO), ya que es música de vanguardia!