Imagino que tienen mucha expectativa por esta gira por España. Cuéntame cómo esperan este reencuentro con el público español y las y los argentinos que viven en el país.

“Estamos sorprendidos y muy contentos por nuestro regreso a España. La última vez que estuvimos fue cuando hicimos un tour junto a M Clan. Pero después, debido a la situación económica en Argentina, se nos hizo difícil ir para allá. Sinceramente no estaba en nuestras posibilidades. Pero ahora de repente nos encontramos con algunos productores interesados y se generó esta posibilidad. Estamos muy contentos, porque vamos a poder reencontrarnos con un montón de gente que hace muchos años que no vemos".

Argentina y España tienen muchas cosas en común, más allá del idioma. ¿Cómo has sentido la recepción de la audiencia española durante los shows que brindaron en el país? Me imagino también la expectativa por encontrarse con muchos argentinos viviendo en sueño español.

“Tenemos muchas cosas en común: el idioma, la comida y otros puntos que hacen que uno se sienta muy cómodo. Además, hay muchos argentinos viviendo allá. Por más que estemos lejanos en el mapa, somos muy cercanos con España. Nos sentimos muy a gusto. Poder volver y caminar las calles por las que ya estuviste es genial. Ni hablar si uno lo hace estando de gira y no de vacaciones”.

Qué mejor que hacerlo pudiéndolo concretar mediante la actividad profesional, en este caso la música.

“Sí, no tiene comparación. Estamos muy contentos, cuando se dio la posibilidad nos miramos y nos alegramos muchísimo”.

Recién mencionabas distintas cosas que ambos países comparten en común. En Argentina y en otros lados llama mucho la atención la gastronomía española. ¿Algún restaurante o plato típico que recomiendes?

“Ya la comida de camarines (ndr: camerinos en España) es riquísima: tortillas, jamón ibérico, todo es espectacular. Por otro lado, los chicos de M Clan nos han llevado a comer a lugar increíbles: estuvimos en un sitio increíble en la zona de la Albufera de Valencia, también fuimos a otro restaurant en Santiago de Compostela donde comimos un pulpo ¡que en la puta vida nos íbamos a comer! (risas). De cada lugar me llevo un souvenir gastronómico. Cuando vas con la gente local que te lleva a comer a un garito en el que cocinan tal o cual cosa, es muy diferente. No tiene precio, no es lo mismo que ir a cenar a cualquier lado".

Recién mencionabas a los M Clan. Guasones compartió escenario con ellos, con Miguel Ríos y Enrique Bunbury. ¿Qué bandas españolas podrías recomendar que hayan llamado tu atención últimamente?

“De la última camada no tengo mucha noción. Pero sí hemos conocido a músicos como Leiva, que ha venido varias veces a la Argentina. Con él fuimos a cenar varias veces. Lo mismo con Fito Cabrales, es un fenómeno, un personaje total. Gente muy agradable. Con ellos dos generamos muy buena onda. Y con M Clan tenemos una relación muchísimo más cercana, constantemente hablamos e intentamos algo".

La banda actuando en el Estadio Obras Sanitarias de Buenos Aires

Guasones acaba de estrenar “Suerte”, el single que anticipa la salida de 'El Huracán Vol. 9', el nuevo disco de la banda. ¿Qué diferencias encuentras entre este LP y el anterior, 'Hasta el Final'?

"No sé si es muy distinto. Para el que lo ve de afuera, sí quizás encuentre alguna diferencia. Puedo decirte que en los últimos tres álbumes trabajamos de manera muy diferente: está todo grabado en directo, casi sin agregados. Trabajar con Jimmy Rip (Jerry Lee Lewis, Mick Jagger, Debbie Harry, Television, Pappo, Ratones Paranoicos, Los Piojos), que es el productor de dos de nuestros últimos discos, es increíble; de hecho, seguimos con él. Lo que tiene este nuevo material es que fue registrado de manera íntegra antes de la pandemia. El primer día de mezcla comenzó el confinamiento y sinceramente pensamos en descartar todo. Pensamos: “La excusa de hacer discos y canciones nuevas es poder tocarlas, no nos interesa tener algo si no lo podemos tocar”. En el medio, se fue dando todo y lo estamos terminando de mezclar. Nos quedan cinco canciones para mezclar y ya están por salir los nuevos adelante. Por otro lado, estamos tratando de digerir este formato de lanzar singles, sin el disco físico. Para nosotros es algo rarísimo, ya que provenimos de la vieja escuela. Vamos a hacer fuerza para que la vieja escuela vuelva a ser más importante que la nueva".

Tú y yo somos de una generación en la que íbamos a por los discos. Ahora todo se basa en la difusión por redes sociales y números de likes. ¿Qué pros y contras tienen las redes sociales?

“Cada banda las usa y aprovecha a su medida. Hay que acostumbrarse, usarlas y trabajar con ellas. Nosotros somos de la idea de que exponernos no nos suma. Las canciones hablan más por sí mismas. No somos un grupo de redes sociales: sí comunicamos y mostramos cosas, pero que no van más allá de lo que proponemos artísticamente. Por respeto a la gente que paga un ticket para vernos, evitamos exponernos y hacer cosas superfluas en las redes sociales. Las personas merecen el mayor de los respetos, son el motor de lo que hacemos: si no existiera nuestro público, no podríamos dedicarnos a esto. También hay que entender que somos de una generación que juntaba los números de teléfono de la gente para avisarles que íbamos a tocar. Antes la comunicación era muy compleja. Ahora hay 10 mil personas que están comunicadas con vos y saben perfectamente qué es lo que estás haciendo".

Salían a colocar carteles en los postes de luz de La Plata para difundir los shows… Otras épocas.

“Totalmente. No sólo que hacíamos eso, sino que sabíamos en qué horario específico llevarlo a cabo.  A veces salíamos a las tres de la mañana, pegábamos todo con engrudo y después nos levantábamos al día siguiente para ir a la facultad o al trabajo de ese momento y ya los habían cubierto con otras cosas. Decías: “¡Pero…la puta madre!” (risas). Fue un aprendizaje tremendo. Después de los teléfonos pasamos a los emails y luego ya explotó todo (risas)".

Tras dos años de pandemia, atravesáis un excelente momento artístico. Vais a tocar en el Quilmes Rock y en junio tenéis dos presentaciones en la ciudad natal, La Plata, en el Microestadio Atenas. ¿Cómo os sentís ahora, luego del parón?

“El regreso fue muy emocionante. Estuvimos un año y ocho meses sin tocar. En un momento de la pandemia, uno no sabía qué iba a pasar, si íbamos a volver a tocar o tener una vida parecía a la que existía previamente. Fue un nivel de locura tremendo. No queríamos retornar a media máquina, la idea era volver a algo parecido a lo que ya teníamos. Por eso estuvimos mucho tiempo parados. La vuelta fue fuerte: hicimos dos shows en Rosario a los que acudió mucha gente de distintas provincias. Acá en La Plata hace tres años que no tocamos, así que estos conciertos en el Microestadio Atenas generaron mucha expectativa. Es la primera vez que hacemos dos shows así de grandes en casa, así que estamos muy contentos. Para agosto o septiembre estamos pensando realizar un concierto en el estadio Obras por nuestros 30 años de carrera".

A propósito, ya son tres décadas de carrera, nueve discos de estudio con este último, tres en directo y shows por todos lados. ¿Cuál es el secreto para que una banda perdure tantos años?

“(Piensa). Ojalá supiera.  Es muy difícil encontrar en la vida cuatro o cinco personas que coincidan en la mayoría de las cosas que uno hace o piensa, principalmente en lo artístico; que tengan el motor para bancársela. Cuando se da eso, creo que todo es mucho más simple. Tienes que encontrar las personas correctas para compartir, porque después todo es familia. La música va haciendo lo suyo y las cosas se van dando. No creo que haya una fórmula, porque si no habría mil bandas que duraran 30 años. A nosotros se nos dio así: es increíble que todavía estemos en esto. Pasamos por todas las fases, es como con un hermano o con un primo; a veces te agotas. Pero cuando el motor y la música funcionan, eso reemplaza todo. Hace lo que no hacen las personas".

Incluso es una herramienta para sanar.

“Totalmente. Incluso a veces puedes estar peleado o distanciado, pero cuando la música va para adelante, es tremendo. Cuando funciona eso, lo hace todo lo demás y las cosas son más simples".

¿Qué disco te impulsó a empuñar la guitarra y formar una banda?

“Uf. ¡Qué pregunta difícil! En mi casa se escuchaba mucho a The Beatles y The Rolling Stones, pero no sé si fueron disparadores para tocar la guitarra. El click en mí lo hizo un disco de Bob Dylan en el que Mark Knopfler toca la guitarra, 'Slow Train Coming' (Columbia, 1979). Pensé: “Acá hay algo diferente”. En ese LP encontré algo que no estaba en otros discos. Me encantaron los detalles finos de la guitarra; no es un disco de guitarristas. Va más allá, no está explotado de guitarras sonando. George Harrison también sabía cómo adornar las canciones. No era un Jimmy Page, pero conocía la medida justa a la hora de condimentar una canción”.

¿Qué le puedes decir al público español que os espera?

“Tenemos muchas ganas y ansiedad de subir al avión y estar allá. Queremos reencontrarnos con la gente, amigos y poder tocar la música que hacemos. Nos encanta ir a España y ojalá lo podamos repetir muchas veces”.

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