Crítica de Ignis Anima: Bajo el yugo del tiempo - MariskalRock.com : MariskalRock.com

Ignis Anima

Bajo el yugo del tiempo

Autoeditado (2017)

Por: Pablo Camacho

La banda madrileña Ignis Anima demuestra su ambición y sus ganas de crecer con este nuevo álbum que supone un enorme salto de calidad. Grabado, ya de manera profesional, en los Fireworks Estudios y con la formación de sexteto, han descargado todo lo que tenían en un álbum de power metal puro, soñador y honesto. La voz de Izzy, las guitarras de Rik y Jorge, el bajo de Iván, la batería de Sergio y el violín de Mercedes nos llevan de la mano en el espacio y el tiempo para abordar los 14 cortes de este ‘Bajo el yugo del tiempo’.

“Tempus Fugit” hace las veces de introducción con unas suaves melodías de teclado que acunan al oyente para dar paso a una fanfarria de tintes épicos y melancólicos, coros incluidos. Sin pausa posible, entra con toda la fuerza del mundo el violín de Mercedes en “Cicatriz”. El tema está lleno de espíritu, de lucha y positividad. Da gusto empezar así, te vienes arriba, conectas y en seguida quieres más. Una oriental introducción da paso a una exhibición instrumental de guitarra, batería, bajo y violín en “Pirámides de Sangre”. El tema nos sitúa rápidamente en el estilo que propone la banda y su letra nos traslada a los tiempos de los grandes faraones egipcios. Es un corte mucho más cargado, de un power metal clásico, en el que los coros y los solos de guitarra y violín dejarán a más de uno exhausto. A dos guitarras arranca un inevitable headbanging “Heraldo del hambre”. Podemos disfrutar aquí con la colaboración de Juanba Nadal (Dragonfly) que aporta fuerza y juego a las dos voces. El crujir de la madera y el sonido de las olas nos traslada directamente a la cubierta de un barco en “Leyendas de sal y marea”. Muy acertado también ese inicio de canción a capella, propio de los cantos marineros. Los instrumentos consiguen un efecto con el que nos balancean cual nave arriba y abajo. Acertadísimo tema de piratas y lobos de mar. Es increíble el buen trabajo que realiza la banda para contextualizar sus temas más allá de las letras. En el caso de “Bushido” nos subimos a lomos de un corcel y empezamos a galopar a lo Iron Maiden. Honor y acero es lo que encontramos en esta canción que propone una visita al país del sol naciente de tiempos feudales.

Nos ponemos en la piel de Orfeo para ir en la búsqueda de nuestra amada “Eurídice” con un tema dulce como nuestra lira, pero a la vez lleno de rabia y dolor. “No es solo música” no permite que dejemos los pies firmes sobre el suelo con un despliegue de caña y diversión. Este tema es todo un homenaje al heavy metal, como nos llega desde la tierna infancia y como crecemos con este género que atrapa. Supone una ruptura con la temática histórica general del disco, pero sigue tratando al tiempo y observando su transcurrir. Será una canción imprescindible en los conciertos de Ignis Anima a partir de ahora.

Nos convertimos en un duro inquisidor que decreta una sentencia en “Santa ejecución” y en un contador de historias en “Alma en llamas”, en la que se nos presenta a la hermandad de los Ignis Anima que da nombre al grupo que nos concierne. Los madrileños nos invitan entonces a cruzar el gran charco para relatarnos con crudeza la conquista de América en “Tierras estériles”. Sufrimos tras los muros de una ciudad asediada en “Tras la última frontera”, que refleja perfectamente la presión sufrida por aquellos que solo tienen el escudo del tiempo. La acústica se apodera de nosotros en la despedida que supone “Bajo el yugo del tiempo”, en la que Fernando Asensi, productor de los Fireworks Estudios en los que se ha grabado el álbum), narra una triste carta junto al violín y la guitarra.

El álbum se cierra con un pequeño regalo para sus seguidores. Una revisión de “Arde el Valhalla”, una de las canciones más populares de su disco ‘Albores de guerra’. Con este esfuerzo demuestran la evolución y el progreso que ha supuesto el álbum ‘Bajo el yugo del tiempo’.

Un disco de power metal clásico, aderezado con un violín, en muchos casos protagonista, que muestra la inquietud de una joven banda con mucho potencial aún, pero que demuestra que ya está capacitada para codearse con los grandes. Hacen una música atractiva, divertida y accesible, que convierten a ‘Bajo el yugo del tiempo’ en un disco atemporal y disfrutable en cualquier momento.