VIÑA ROCK PASADO POR AGUA

1 mayo, 2011 1:44 pm Publicado por  Deja tus comentarios

Un servidor tuvo la oportunidad de dejarse caer por  Villarrobledo (Albacete) para asistir al festival nacional por antonomasia, el VIÑA ROCK. Cómo no, mi “equipo” y yo llegamos allí el Jueves noche con el fin de disfrutar de toda la fiesta; porque VIÑA ROCK, más que un festival, es una fiesta y una experiencia única. Un ambiente de lujo lleno de música de todo tipo (rock, hip hop, reggae, metal, electrónica…) en cada una de las raves, conviviendo en paz y armonía con todo tipo de “personajes” disfrazados de sevillanas, barrenderos, esqueletos…

La nota negativa la puso, sin duda, el mal tiempo. Desde que llegamos allí no paramos de mirar al cielo esperando que las nubes se apiadaran de nosotros… evidentemente, no tuvimos suerte. Otro punto flaco, bajo mi punto de vista, fue la organización… y es que esta vez VIÑA ROCK contaba con menos servicios públicos (baños, fuentes, duchas, etc.) que de costumbre.

VIERNES

A eso de las 19:30 saltaron al escenario Villarrobledo los navarros LENDAKARIS MUERTOS, dando comienzo al show con el himno de la URSS a modo de intro. Siguieron con temas como “Detector de gilipolleces” o “Esto no es punky”. Su cantante, Aitor, ofreció un show divertido y eufórico; hablando continuamente con el público, subiéndose encima de amplis, correteando por la arena con sus fans que le subían en volandas, etc. Mención especial merecen sus más acérrimos seguidores, los cuales estuvieron allí presentes desde el principio sin dejar de alzar las manos a pesar del temporal que hacía. Sonaron también temas como “Besos gaztetxeros”, “Violencia en acción” u “Oso panda”. Aitor no paraba de bromear con el público diciéndoles que no podían decir tacos ni meterse con la monarquía, únicamente enseñar pezón puesto que estaban retransmitiendo para la televisión. Concluyeron la actuación con su mítico “Veteranos de la Kale Borroka”.

Sorprendente fue la puntualidad del evento, y es que era un reloj de maquinaria suiza en cuanto a inicios y finales de actuaciones se refiere. De este modo, saltaban a escena HAMLET en el escenario Metálika a las 20:30. Daban comienzo al directo con “Tortura-visión”, “Vivir es una ilusión” y “Denuncio a Dios”. Una gran puesta en escena de no ser por el sonido; repleto de acoples y enmarañándose en ocasiones con el que llegaba desde el escenario Naranja. Buena asistencia del público y una banda totalmente entregada -“Vamos a dejarnos los huevos, que se nos oiga y esto siga adelante”- a la par que emotiva -“La música es algo de dos: nosotros, el grupo y vosotros, el público”-. Dejaron caer temas como “Egoísmo” y “Jodido facha” antes de cerrar con “Irracional”.

De vuelta al Villarrobledo para ver a PONCHO K que actuaba a las 21:30, siendo este la primera de las actuaciones “grandes”, de 70 minutos. Saltaron a las tablas con “Destrucción”, “Cuando deje de vivir a la intemperie” y “Te digo que no te quedes”. Contó con numerosas sorpresas, como por ejemplo la voz de Vito (Sínkope) en “Pescaitos”. Pudimos ver un aumento en la asistencia de público puesto que el temporal empezaba a amainar para contemplar a esta banda practicante de un rock urbano andaluz muy influenciado por Triana pero también por Extremoduro, Albert Pla… Iban sucediéndose los temas hasta llegar a al fin del show con la interpretación de “Una historia entre las manos” y “Corrientes demolientes”, de su ultimo y penúltimo disco respectivamente.

Seguimos con el vaivén de un escenario a otro, esta vez para presenciar la contundente descarga de los asturianos WARCRY que saltaban a escena a las 22H45 en el escenario Metálika. Comenzaron su descarga con “La última esperanza” y “Nuevo mundo”. Sin duda hablamos de unas de las bandas más importantes en el panorama musical nacional, la cual reivindica su status directo tras directo y disco tras disco. De esta manera comenzaron a desgranar temas de su último disco “Alfa” tales como “Cobarde” o “La muerte de un sueño” a la vez que compaginaban su set list con himnos tan grandes de la banda como “La vieja guardia”, “El guardián de Troya” o “Tú mismo”. Una actuación pletórica repleta de poder, técnica y entrega por parte tanto de la banda como del público. También hubo lugar para los “pianitos” -tal como los denominó su cantante, Víctor García- y temas más emotivos como “Un poco de fe”. Remataron la faena con uno grande entre los grandes: “Trono del metal”.

Iba pasando la noche y poco a poco llegaba el final de las actuaciones musicales hasta que llegase el nuevo albor. Ahora era turno de ROSENDO, esta vez en el Villarrobledo y a la hora de las brujas. Este power trio comenzó la actuación con una intro instrumental 100% interpretada -nada de reproducir el CD y saltar al escenario al finalizar el track- para continuar con “Ni gozo ni calvario”. Una actuación algo insulsa y aburrida en la que dejaron de lado temas de peso, aunque cerraron la actuación con “Masculino singular”, “Agradecido” y la versión de Leño “Maneras de vivir”.

Llegaba la hora de clausurar por ese día el Metálika, esta vez con la actuación de ILL NIÑO a la 01H15. Flamante show el de estos  numetaleros de New Jersey con raíces latinoamericanas. Destacar especialmente la potencia sonora y el conjunto de luces con el que contó esta actuación y sobre todo, el juego de éstas en su intro -para mí abrumadora-. Comenzaron con “My resurrection” parar continuar con temas como “This is war” o “I am loco”. Llegado este punto de la noche el temporal ya nos dejó de calar, pero el cansancio hacía mella y el público estaba poco entregado… cosa que pesó en el propio grupo. Su cantante, Cristian Machado, no dejaba de intentar animar a los asistentes. Unos auténticos “bestias” que no pararon de moverse por todo el escenario, hacer mención de sus grupos amigos -como por ejemplo Lamb of God- y dar las gracias a los organizadores del festival por realizar algo tan bonito. El tema “Liar”, de su segundo disco “Revolution / Revolucion”, puso el broche final a la velada.

Y “por fin” llega el final de la noche con la actuación de MADBALL a las 02H30 en el Villarrobledo. Se trata de una de las bandas más importantes en el hardcore neoyorquino. Un servidor se encontraba presente en primera fila, apabullado por la brutalidad del conjunto y con los pogos que organizaban los allí presentes.

TEXTO: BMC & FERNANDO GARCÍA

FOTOS: PABLO RODRÍGUEZ & FERNANDO GARCÍA

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Esta entrada fue escrita por Redacción

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