Un promotor adeuda a Slayer más de 123.000 euros y se libra de pagárselos por declararse en bancarrota

31 mayo, 2022 10:41 am Publicado por  – 2 Comentarios

Foto: Iñigo Malvido

Slayer vuelve a ser protagonista de la actualidad pese a haber pasado ya cerca de tres años desde su retirada, pero lamentablemente no se trata de un anuncio de regreso, sino de la más que probable situación en la que los de Kerry King verán cómo la deuda de un promotor con la banda queda en nada al declararse este en bancarrota.

La gira con la que Slayer se despidió de sus miles de seguidores en todo el mundo pasó en el verano de 2018 por el festival islandés Secret Solstice, y unos meses después llegaba la demanda presentada contra este por el impago de una cifra cercana a los 123.000 euros. Como informamos en aquel momento, el abogado de Slayer, Jón Gunnar Ásbjörnsson, escribió una carta a la ciudad de Reykjavík sobre el asunto, declarando, entre otras cosas, que además de no haber pagado la reclamación mencionada anteriormente, la organización del festival retuvo el 20 por ciento de los ingresos del grupo para pagar retención de impuestos a las autoridades fiscales. Víkingur Heiðar Arnórsson, el nuevo gerente del festival desde noviembre de 2018, dijo más tarde que, si bien el festival ha tenido dificultades financieras, tiene planes de pagar a los artistas restantes que deben dinero a su debido tiempo. También se ha sustituido la compañía encargada de organizar el festival, fundando Live Events para dicho cometido.

Ahora, la información que llega desde el medio islandés Visir apunta a que la sentencia positiva a favor de Slayer y su compañía de representación, K2 Agency Limited, podría quedar en nada al haberse declarado el promotor Friðrik Ólafsson en bancarrota y haber vendido el festival a varias empresas.

Las palabras de Víkingur Heiðar Arnórsson sobre que las deudas del festival se saldarían, se entendieron por parte de K2 como una declaración vinculante, al igual que entendió el tribunal del distrito, pero el tribunal nacional anuló esta decisión. Tal como informa Visir: “Con respecto a las pretensiones de daños y perjuicios de K2, la Audiencia Nacional señaló que había una sentencia firme de que Friðrik Ólafsson debía pagar la reclamación económica. K2 había recibido como depósito legal un apartamento propiedad de Friðrik para garantizar la reclamación y exigió la venta forzosa del apartamento para hacer cumplir el pago. El tribunal no consideró que Friðrik pudiera pagar la reclamación financiera de la agencia y que no sería oportuno exigir que Guðmundur (miembro de la junta de empresas) y las tres empresas realizaran los pagos. Por lo tanto, Guðmundur y Live Events, L events y Lifandi viðburðir fueron absueltos de acuerdo con los requisitos de K2 en este momento”.

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