De sobra es sabido que la llegada de nuevos componentes casi siempre añade vitalidad a un grupo con solera. Lo vimos en Judas Priest con la incorporación de Richie Faulkner en 2011 y también experimentaron una energía similar los alemanes Scorpions cuando incorporaron a sus filas al antiguo batería de Motörhead Mikkey Dee tras la muerte de Lemmy Kilmister.
El guitarrista Rudolf Schenker recuerda en una entrevista para Ultimate Classic Rock ese complicado periodo de transición. La situación en el grupo antes de la llegada de Mikkey Dee era la siguiente: “Intentamos con todas nuestras fuerzas que James Kottak volviera con nosotros. Cuando vives en Los Ángeles es muy fácil dispersarte. Creo que es un dato muy importante el hecho de que siempre tenía que venir de Estados Unidos, de California a Alemania, cuando teníamos que empezar la gira, hacer promoción y cosas de esas. No es tan fácil volar una distancia tan larga. Es muy duro de llevar. También tenía problemas familiares”.
Llegó un punto en el que la situación con Kottak era insostenible: “Intentó arreglar todo con el alcohol hasta que no pudimos tocar más con él. Estábamos tan cerrados en nosotros mismos que podíamos ignorar la batería cuando tocaba mal. Así hacíamos los conciertos hasta que dijimos: “Mirad, no podemos aguantar esto más porque conlleva demasiada energía”. Lo llevamos al lugar de rehabilitación donde estuvo Eric Clapton en una isla y pensábamos que estaba preparado de nuevo, pero entonces recaía en la situación anterior”.
El fichaje de Mikkey Dee fue idea de otro miembro de Scorpions: “Matthias dijo: “Eh, chicos, Mikkey Dee ahora está disponible”. Lemmy había muerto y eso era demasiado horrible. Queremos a Lemmy y Motörhead porque hemos sido buenos amigos a lo largo de los años. Así que dijimos: “¿Por qué no? Vamos a ver”. Ensayamos con él y encajó perfectamente porque es un tipo de batería muy acelerado y toca parecido a mí, varios milisegundos antes del ritmo”.
Schenker tiene claro lo que aportó el nuevo aporreador a la banda: “La energía de Dee nos ayudó a sonar como un grupo joven. Ahí teníamos a Mikkey Dee apoyándome y a Pawel como bajista, puede tocar cualquier cosa que le pidas. Ahí estaba junto a Matthias y Klaus, que todavía puede cantar como un jilguero, lo cual es fantástico en una carrera de más de cincuenta años”.
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2 respuestas
Era un buen bateria James Kottak para SCORPIONS pero entre el puto alcohol y su mierda patriotica yanky se echó a perder.
Tremendo el bateria.
Tremendo el bajo.
Trememdas las guitarras.
Tremendo el vocalista.
Tremendos Scorpions !!!