La entrada más cara para el concierto de Kiss en año nuevo asciende casi a 25.000 dólares… ¡y no te garantiza verlo en persona!

13 diciembre, 2020 9:53 pm Publicado por  2 Comentarios

El show con el que la banda más caliente del mundo despedirá 2020 y de la bienvenida a 2021 en el Hotel Atlantis de Dubái (Emiratos Árabes Unidos) este 31 de diciembre promete no sólo ser uno de los más grandes de la trayectoria de Kiss, sino también de toda la historia de la música en términos de producción. Sabemos por los propios Paul Stanley y Gene Simmons que la banda prefiere no llevar a cabo un show de año nuevo a medias tintas, lo que en sus términos se traduce en una actuación que bata un récord mundial.

En consecuencia a la magnitud de este show, que promete ser en el que más pirotecnia haya usado Kiss jamás, los precios de las entradas son también cuanto menos elevados. Por una parte, la gran mayoría de fans del combo podrán disfrutar de este show vía streaming, encontrándose sus tickets entre los 50 hasta los 999 dólares (disponibles aquí) en función de los extras adquiridos. Sin embargo, aquellos incondicionales de los neoyorkinos que puedan y quieran podrán adquirir experiencias VIP, entre las que destaca la de 25.000 dólares y que incluye una enorme lista de servicios.

Por esta cantidad de dinero dos personas podrán disfrutar de cinco noches en una suite del mencionado hotel, servicio de chófer en Dubái así como de cena y bebidas gratuitas antes del show, acceso diario al parque acuático Aquaventure y al Aquarium Lost Chambers, la posibilidad de sacarse una foto con la banda (con medidas de distancia y uso de mascarillas), una guitarra o un bajo de Paul o Gene firmados (a escoger), ser entrevistados para la película que se rodará de este evento y hasta acudir con Kiss a las pruebas de sonido.

Todos estos lujos se unen a una dilatadísima lista de recuerdos y artículos de merchandising que quienes acometan este desembolso se llevarán. En cualquier caso, los 25.000 dólares que cuesta esta experiencia tampoco garantizan ver el concierto de cerca, ya que la opción de reservar asientos a pie de pista conlleva un sobrecoste que, de no asumir, obligarán a los fans a ver a Kiss desde la terraza de la suite en la que se alojen, que distan más de 75 metros desde la zona de celebración del show. Esta distancia obligaría a tener que conformarse con ver la actuación por televisión para disfrutarla lo máximo posible o a tener que hacer uso de unos buenos prismáticos.

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