Z! Live Rock Fest: Metal contra las tormentas

Helloween

El jueves, 8 de junio, empezamos el festival con un sabor de boca un tanto agridulce debido a la cancelación de la jornada de bienvenida en Toro, ya que la lluvia hizo de las suyas. El cielo amanecía nublado en la capital zamorana, con pronósticos de lluvia para el inicio del espectáculo. Poco después del mediodía, caía una tromba de agua que hacía peligrar el inicio del festival. Y así fue. Mientras esperábamos impacientes la apertura de puertas, concertada para las 15:00, el sol hacía acto de presencia y ajusticiaba a los allí congregados.

Jueves 8 de junio

El tiempo pasaba y las puertas seguían cerradas hasta que, finalmente, las abrieron al público pasados cuarenta y cinco minutos de la hora prevista. A parte de esta demora, nos encontramos con que los cuatro primeros grupos del festival (The Broken Horizon, Diabulus in Musica, Rise to Fall y The Heretic Order) no iban a tocar, información recibida poco antes de acceder al recinto.

Resumiendo, se podía acceder al recinto, pero no iba a comenzar el festival hasta las 18:20, casi tres horas de espera que se hicieron eternas. Es comprensible que después de tanto tiempo organizando un festival surjan imprevistos, y más si se trata de las inclemencias del tiempo, pero un poco más de información a los asistentes (como avisar con más antelación del retraso en la apertura e inicio del festival) no habría venido mal, simplemente para evitar enfados y desilusiones.

Con el cielo cubierto y amenazando lluvia comienza el Z! Live Rock Fest 2023. ¡Por fin!

Ross The Boss

A las 18:20 exactas y fiel a su cita aparecía en escena el gran guitarrista Ross The Boss (ex-Manowar) junto con su grupo. En la hora de show que tenían por delante nos deleitaron con temas como “Blood of the Kings”, “Black Wind, Fire and Steel”, “Wheels of Fire”, “Kings of Metal” o “Battle Hymn”, majestuosamente interpretados, con un sonido óptimo.

“Fighting the World” o “Hail and Kill” fueron sus últimas canciones, con las que los espectadores disfrutaron con cada letra y las corearon sin cesar.

Da gusto ver al grupo y al excelente guitarrista que es Ross sobre los escenarios y la energía que desprenden juntos. Después de todo lo ocurrido los días previos, fue agradable disfrutar de un inicio de festival con tanta potencia.

Ross The Boss

Septicflesh

Debido a pequeños problemas técnicos (rápidamente arreglados), los helenos no pudieron cumplir con su hora de inicio marcada. Venían con todo a Zamora, con ganas de conquistar el escenario, y tenían al público súper entregado. No era para menos.

Sonaron temas como “Portrait of a Healess Man”, “Pyramid God”, “Neuromancer”, “The Vampire From Nazareth”, “Hierophant”, “Martyr”, “Anubis” o “Dark Art”. ¡Vaya show nos brindaron! Olvidando los problemas iniciales, la calidad de su música es apasionante. Los griegos nunca defraudan en sus directos.

Septicflesh

Symphony X

Sin tiempo para el respiro salían a escena los norteamericanos Symphony X. Se notaba que iban llegando los platos fuertes del día.

Los de New Jersey hicieron las delicias del respetable congregado a base del metal progresivo que les ha hecho famosos. Canciones como “Nevermore”, “Sea of lies”, “Evolution”, “Kiss of Fire”, “Run with the Devil” o “Set the World on Fire”, nos hicieron movernos sin cesar, con una energía sobresaliente y un sonido pulcro y logrado que consiguió una delicia de concierto.

Volvían los nubarrones a escena, pero los estadounidenses siguieron con su buen hacer encima del escenario, con el público entregado a pesar de la incipiente lluvia. Grandioso concierto que no dejó indiferente a nadie.

Symphony X

Amorphis

Nos acercábamos a las 21:50 y llegaba el momento de los fineses. Había gran expectación por ver a la banda. La mezcla entre metal progresivo y melódico con esa voz gutural es inmejorable.

Tuvimos un gran inicio de espectáculo por parte de los nórdicos gracias a los temas “Northwards”, “On the Dark Waters”, “Bad Blood” y “Silver Bride”, con un sonido perfectamente limpio, tanto en instrumentos como en voz, así como un excelso juego de luces que ayudaba en la caída de la noche.

En definitiva, un deleite para los oídos y la vista. A pesar de la incesante lluvia, los finlandeses siguieron con su espectáculo. No se quedaron cortos los allí congregados, que aguantaron estoicamente bajo la lluvia coreando todos y cada uno de los acordes del grupo.

“House of Sleep” y “The Bee” fueron sus últimas canciones interpretadas. Simplemente increíbles.

Amorphis

Michael Schenker Group

Llegaba el momento del cabeza de cartel del día, que no era otro que mítico guitarrista que fuera miembro de UFO y Scorpions, Michael Schenker, y su propia banda. ¿Qué decir de esta gran figura del metal que lleva deleitándonos con su excelente hacer durante 50 años? Simplemente increíble.

El público, a pesar de la lluvia, no paró de animar y corear cada canción. “Cry for the Nations”, “Doctor Doctor”, “Looking for Love”, “Lights Out”, “Red Sky”, “Shoot Shoot”… uno tras otro, no dejaron de sonar himnos para la parroquia metalera. Además, por fin, el tiempo daba un respiro.

Impecable sonido de principio a fin, no fallaron ni un acorde. Interpretaron también: “Let it Roll”, “Natural Thing”, “A King Has Gone”, “Rock Bottom”, “Too Hot to Handle” y “Only You Can Rock Me”.

Un show digno de ver. Se aprecia que llevan unos pocos años sobre los escenarios y la reputación que tienen es bien merecida. Un magnífico show.

Michael Schenker Group

Barón Rojo

Era la hora de los míticos Barón Rojo, que hicieron aparición en el escenario a la hora programada. Se encuentran celebrando el 40º aniversario de su disco 'Metalmorfosis', que fue interpretado de principio a fin.

Sonaron temas como “Casi me mato”, “Rockero indomable”, “Tierra de vándalos”, “Hirosima”, “El malo”, “Invulnerable” y las más coreada por todo el público presente, la mítica e incombustible “Siempre estás ahí”.

Hubiera estado bien escuchar alguno de los archiconocidos himnos que posee la banda. El público congregado estaba entregado al doscientos por cien. Una lástima que tanto el sonido como la voz (apenas audible) no estuvieran a la altura ni del festival ni de la leyenda del gran grupo que nos ocupaba.

Barón Rojo

Lèpoka

Mal momento para empezar el show. Un aguacero increíble caía en esos momentos en todo el recinto. Cabe destacar el extraordinario empuje de los castellonenses, que durante todo el concierto no pararon de animar a los pocos valientes que aguantaron el chaparrón.

Tuvieron un sonido sorprendentemente bueno para el nivel de agua que estaba cayendo en esos momentos, y aún más sorprendente fue que no hubiera ningún fallo técnico debido a la lluvia.

Mientras nos estábamos calando sonaban temas increíbles como “Beerserkers”, “Seguimos en pie”, “Yo controlo”, “Beber para creer” o “Chupito”. Una confraternización y química brutal la que hubo entre el grupo y el público. Fantástico concierto bajo la lluvia.

Lépoka

Celtibeerian

Rematamos el primer día del festival con los manchegos. El número de asistentes había bajado considerablemente (muchas horas y lluvia), pero estaban ahí para disfrutar del que, personalmente, fue el mejor concierto de esta jornada.

El buen rollo y hermandad inundaba el recinto con los temas interpretados por el grupo, como “The Wolf I Am”, “Fear my Beard”, “The Booze Song” o “Looking for Beer”.

Entre su repertorio nos encontramos con un tema de su nuevo álbum (que todavía no ha visto la luz) “Beer Drinking”. Espectacular grupo para cerrar el día. En mi humilde opinión, deberían estar mucho más arriba en el cartel.

Celtibeerian

Viernes 9 de junio

Volvimos al recinto de IFEZA para deleitarnos con una segunda maratón de conciertos. Llegada la hora de apertura (15:00), nos encontramos con que las puertas estaban cerradas. Tuvimos que esperar hasta las 15:15 para poder acceder al recinto, lo cual no sería un problema si no fuera porque el día anterior estuvimos esperando hasta 45 minutos a que esas mismas puertas se abrieran para el público.

El escenario se tornaba parecido al día anterior: un cielo encapotado con riesgo de lluvia, pero al parecer las previsiones no eran malas. Los escenarios preparados, la zona del público, aunque húmeda y con algún charco que otro, estaba sorprendentemente practicable.

El público iba accediendo poco a poco para disfrutar del festival, aunque un poco incrédulos viendo los nubarrones que estaban encima.

Kritter

Empezamos el día con nervios debido a las previsiones meteorológicas pronosticadas para el viernes, pero aun así saltaba a escena la banda de metal salmantina Kritter, creada en 2006 y formada por Francisco José (voz), Javier (guitarra), José Antonio (guitarra), Javier (bajo), Rodrigo (teclados) y David (batería).

Ofrecen un gran despliegue de energía sobre el escenario. No es nada fácil empezar abriendo en un festival, pero lo consiguieron con nota. Algunos de los temas interpretados fueron: “Terror in Tokio” o “Your Sacrifice”, con una rabiosa descarga de potencia durante todo el show, lo que, añadido a los tatuajes pintados en la cara de los integrantes, hace que el grupo tenga un fuerte potencial.

Durante el espectáculo pudimos observar a una bailarina con abanicos que se movía al son de la música en un par de temas. “Slow Burn”, canción de su último disco, 'The Special K', es una canción de heavy metal puro con varias partes de voz gutural, lo que personalmente me agradó mucho. Un gran inicio del día por parte de los charros.

Kritter

Jolly Joker

Llegaba el momento de los valencianos, una banda es creada en 2009, de las que lideran su género en España. Consiguen innovan con una mezcla de glam/sleazy y hard rock muy bien llevada a cabo.

Abrieron su setlist con “Rockin’ in Stereo”, en la que tuvieron unos pequeños problemas con el micrófono que fueron subsanados rápidamente por los técnicos de sonido.

Canciones como “Hey You”, “Blood Velvet” o “I Don’t Care” hicieron las delicias del público, que disfrutó de un grupazo con mayúsculas. Atesoran un aplomo e irradian una energía fastuosa desde el primer minuto.

Los problemas técnicos iniciales quedaban en el olvido. El cantante (Lazy Lane) no paró de jugar sobre el escenario, arrodillándose, tumbándose y animando al público como un auténtico showman y frontman.

Otros temas interpretados por la banda fueron: “Fuck it All”, “Sky is so High” o “Nothing’s Sacred", que terminaron de dejar rendidos a los asistentes.

Una actuación de diez para una de las mejores (si no la mejor) banda de glam de nuestra patria.

Jolly Joker

Omnium Gatherum

Cercanas las 17:00 de la tarde saltaban a escena los finlandeses Omnium Gatherum, banda que nos lleva entusiasmando 27 años con su potente death metal melódico, aunque se aprecian influencias de metal progresivo en sus trabajos más recientes.

“Frontiers” fue su primer aviso para los allí reunidos, demostrándonos de qué pasta están hechos. “Paragon” y “God Go First” también fueron unos primeros temas exquisitos.

Con un sonido perfecto e impoluto continuaron arengando a los metaleros. Desde el inicio de los primeros acordes se observaba el buen hacer de los fineses, que tienen una gran química entre ellos y para con el público.

Se nota que ya están asentados firmemente en la escena metalera internacional. Cero nervios por parte de la banda, algo provocado por los años que llevan juntos encima de los escenarios y el calor del público.

“Skyline” y su versión de “Maniac” siguieron haciendo los deleites del respetable. Fue el tema “The Unknowing” el que consiguió llevarse la palma del show, con un sonido increíble y un solo de guitarra envidiable y perfectamente ejecutado.

Asombroso el pundonor y la rabia que irradian los nórdicos, una excelsa banda del death metal.

Omnium Gatherum

El Altar del Holocausto

Pasadas las 17:30 y empezando a caer unas gotas de agua, comenzaba la homilía, y no podía ser impartida por nadie más que por el grupo salmantino creado en 2012, con una mezcla de post rock y doom instrumental.

Con una introducción emocionante y vibrante nos acogían a todos los feligreses para su sermón.

Ataviados con sus túnicas de un blanco impoluto se presentaron en el escenario descargando su adrenalina sobre los congregados, que disfrutaron de un auténtico festival de música y fulgor.

Estos chicos tienen un don para hacerte comprender nuevos sentimientos, con un sonido intachable y virtuoso. En un momento del concierto, se abrió un hueco entre los espectadores y uno de ellos saltó hacia el público dando inicio a un pogo brutal pero con aires celestiales.

Por desgracia, lo bueno dura poco, ya que a estas alturas ya estaba cayendo un aguacero increíble sobre los penitentes que nos encontramos en el recinto. Se tuvo que acabar el concierto a causa de la lluvia. Gran infortunio para los de salamanca, que el año pasado vieron cancelado su concierto en este festival por el mismo motivo.

Espero con fe renovada que el año que viene puedan volver y, por fin, ver cómo terminan su fantástica homilía. Tienen un aura extraordinaria.

El altar del Holocausto

Una vez dentro de edificio, nos encontramos con tan solo una barra y el puesto médico, nada más. No había sitios para sentarse, nada de nada. Personalmente, un poco de falta de previsión en este aspecto.

Desde las 18:00 de la tarde hasta las 21:45 aproximadamente, no tuvimos noticias de absolutamente nada por parte de nadie (organización inexistente). Ninguno de los allí presentes sabía si la jornada continuaría o se cancelaría, hasta que un escueto comunicado nos informó que la organización estaba reunida sobre qué hacer y que el grupo sueizo Eluveitie se había prestado a tocar unos temas dentro del edificio.

Eluveitie

Los suizos se ofrecieron para tocar unas canciones en acústico dentro del edificio del IFEZA, a lo que la organización accedió, dando paso a un miniconcierto de solo tres temas, pero aun así quedamos satisfechos y agradecidos por haber podido escuchar un poco de música después del desperdicio de día que llevábamos.

Dentro del recinto solo existía una única voz. Todos los reunidos allí dentro cantaban al unísono: “oe, oe, oe”, símbolo del buen rollo y la hermandad que impregna el heavy, así como de reconocimiento a Eluveitie.

El público, a pesar del enfado generalizado, siguió apoyando el metal, sobre todo y sobre todos.

Terminado el acústico de los helvéticos, seguimos esperando dentro sin ningún tipo de información al respecto sobre el festival. Nadie sabía si iba a seguir o se cancelaría lo que quedaba de día.

Poco a poco, se empezaba a oír que por hoy había sido suficiente, que se cancelaba el resto de la jornada, pero no era nada oficial. Media hora después salió un comunicado por parte de la organización del festival en el que aclaraban que el día se había terminado debido a la cantidad de agua acumulada en la zona y a los problemas técnicos que habían surgido a raíz de la tormenta.

Tristes y cabizbajos, nos retiramos del recinto esperando que al día siguiente pudiéramos disfrutar al completo. Había sido un día duro para todos, lo mejor era descansar y reponer fuerzas.

Eluveitie

Sábado 10 de junio

Después de dos días para olvidar (agua a raudales y desinformación manifiesta), nos levantamos en la capital zamorana con aún más energía y ganas de poder disfrutar de la música que tanto nos gusta y nos acerca a la confraternización, y de deleitarnos del heavy metal, aunque solamente fuera uno de los días del Z! Live.

El día amanecía despejado y con un sol de justicia sobre nosotros, aun así, era imposible estar tranquilo y evitar mirar al cielo cada poco tiempo por si se empezaban a formar las malditas nubes de lluvia.

Mientras nos adentrábamos en el recinto de festival, el corazón se nos encogía y el miedo volvía a nuestros corazones. Miraras donde miraras se observaban grandes balsas de agua que no habían podido ser achicadas. Al llegar a la explanada de los escenarios, pudimos descubrir con tranquilidad que la zona estaba bastante practicable (recordando la desolación que había el día anterior).

Aunque en la parte trasera se podían ver todavía algunos charcos, el resto estaba casi perfecto para la realización del festival. La organización se había esmerado en drenar el agua y echar paja en gran parte del recinto para que el festival pudiera rematar de la mejor forma posible. Parece ser que por fin íbamos a poder disfrutar de un día completo de festival sin ningún tipo de inconveniente ni percance.

Incursed

Empezaba la última jornada del festival con los castellanos afincados en Bilbao. El grupo nacido a finales de 2007 es un compendio de música bautizada como viking / pagan / folk metal.

El calor era sorprendente en comparación con los días anteriores, pero los primeros valientes que llegaron al recinto pudieron deleitarse con este grupo. Algunos de los temas interpretados fueron “Cryhavoc”, “Heart of Yggdrasil” o “Homeland”.

Junto con el buen tiempo y la calidad sonora del grupo, se creó un conjunto mágico para el inicio del día que nos quedaba por delante.

Ciconia

Pasadas las 16:00 saltaron a escena los vallisoletanos Ciconia con su potente metal progresivo y post-metal instrumental. Los castellanos llevan diez años sobre los escenarios y son una de las bandas españolas más potentes dentro de su estilo. Así nos lo dejaron ver desde el inicio de su concierto.

Están embarcados en una gira mundial de larga duración, una de las más potentes y prometedoras de una banda española de este estilo. Con una pulcritud extrema en cada acorde y en conjunto en todo el sonido, nos interpretaron temas como “The Golden Fleece”, “Scolopendra”, “Animalarium, “Lobisome” o “Mammothman”.

Una exquisitez que nos acompañó durante casi una hora de música. Inmejorables. Es sorprendente y extraordinario ver cómo Ciconia ejecuta sus temas y te traslada a un nivel de embelesamiento y casi hipnosis diferente.

Ciconia. Foto: Hughes Vanhoucke

Death & Legacy

Bajo el cielo despejado saltaba a escena un grupo de metal melódico surgido en 2013 en la misma capital zamorana.

Sin ningún miramiento hacia los asistentes, los zamoranos asaltaron el escenario del Z! con “Insane”, “Hellfire” o “Carnage” resonando en nuestros tímpanos con abrumadora delicia gracias a un sonido correcto, con una voz que, aunque en alguna ocasión es gutural, entendimos cada una de las letras que irradiaba el grupo.

Celtian

Pasadas las 17:30 emergían sobre el escenario los madrileños Celtian con su folk-metal, el cual nos llevan regalando desde 2017. Es unas de esas bandas que todo festival necesita, con su estilo folk y sinfónico, hicieron disfrutar y pasárselo en grande a cualquiera que los pudo escuchar.

Canciones como “Nueva era”, “Magia de luna”, “Tu hechizo”, “El hijo del ayer” o “En tierra de hadas”, te teletransportan a otro lugar donde se es feliz. Un grupo que tiene una gran proyección si sigue haciendo este tipo de espectáculos.

Crisix

A las 18:20 salieron a escena Crisix, la banda de Igualada (Barcelona) formada en el 2008, con el thrash metal como bandera.

Sus integrantes son: Juli Baz “Bazooka” Baz (vocalista), Marc “Busi” Busqué (guitarra), Albert Requena (guitarra), Javi “Carry” Carrión (batería) y Pla Vinseiro (bajo). Rápidamente el público empezó a saltar, y no era para menos.

Comenzaron a descargar temas como “Speak Your Truth”, “Rise the Rest”, “Bring'em to the Pit”, “Full HD” o “Unleast the Beast”. Los componentes estaban radiantes y eso se notó, ya que irradian una energía brutal sobre las tablas del escenario, es prácticamente imposible estarse quieto en el sitio, hacen que tus piernas se mueven.

Un sonido digno del gran grupo que son también se disfrutó en el momento para los covers de “Hit the Lights”, “Walk” o “Antisocial”, muy bien versionados.

Crisix

Gloryhammer

Llegaba uno de los momentos de más expectación del día. Cerca de las 19:25 el público ya estaba arremolinado en el escenario en el que empezaría el show de los escoceses. Banda creada en el año 2010 por Christopher Bowes (teclista), Paul Templing (guitarra), James Cartwright (bajista), Ben Turk (batería), y el último en unirse, Sozos Michael (vocalista).

Después de una introducción espectacular, nos fueron deleitando con temas como “Gloryhammer”, “The Land of Unicorns”, “Fly Away” o “Angus Mcfife. Poseen una energía y despliegue sin parangón sobre el escenario, que hace que el público esté completamente rendido ante ellos.

Exquisitez tanto sonora como visual (ojalá poder apreciar el juego de luces si fuera más de noche) y ningún fallo en cada uno de los temas que interpretaron. Llegada la mitad de su actuación salió a escena un duende verde que hizo las delicias del respetable, si todavía no fuera suficiente, solamente decir que se trató de un increíble recital por parte de la banda. Sin palabras.

Prosiguieron con temas como “Hootforce”, muy coreado por el público; “Keepers of the Celestial Flame”, “Master of the Universe”, “Universe on Fire” y “The Unicorn Invasión of Dundee”, con un clarísimo ensalzamiento a su tierra natal (el unicornio es uno de los emblemas de su país). Concluyeron un excelente setlist para el festival, con exquisitez en todos los temas. Grandiosos.

Gloryhammer

Haken

En torno a las 20:30 de la tarde, vimos en uno de los escenarios algo un tanto inusual. Observamos muchísimo colorido, todo lleno de plantas, parecía de estilo hawaiano. Llegaba el momento de los londinenses Haken, que están presentando su nuevo disco, 'Fauna'.

Es una agrupación formada en el año 2007, que tiene como estandarte el metal progresivo. Una descarga enorme de adrenalina corrió por nuestras venas mientras escuchábamos temas como “Taurus”, “In memorian”, “Sempiternal Beings”, “The Architect” o “Lovebite”.

Durante todo el concierto pudimos ver a la banda con camisas estilo hawaiano, y recibimos como un sonido potente pero a la vez limpio y correcto. “Elephants Never Forget” o “Celestial Elixir” fueron otros de los temas elegidos por los ingleses para cerrar su más que digna participación en el festival.

Haken

Dark Tranquillity

Era el momento esperado por muchos de los allí congregados. Entraba en escena la banda sueca Dark Tranquillity, que lleva entusiasmándonos desde hace más de treinta años.

Era su primera aparición en el Z! Live, y esperamos que no sea la última, ya que desde el primer acorde que escuchamos de la banda estuvimos a su disposición.

El death metal melódico que practican es encomiable y a todo buen seguidor del metal le hizo moverse sin parar. Mientras la noche iba cayendo en la capital zamorana, podíamos disfrutar de temas como “Lost to Apathy”, “Cathode Ray Sunshine”, “Terminus”, “Identical to None”, “Transient”, “Nothing to No One” o “Misery’s Crown”.

Disfrutamos un sonido limpio tanto en instrumentos como en voz y gran juego de luces, que a partir de estas horas ya se podían apreciar. En definitiva, un show más que completo por parte de la banda sueca.

Dark Tranquillity

Helloween

Venía el momento principal de la velada y el más esperado del festival por la gran mayoría de la parroquia metalera, recibiendo a un grupo que lleva deleitándonos desde 1983 con su trayectoria musical sobre los escenarios.

Son un icono dentro del heavy metal mundial, considerados uno de los mejores conjuntos metaleros a nivel internacional y los padres del power metal. No podían ser otros que los germanos Helloween.

Helloween

Poco más se puede decir de este gigante musical. Nos encontramos delante de un gigantesco telón con el nombre del grupo esperando el show de los teutones. Las luces empezaron a centellear sobre el escenario, el telón cayó y comenzaron los primeros acordes de “Skyfall”, una canción de su último trabajo que sobrepasa los doce minutos de duración.

Durante este show pudimos observar la presencia de una pantalla enorme en la parte trasera del escenario, en la cual durante toda la exhibición podíamos ver proyectados videoclips de la banda pertenecientes a cada canción, así como, en ciertos momentos, las imágenes que nos acercan más a los integrantes de la banda.

Llevan cuarenta años y se aprecia en el aplomo que tienen sobre las tablas, aunque por su tesón y despliegue técnico, vocal y físico parece que son chavales de veinte años. Una energía descomunal envolvía el recinto.

“Eagle Fly Free” o “Mass Pollution” fueron los siguientes temas. Con una perfección técnica y vocal digna de las leyendas que son, descargaban sobre el IFEZA las conocidas y coreadas canciones de “Future World” y “Power”.

Helloween

Seguimos gozando con el tremendo show que nos estaban dando los alemanes. “Save Us”, “Forever and One”, “Best Time”, “Dr. Stein”, “How Many Years” o “Perfect Man” fueron otras de las canciones con las que saboreamos las mieles del power metal tan ricamente interpretado.

Era increíble ver a tres de los más grandes frontmen de la historia del metal juntos encima del escenario. Alguien pensará que esto podría ser un problema, pero todo lo contrario, es una sinfonía perfecta de voz y buen hacer. Ver a los señores Hansen, Kiske y Deris juntos en escena e interpretando los temas más famosos de la banda alemana es un deleite tanto visual como auditivo, algo cercano al éxtasis.

Esto llegaba a su máxima expresión cuando interpretan los temas “Heavy Metal (Is the Law)” y sobre todo la archiconocida “Keeper of the Seven Keys”. Qué grandísima suerte hemos tenido los asistentes a este festival de ver semejante espectáculo.

Era el final del tremendo show que nos ofrecieron los alemanes, pero todos sabíamos que no se podían despedir así, todos los asistentes sabíamos que faltaba una canción. Sabéis de la que hablamos, ¿verdad? “I Want Out”, así es. Y, por algo, Helloween es una banda tan especial y legendaria.

Helloween

No nos defraudaron y empezaron a sonar los primeros acordes del mítico tema. Durante su interpretación, aparecieron enormes globos tanto naranjas como negros de calabazas, con los que el público disfrutaba, así como también una lluvia (esta vez no era del cielo) de confeti que inundó gran parte del recinto.

Con esta armonía visual y técnica se despedía el gran cabeza de cartel del festival, que como bien habían prometido, desplegaron un excelente show y una exhibición épica de lo que es hacer heavy metal. Para muchos, este concierto superó con creces las expectativas y supuso un sueño hecho realidad.

Evergrey

Llegamos a la recta final del día y por consiguiente del festival. Con el cuerpo cansado después de toda la jornada, en torno a las 00:45 salieron a escena los suecos Evergrey, grupo de power metal progresivo fundado en 1995.

Con un sonido claro y contundente irrumpieron en el escenario con un clarísimo eco del bajo que no perjudicaba en absoluto al resto de instrumentos. Los temas nos salpicaron en la cara sin cesar: “Save us”, “Distance”, “Call ut the Dark, “Eternal Noctural”, “A Silent Arc”, "My Allied Ocean”, “A Touch of Blessing” o “King of Errors”.

Durante poco más de una hora los nórdicos hicieron las delicias de una gran cantidad de público que se resistía a irse. Un grupo que lleva sobre los escenarios cerca de treinta años y que no descansa ni un minuto sobre él, animando y alentando a los allí congregados.

Evergrey

Dry River

Pasadas las dos de la madrugada saltaba a escena el grupo de Castellón Dry River, cuyo rock nos deleitó a estas altas horas de la noche. Un cambio considerable en cuanto al estilo de música para nada descompuso la armonía que se respiraba en el ambiente.

Creado en el año 2004, el grupo nos deleita con temas como “Culpable”, “Segundo intento”, “Camino”, “Serpiente” o la coreada “Fundido a negro”, realmente elegante.

Refinamiento en la voz, así como un sonido óptimo durante todo el show de los castellonenses, nos condujo durante cerca de una hora de espectáculo en la que la banda nos sedujo con sus temas y su buen hacer.

Dry River

Dünedain

Eran las tres de la mañana cuando pisó el escenario el conjunto abulense. A pesar de las doce horas que llevábamos en el recinto, todavía quedaban muchos valientes que se resistían a marcharse sin escuchar al grupo que cerraría el festival.

Con la espectacular mezcla de heavy metal tradicional y power metal, embelesaron a los allí reunidos. En su primera canción sufrieron un contratiempo técnico, ya que uno de los altavoces sonaba fatal y, tras varios intentos de arreglarlo, no fueron capaces.

El gran trabajo de una banda que lleva 27 años sobre los escenarios nos hizo disfrutar sin ninguna complicación. Temas como “Vuela”, “A un paso del cielo”, “Bola de cristal” o “Fiel a mi libertad” rindieron al público presente.

Dünedain

El respetable apoyaba y coreaba cada una de las canciones del grupo. Se notaba que todavía tenían ganas de que esto no acabara. “El viento de la batalla” o “Mil golpes” fueron otros temas que sonaron y que se corearon sin cesar.

Un grandísimo grupo que, pese a los problemas técnicos, supo dar el callo y salir adelante con una energía y buen hacer formidables.

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