Crónicas
Guns N’ Roses + The Pretenders en Madrid: ¡Todos ganamos!
«Auténtica fiesta, tres horas y media de show en el que creo que no les faltó nada por dejar en el tintero. Se veía ilusión, ganas arriba del escenario y pasión. Aún les quedan muchos tours en la carretera a esta banda incombustible de nuestro heavy metal. ¡Todos ganamos!»
9 junio 2023
Estadio Metropolitano, Madrid
Texto: Txus Tankian. Fotos: Xavi Torrent (Live Nation)
El rock vuelve a congregar a las masas con un total de 45.000 espectadores que dejaron claro que este género musical siempre está vivo y rompe las barreras generacionales. Así se constató de nuevo con este éxito rotundo de la banda norteamericana Guns N´ Roses, tan emblemática e icónica que todo el mundo ansía poder afirmar haber estado siendo testigo de ello en un concierto de la mítica formación con Axl Rose, Slash y Duff McKagan en sus filas marcándose un repertorio de tres horas y media de actuación. Para postre, poca broma, los angloamericanos The Pretenders abrieron esta noche de descomunal locura.
Cada vez que voy al Metropolitano se junta una mezcla de nervios y estrés para conseguir llegar con tanto contratiempo, así como de euforia, porque sé que voy a vivir algo memorable y no me quiero perder nada. Alrededores abarrotados, terrazas abarrotadas, ríos de gente con camisetas de los Guns, odiseas para poder conseguir una plaza de coche o intentar saber dónde te toca ubicarte en la inmensidad del imponente estadio. ¡Pero sin duda merece la pena esta locura!
Los precios de las entradas ya están en su máxima alza, ya no se puede pedir más, han alcanzado el límite en apretar las tuercas a un público que los promotores saben sin duda se hipotecará siempre por su pasión, es inevitable no acudir a la llamada del rock en mayúsculas. Esto sumado a las consumiciones y todos los alicientes añadidos, como la comida o si vas acompañado, sale caro hoy en día disfrutar de algo así.
Con todo esto, la multitud respondió, reservó ese valor económico para esta experiencia y vimos muchas familias con niños, algunos disfrazados, gente venida de todas partes del territorio estatal y parte del extranjero con un ambiente festivo impresionante e implacable. Cuando vas a ver a tu equipo de futbol, también inviertes bastante dinero, con el inconveniente de que no sabes si saldrás contento o no del estadio por el resultado. Lo bueno de todo esto es que todos los que asistimos éramos del mismo equipo y ya sabíamos el resultado antes de acabar el mismo. ¡Seguro que ganamos!
Para abrir la jornada nada más y nada menos que una eminencia en el rock melódico como son The Pretenders, encabezados por Chrissie Hynde, como sabemos, una líder y pionera del movimiento punk vinculada al entorno de los Sex Pistols. Al final, lideró una de las bandas más sonadas en todo el mundo con un estilo que abarca un público muy amplio por la melodía de la música, la dulzura de su voz, la calidad en las composiciones y la potencia del rock.
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Chrissie tiene una presencia en el escenario de líder sensacional a la guitarra, siendo conscientes de que estábamos ante un estandarte que sigue vivo con un registro vocal que nos puso los vellos como escarpias cuando sonaron temas tan emblemáticos como la genial balada “I’ll Stand by You”, que retumbaba en el estadio mientras se iba llenando masivamente por minutos, así como su garra más dura en temas más acelerados.
Estamos seguros de que esta banda por sí sola es un gran reclamo por miles de espectadores que quieren disfrutar de su show íntegro, estamos seguros de que así será de nuevo. Tienen mucha energía en escena, desprenden su parte más contundente en directo con una buena técnica, maestría y fuerza implacable acompañados por el buen sonido.
Presentaron su nuevo trabajo que está de camino, ‘Relentless’, del que se adelantó el single “Let the Sun Come In”, con la portada del mismo en la pantalla trasera. Por supuesto, no faltaron los temas por excelencia que todos conocemos inevitablemente y que se recibieron con gran satisfacción por parte del público como son “Don't Get Me Wrong" o “Middle of the Road”, entre muchos otros. Implacable comienzo para esta gran noche.
Se encendió la mecha y explotó el Metropolitano. Los Guns N' Roses atacan de nuevo y con una poderosa intro visual hicieron explotar la locura que incendió tanto los graderíos como una pista en la que no cabía un alma en ninguna de sus ubicaciones mientras detonaba “It´s So Easy”.
Puntuales, con energía y con una sensacional formación liderada por Axl Rose como frontman, Slash, líder indiscutible a la guitarra junto con Duff McKagan al bajo. Irrumpían haciendo retumbar como un estruendo en todo el recinto mientras veíamos un público muy animado que disfrutaba con pasión. Muy importante, el hard rock en esta ocasión rompía de nuevo todos los esquemas y es muy bonito ver cómo no nos apagan la llama. Gente de todos los estatus sociales, de cualquier nacionalidad, sexo o edad, todos ellos caben, esperan y caen rendidos al poder de un concierto en mayúsculas en el que la maquinaria del rock está a todos los niveles.
Richard Fortus hacía rasgar la guitarra con un acorde de puro rock n’ roll mientras comenzaba a sonar “Bad Obsession”, la esencia más clásica que se completaba con un extenso repertorio en el que fueron desgranando temas de todas las épocas, esta vez con su último material de estudio ‘Chinese Democracy’, aunque ya se remonte a 2008.
De nuevo volvían con otro clásico por excelencia “Mr. Brownstone”, ojalá viéramos un concierto íntegro de pies a cabeza del ‘Apetitte For Destruction’, no hay tema que tenga desperdicio, los fueron desgranando casi todos alternados durante la velada. Al finalizar, Axl nos saludó con un escueto “Madrid” que sirvió para recoger su carisma.
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La verdad es que la actuación en la puesta de escena fue sensacional, el frontman no paró en todo momento de pasearse por las tablas aportando movimiento. El registro vocal por lo general bien, aunque es cierto que en su etapa joven marcó unos niveles demasiado elevados que es casi imposible mantener, demasiados agudos que a veces no se consiguen del todo. Pero cierto es que se notaron muchas ganas y se apreció de manera bastante adecuada en uno de los mejores temas “Welcome to the Jungle”, que me sorprendió que se sacaran de la chistera de Slash en una parte tan temprana de actuación. Complicidad máxima entre los miembros de la banda, nos hicieron cantar sin cesar uno de los mayores himnos indiscutibles que se sucedía con “Pretty Tied Up”, genial tema de raíz más clásica. Rítmica pegada sensacional de su batería Frank Ferrer.
El repertorio, como decimos, fue muy extenso por lo general. La gente estalló de locura al ver quizás al mejor guitarrista de todos los tiempos como es Slash seguir siendo un buque insignia para la banda, tanto con la poderosa puesta en escena con su chistera que sigue haciéndole de notar, así como en su virtuosismo que lo hace supereficiente. Se marcó geniales solos que hacen que la guitarra hable por sí sola.
Duff, con su dorada cabellera, también aportó carisma al bajo, a Richard lo vimos también disfrutar a la guitarra y hasta hacer piruetas bailando. Nos sorprendió la presencia de la bella Melissa Reese a los sintetizadores, coros y en ocasiones la vimos con percusión utilizando la pandereta en algunos temas. Para completar, Dizzy Reed al teclado.
Seguía la descarga sin tregua con el poderoso “Live and Let Die”, en el que al finalizar el estadio coreaba de emoción. Daban tregua con “Wichita Lineman” de Jimmy Webb, donde vimos la parte más acústica, que volvía a contrastar con la potencia de temas como “You Could Be Mine” o “Rocket Queen”, en la que un excelente solo de Slash se entrelazababa con la rockera “Anything Goes”. Así fueron alternando las grandes baladas con la caña más animada.
Pudimos disfrutar de Duff McKagan como frontman a la voz y al bajo en “T.V. Eye”, cover de The Stooges. La verdad es que es sensacional tanto su registro como la forma de transmitir.
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Tocaba el turno de ponernos los vellos como escarpias en “Don't Cry”, rendir homenaje a Ucrania, que estaba como telón de fondo mientras sonaba “Civil War”. Acto seguido, Axl presentó a la banda por completo dejándose como última presentación y que todos hiciéramos ovación a Slash, en el cual vimos admiración y sentimos que estaban bien en el mismo barco trabajando juntos. Acto seguido, el guitarrista hizo las delicias de los asistentes al continuar con una retahíla de himnos que no cesaban como “Sweet Child O' Mine”, uno de los mayores temas que todos disfrutamos con euforia, así como con el emotivo “November Rain”, en el que Axl tocaba el piano a la vez que cantaba una obra maestra de la historia de la música sin precedentes.
Para la recta final, aunque no lo parezca, aún faltaban temazos por hacer sonar y hacer mover cada vez con más euforia a los presentes. Buena muestra fue “Knockin' on Heaven's Door” de Bob Dylan, que justo nos visitó en las Noches del Botánico, o el acelerado “Nightrain”, que se anunciaba con la intro de una bocina.
Breve mutis por el foro con ovaciones y aún nos regalaban bises como la genial balada en la que formaban un trío acústico a las guitarras en “Yesterday”, la emotiva “Patience” y el final apoteósico de “Paradise City”, tema que causó la locura de un estadio encendido por la forma de saltar, bailar y cantar en éxtasis para colofón final. Auténtica fiesta, tres horas y media de show en el que creo que no les faltó nada por dejar en el tintero. Se veía ilusión, ganas arriba del escenario y pasión. Aún les quedan muchos tours en la carretera a esta banda incombustible de nuestro heavy metal. ¡Todos ganamos!
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4 comentarios
Extenso resumen hacia el currado concierto que se marcaron tan histórica banda hardrockera en la capital española a través de estos clásicos inmortales. Ahora toca un nuevo álbum.
Con todos mis respetos al cronista, pero para mi lo que marcó el concierto fue que la acústica fue terrible. Muy decepcionado, muy mal sonido que hizo que el concierto fuera insufrible. Grada baja 121 (158 euros la entrada). Una ubicación muy buena. No culpo a la banda, ni a los técnicos de sonido, simplemente el sonido rebotaba por todos lados y algunas canciones tenías que adivinar cuales eran.
Estoy de acuerdo en que lo dieron todo, que fueron 3 horas y media en que la banda se entregó al 100%, que el setlist fue brutal. Y todos están en forma y muy motivados. Axl no paró, se entregó al completo, estuvo simpático, tenía muchísimas ganas, pero no está para cantar, su voz fue lo peor del concierto.
Buscad cualquier video del concierto en Internet y tal y como lo escuchéis es como se escuchaba ayer, música adelgazado, no se distinguen los instrumentos, y la voz de Axl mal.
He leído la noticia en 3 medios distintos y dan 3 cifras diferentes de asistencia . 35000, 40000 y 45000. Hoy en día se sabe exactamente el número de entradas vendidas. NO TENEIS NINGUNA CREDIBILIDAD...
¡Gran crónica de Jua... digo, de Txus Tankian!