Crónicas
Ambröxx + Q71: El espectáculo continúa
«Ambröxx nos traía rock para dar y tomar. Un hard rock con aroma a vieja escuela, ese que nos hace mover la cabeza de arriba abajo, pero que, a la vez, nos pone nostálgicos, con un trabajo como 'Retro' recién salido del horno»
13 abril 2024
Sala Divinno, Pinto
Texto y fotos: David Torrecillas
Lo retro siempre ha sabido animar a la gente, al fin y al cabo, los ochenta nunca dejan de estar de moda, y nuestro querido colega Ambröxx nos traía rock para dar y tomar. Un hard rock con aroma a vieja escuela, ese que nos hace mover la cabeza de arriba abajo, pero que, a la vez, nos pone nostálgicos. Personalmente, fue un espectáculo de puro fanservice para los amantes de los 80. Ambröxx traía recién salido del horno su último lanzamiento, ‘Retro’, un disco que contiene enrevesados solos de guitarra, solemnes acompañamientos de voz y, como debe ser, rock inspirado por los mejores artistas de la historia, como pueden ser Queen, Judas Priest, Guns N’ Roses o Van Halen por nombrar algunos. Su señorial puesta en escena nos dio una pequeña preview de este nuevo disco y nos agarró e hipnotizó con sus temazos e increíbles letras. Un gran show que te atrae y envuelve desde el principio hasta el final.
Ambröxx
El trío formado por Ambröxx en voz y guitarra, Anto Serrano a la batería, y Juanjo Poveda en el bajo iba preparadísimo para el show aquella noche. Ambröxx vestía con ropa al más puro estilo del glam, con camisa de leopardo abierta, una bandera colgando de la cintura, un pañuelo en la frente y, por supuesto, gafas de sol, el elemento que todo músico perteneciente a la lejana década de los 80 debía llevar para molar de verdad. Nuestros protagonistas se pusieron de espaldas al público y de fondo empezó a sonar una música ambiental acojonante. Fue épico.
Los instrumentos se hicieron oír y dio comienzo el espectáculo. El tema “Una oportunidad” nos introdujo al show. Una canción que fue perfecta para comenzar y que con su potente base nos sorprendía con un solo de guitarra icónico de los años 70, el de la aclamada “Bohemian Rhapsody”. Y no es para menos, ya que el cantante es fan del maravilloso grupo Queen. Según él, para crear muchas de sus canciones se inspira en ellos. El solo de guitarra fue tocado a la perfección y se sentía como si él mismo hubiera sido el creador de la pieza.
Continuaron con “Desenlace personal”, un tema que me recuerda a los inicios de Queen durante el 73, sobre todo en la parte de guitarra. Si Brian May viera esto, estoy seguro de que se identificaría con la técnica, sin ningún tipo de duda. Terminaron la introducción y saludaron al público dándoles la bienvenida al concierto. Ambröxx se quitó las gafas e hicieron saltar el llanto y el baile con “Lágrimas de cristal”, que fue seguida por “Ceniza piel” y “Ludo atrapado”.
Durante este tramo del show ya pudimos ver que Ambröxx no era una banda como cualquier otra. Cada miembro del grupo tuvo su momento de brillar y nos regalaron momentos inolvidables, como cuando durante una de las canciones se subió al escenario Iván, un viejo amigo de toda la vida de Ambröxx, el cual lleva desde los inicios del grupo observando su evolución. Pude tomar unas fotos impresionantes junto a Naia Vandenberg gracias a la maravillosa puesta en escena del grupo. Su gran camarada se subió al escenario y le acompañó en los coros durante unos segundos, en donde, cogidos del hombro, pudimos ver cómo se notaba que eran compañeros de toda la vida.
Ambröxx tiene un talento en la guitarra que ningún músico podría negar. Se necesita mucho tiempo y práctica para tocar con tanta versatilidad. Son profesionales y se nota. Cada uno de ellos es buenísimo en su respectivo instrumento. Seguimos el show con “Volar” junto a una cover de un temazo ochentero en español perteneciente al grupo Los Ronaldo. El tema era “Adiós, papá”, y el grupo se encargó de convertir la canción en una versión de puro hard rock. Pareciera que los mismísimos Van Halen hubieran creado la canción. Fue una brutal cover, que hizo saltar y cantar. Me quedé sin palabras.
Con “Ubi Sit Lumen” daban el prefinal de su gran espectáculo. Una majestuosa canción cuyos coros hacen de ella una obra de arte que pareciera ser una balada de power metal. Debo admitirlo, me envolvió, no me pude resistir a la hipnotizante puesta en escena de los músicos a la hora de tocarla. Con todo ese humo y luces puedo decir que contemplaba un concierto de 10. Y para terminar tocaron “Y quién es ella”, uno de los temas más conocidos y el que, sin duda, se ganó los aplausos del público, y su versión "Gospel". Me encantó el tema, debo decirlo, os recomiendo escucharlo, no solo el tema, sino el grupo en general para todos aquellos amantes del hard rock.
Con esto terminamos el pedazo de espectáculo que nos otorgó Ambröxx, y si queréis escuchar más sobre él, no os perdáis su último lanzamiento, ‘Retro’, el cual contiene muchas de las piezas escuchadas en el concierto y muchas más que nos atraparon por completo.
Pero la cosa no acababa aquí, ya que nos quedaba por ver un grupo tributo a una de las bandas mencionadas anteriormente, que ha marcado un antes y un después en la historia de la música. El aclamado tributo a Queen Q71 nos venían a hacer cantar a grito pelado las mejores canciones del grupo de Freddie Mercury.
Con David Díaz en la batería, Carlos Heredia en la guitarra, Antonio Oliver en el teclado, Alex García en el bajo y Germán Sánchez en la voz, tuvimos el placer de ver a los Queen de España, siendo espectadores de uno de los mejores tributos al cuarteto.
El setlist estaba creado con las canciones ordenadas en orden cronológico, comenzando desde los 70 hasta los 90. Empezaban con la rocanrolera “Keep Yourself Alive”, del primer disco, ‘Queen I’, seguida por la extrema “Seven seas of Rhye” y luego la preciosa “Love of My Life” y la exitosa “Bohemian Rhapsody”.
Todo el mundo se sabía los temas, y se veían fans de Queen por doquier, entre los cuales me incluyo. La banda interpretaba la puesta en escena de Queen de manera impresionante; los movimientos, las técnicas y la interacción con el público fueron elementos clave que atraparon al público por completo.
Prosiguieron con “Somebody to Love” seguida por “Tie Your Mother Down”, dos canciones del disco ‘A Day at the Races’. Terminando con la década setentera, tocaron tres temazos clave: “We Will Rock You”, “We Are the Champions” y la rápida “Don’t Stop Me Now”. El cantante tenía un timbre espléndido y se apreciaba fácilmente cómo intentaba imitar a Mercury a la perfección.
Continuaron con la década de los 80 y tocaron los temas de la película de Flash Gordon: “Flash’s Theme” y “The Hero”, junto a “Another One Bites the Dust”, “Save Me” y “Crazy Little Thing Called Love”.
El guitarrista Carlos tocaba los solos a la perfección y junto a las voces acompañantes, el teclado y los demás instrumentos, se lucieron en el escenario. “Under Pressure”, “I Want to Break Free” y “Radio Gaga” fueron seguidas de una breve improvisación del cantante. Con “Hammer to Fall”, “One Vision”, “Who Wants to Live Forever”, “A Kind of Magic” y “I Want it All” llegábamos al fin del concierto.
Durante estas canciones solo se oían cánticos del público y aplausos. Pero, por desgracia, solo quedaban dos temazos: la emotiva “The Show Must Go On” y la declaración de amor de “I Was Born to Love You”. Qué espectáculo vimos aquella noche, os recomiendo mucho ver a este gran tributo a una de las mejores bandas de todos los tiempos.
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1 comentario
Cojonudo resumen hacia el buen concierto que se curro este buen músico bajo el nombre de AMBROXX presentando su nuevo álbum y que junto a este gran tributo a los históricos QUEEN como son Q71 dejaron bastante alto el listón en la ciudad de Tete Novoa.