Cierto es que las ofensas ya no son lo que eran y que hoy en día actos antaño inocuos provocan todo tipo de susceptibilidades, pero hubo un tiempo en el que los biempensantes y las fuerzas vivas también se rasgaban las vestiduras contra todos aquellos que se atrevían a subvertir
En una época en la que estamos curados de espanto y casi nada puede sorprender, no está de más recordar las hazañas extremas de GG Allin, el profeta del punk que en directo se comía sus propias heces, se embadurnaba en sangre, vómitos o fluidos corporales y no dudaba en