Crónica del festival Granito Rock 2017: Turis(t)as

Fans apoyando el talento emergente desde primeras horas

Turismo nocturno el que hicieron Turisas la noche del viernes, cerrando bares primero y discotecas después, de forma que al día siguiente ya estaban más que aclimatados y hasta se atrevieron a dar paseos por el municipio ellos solitos. Tanto trasnochar no afectó a su rendimiento como cabezas de cartel en el festival que, desde hace 17 años, pone el broche de oro al Certamen de Música Joven de Collado Villalba. 15 de ellos lleva Juan Destroyer, coordinador general de La Heavy y MariskalRock, como presentador del evento. Nos resume lo acontecido Charly Rock and Roll, autor también de las fotos.

Por Instinto

Llevaba ya un par de ediciones en la que he estado ausente, con lo cual el volverse a encontrar con este festival ya veterano que apuesta por nuestras bandas, es todo un lujo y un placer. Su cartel me traía algunas bandas desconocidas por mí, junto a otras que sigo como Grapeshot o Third Dim3nsion y el añadido de Turisas, que despertaron las pasiones de todos los asistentes.

Esta edición del festival, en términos generales me ha dejado con una sonrisa de oreja a oreja, pero tengo que decir también que hay bandas que, sin estar exentas de calidad, no me han terminado de convencer.

Juan Destroyer lo presentó un año más

Por Instinto, ganadores en la categoría de rock, abrieron fuego tras repartir el Destroyer los primeros regalos en compañía del pequeño Iván, que mojó a fotógrafos y al público aferrado a la valla de contención con una pistola de agua. Fue a las 20 horas, aún con un sol de justicia que pegaba muy fuerte y que no amilanó a la joven banda madrileña para dejarse la piel y que disfrutáramos con una buena descarga de rock and roll y rock urbano. Temas como “A Cal y Canto” o “Alíate con tu enemigo” fueron los escogidos para abrir fuego y engancharnos de manera potente. Un setlist que sin duda mantuvo el nivel de intensidad, donde me gustaron especialmente “La Sed Animal”  o, en el tramo final, “Solo cuando llueve” y “Despertad”. No obstante hubo otros momentos que me resultaron muy flojos, como en el mix de clásicos del rock patrio, donde sonarían entre otras bandas Leño, Platero, Porretas o Ska-P; y es que algunas versiones no les salieron especialmente bien, y por otra parte no le vi sentido a hacer el mix tan extenso. A pesar de esto, buen show, aunque también eché en falta más fuerza y crudeza en las guitarras.

Los siguientes en salir fueron los jóvenes Ghosts and Me, ganadores por Villalba (ya tuvieron ese honor en 2015) que para mí eran completamente desconocidos.

Ghosts and Me

Se manejan bien en el terreno del rock potente, con tintes muy modernos, entre el post hardcore y el rock alternativo, que les pueden acercar a bandas como Foo Fighters o Linkin Park (con dedicatoria y tributo a Chester Bennington durante su show, así como un recuerdo a Chris Cornell), dando como resultado canciones efectivas que conectan con el sector más joven. El confeti y los globos también ayudaron a hacer crecer la fiesta.

“King Kong Vs Godzilla”, “To The Wolves”  o “Tea Cup Party” sonaron de manera fantástica y con momentos llenos de intensidad, donde las guitarras mandaban, aunque por otro lado nos encontrábamos pinceladas y melodías de corte más pop que personalmente no me llegaban a convencer. Al margen de mis gustos personales, que suelen tender a sonidos más extremos, es una banda que se mueven como pez en el agua sobre un escenario, facturando conciertos llenos de dinamismo y fuerza. Recomendables para tod@s a l@s que os gusten las tendencias más dulces del rock moderno sin renunciar a la potencia.

Walking With Wolves

Más leña al fuego con otra joven banda, Walking With Wolves, que tiene bastantes nexos en común con la anterior, aunque quizás a ésta se la pueda encasillar como metalcore melódico; de hecho ganaron en la categoría metal. Temas como “Promise” o “Black or White”, con un estribillo muy marcado, dejan un buen sabor de boca, mientras que la versión de “Thriller” de Michael Jackson no les quedó excesivamente redonda. Sobre el escenario los madrileños son tremendamente efectivos y saben facturar un directo fresco y lleno de dinamismo, aunque a nivel personal yo prefiera propuestas más contundentes.

Grapeshot

Grapeshot, vencedores en el apartado dedicado a las bandas veteranas, fueron los siguientes en salir al escenario, con la suerte de hacerlo en hora punta en los Belgas: las 23:00. Nos encontramos de repente con las puertas del infierno abiertas de par en par, y es que son una tormenta sonora que no te deja para nada indiferente, sin lugar a dudas fueron los mejores del festival, con una actitud salvaje y cruda. Las composiciones rezuman sonidos de puro stoner, doom, groove metal y rock sureño deliciosamente cafre. Tienen ahora mismo un segundo disco, ‘All About To End’, que fue en el que centraron el incendiario setlist.

“Void Your Soul” abrió fuego, y aunque a Esteban le duró poco el pie de micro hecho con un barril y latas de cerveza, temas como “Hamster Wheel”, “Naked Emperor” o la salvaje y cruda “Riots”, nos reventaron el cerebro en mil pedazos. Sonido demoledor y una banda que tiene un empaque y una fuerza con la que se comen crudo a cualquiera que se ponga delante de ellos, como el T. Rex que invitaron a subirse al escenario.

Wall of Death con Grapeshot

“Vamos a demostrarle a estos vikingos de qué pasta estamos hechos en esta tierra de conejos”, bromeaba Juan Destroyer cuando le llegó el turno de Turisas. Los fineses se marcaron un concierto muy correcto y sin fallos, pero tengo que reconocer que no me terminó de convencer, no me apabullaron como sí lo logró Grapeshot. Quizás se me hizo un poco pesado en determinados momentos escuchar entero el disco ‘The Varangian Way’, del que se cumplen diez años de su edición; eso sí, a base de cruento maquillaje, algún que otro baile folclórico y de saborear sobre las tablas Estrella de Galicia y Mahou para dar por vencedor al producto local, la banda conectó de manera instantánea con todos los reunidos, que llenaron buena parte de la plaza. Es una banda experimentada que saben medir hasta el último segundo de su show.

Turisas

“To Holmogard and Beyond” y “Cursed Be Iron” suenan llenas de contundencia y se meten al público en el bolsillo, haciéndonos cantar y bailar desde el inicio hasta el final de la descarga. La épica “Dnieper Rapids” va a enganchar con “Milklagard Overture”, que son las que nos llevaron al epílogo de su concierto, donde pudimos escuchar temas pertenecientes a otros discos: la homónima “Stand Up and Fight” y “Hunting Pirates” de su álbum de 2011; “We Ride Together” del poco laureado ‘Turisas2013’ al que pronto darán por fin continuidad; el icónico "Battle Metal”, su primer éxito con el que autodefinieron el estilo que practican; y ya en el final volvieron a ‘The Varangian Way’ con la festiva versión de “Rasputin” (Boney M.) donde, paradójicamente, sí me transmitieron fuerza.

Lo dicho, un concierto correcto que, al celebrarse ya de madrugada, coincidió con el cumpleaños del batería Tuomas “Tude” Lehtonen, quien desconocemos si ha vuelto a la banda de manera permanente. Al acabar, el Destroyer y Alicia como mano inocente, sortearon cinco camisetas del Granito entre los asistentes que habían venido disfrazados como los miembros del grupo.

Los fineses con la alcaldesa Mariola Vargas, el concejal Adan Martínez y Jesús Ruiz del Granito Rock, entre otros

Turisas no quisieron tocar los últimos y sin duda a los arancetanos Third Dim3nsion su horario de 2.15 de la madrugada –más un retraso adicional- les perjudicó, con una audiencia mermada aunque aún reseñable. Fantástico concierto de la banda estatal invitada, antiguos ganadores del certamen, lo mejor de la noche junto a Grapeshot. Además de potente, su directo me parece técnicamente perfecto y muy preparado, ya que las composiciones de la banda, power metal de altura, son complejas y con muchos cambios. El cansancio se me va de golpe, y es que son una máquina bien engrasada, enganchando con todos los que estamos disfrutando de su directo.

Third Dim3ension

Comenzaron con temas como los trepidantes “Last Survivors” e “Insane”, donde además de derrochar fuerza también presentan unas melodías increíbles, que es una de los aspectos que más me gustan de sus canciones. Mucho tiene que decir en ellas la teclista Elena Alonso, única mujer músico sobre el escenario en esta edición de un festival por el que, tradicionalmente, han pasado muchas chicas.

El clásico “Hunting High and Low” de Stratovarius es otro de los momentos álgidos que hace a la gente disfrutar y cantar, al igual que composiciones propias como “Destiny”, que será el single de su próximo disco y que tiene pinceladas de hard rock dentro de un esquema de metal muy melódico.

Brutal concierto el que nos dieron, terminando con una versión de “Heaven Can Wait” (Gamma Ray) que nos hizo a todos cantar, y “Ray of Light”, que puso el broche final por todo lo alto a otra edición del Granito Rock. Ya estamos esperando la próxima edición.

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