Crónica de Ciclonautas + Kutxi Romero: Fin de gira

A las 20 y 15 minutos salía José Carlos Romero Lorente, conocido por todos como Kutxi Romero, que estuvo muy bien arropado durante toda la noche por Juanito Lorente (Bocanada) y Pete Marco (Parternak) a las guitarras acústicas, y su compañero en Marea, el batería Alen Ayerdi. Nos ofreció un emotivo concierto en acústico, con una gran número invitados y amigos, pocas interrupciones, lleno de ritmo, y contando con el toque jocoso, campechano y divertido de Kutxi Romero.

Su álbum 'No soy de nadie' fue interpretado de forma íntegra, desde la inicial "Vengo del mercado", pasando por "Mierda en las tripas", "Como quien pide tabaco" o "Corazón equino", que contó con la colaboración de otro compañero de Marea: el guitarrista Kolibrí Díaz. Para la siguiente, "Nicotina y alquitrán", además del anterior, se subieron al escenario Jerry Erro Moreno, vocalista de Cuatro Madres, y el saxofonista Luis María Moreno "Pirata".

Kutxi Romero con Kolibri Díaz

Kutxi se mostró, como acostumbra, cercano y locuaz, empatizando plenamente con un público que cantaba y coreaba cada canción con auténtica pasión. El saxo de "Pirata" volvió en "La sangre llega hasta el cielo", para seguir después con la primera versión de la noche, en este caso "Azulejo frío" de Txarrena, en la que se incorporó Julen Hernández de los rap metaleros navarros Bourbon King. Sobre los grupos tributo, Kutxi se manifestó personalmente con unas palabras que dejaron claro que no son santos de su devoción.

Para "Del martillo al agua" contó con Ciclonautas al completo, invitando después a Rafa Duque en "Malnacido", que dedicó a todas las madres. Acto seguido, llegó el turno de "El año del conejo". En la recta final, y con la sala entregada, cayó la primera y muy esperada canción de Marea: la espléndida "Ciudad de los gitanos" del álbum '28.000 puñaladas', volviendo Kolobrí y sumándose Lülu; le siguió la magnífica "Pan duro", del excelente disco 'Besos de perro', apareciendo aquí Juan Manuel Cifuentes "Iratxo".

Luter, único músico madrileño durante la noche,  fue el siguiente invitado en otro par de versiones: "Aunque tú no lo sepas" y "El sitio de mi recreo" de Antonio Vega. Y a modo de propina, evitando explícitamente Kutxi abandonar la sala para luego hacerse rogar y volver, enseguida acometieron otro emblemático himno como "Qué desilusión", de los añorados Leño, contando con Migortxo de Pasternak. Para esta canción, el de Berriozar se marcó un punteó imitando con su voz el sonido de una guitarra, ante el delirio de todos nosotros.

Con "No me beses en la boca" junto a Pedro de La Fuga, llegamos al final de un vibrante concierto que, aunque en versión acústica, entre la entrega de los músicos y el calor de un apasionado público, hicieron que la sala mantuviera una temperatura muy elevada.

El bajista Javier "Txo" Pintor de Ciclonautas con el poeta Manolo Chinato

Tras una pequeña pausa, llegaba el turno de Ciclonautas, formación que se encuentra en un gran estado de forma tras haber recorrido gran parte de la geografía nacional presentando su segundo álbum, 'Bienvenidos los muertos'. El trío está compuesto por el argentino Mariano Rodríguez "Mai" Medina a la voz y guitarra, y los pamploneses Javiertxo "Txo" Pintor al bajo y Alen Ayerdi a la batería. Su repertorio se dedicó a repasar sus dos trabajos hasta la fecha, comenzando por el adictivo y enérgico "Bienvenidos los muertos", que da título a su segunda obra, para acto seguido continuar con "Los fantasmas del ocaso", "Demencio Lacruz" o "El mostrador de Dios", en la que Mai nos contaba que una frase argentina dice: “Dios está en todas partes, pero atiende en Madrid”.

Mai Medina de Ciclonautas con Kutxi Romero

Ciclonautas también contaba con una buena legión de seguidores que cantaba todas sus canciones de principio a fin, como "La baba del saurio", "Loca", "Cocodrilo", "Extraño", "Tristes corazones", "Mordiendo la luna" o "Kamikaze del nido". Por sorpresa, Manolo Chinato se subió al escenario y nos brindó su arte con una pequeña poesía, que fue muy aplaudida. La mezcla de rock and roll y rock urbano del combo hispano argentino no decayó en ningún momento, con la voz desgarrada de Mai que seguía mostrándonos su cancionero en "La virtud del caos", implicando al público para que le siguiera con los coros; mientras, Alen tenía tiempo de lucirse con la batería.

Con  "Que corra el aire" y su estribillo pegadizo, nos encaminábamos hacia la conclusión del concierto, que fue culminado con "El dromedario", que da título a la discográfica pamplonesa que fundó Alen, "Pensamientos perros", "Uh lalá", "Los hermanos" y un perfecto broche final con su primer single "¿Qué tal?", que contó con Kutxi a las voces y coros.

Ahora, esperaremos a ver cómo sube la Marea.

Texto: José Luis Martín
Fotos: Alejandro García

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