HELLOWEEN: MY GOD-GIVEN RIGHT

11 junio, 2015 11:19 am Publicado por  14 Comentarios

inthelloweenportNuclear Blast
6'5/10

Es algo que se intuye, se sabe, se tiene asumido y, lo que es más, se espera con ahínco una vez se da a conocer la noticia: TU GRUPO lanza un nuevo disco... y la espera se hace casi tan eterna como irresistible. The chase is better than the catch, que dirían algunos. Y en estas nos encontramos, señores. O nos encontrábamos hace unas semanas, por lo menos en cuanto a lo que a uno respecta. Y es que, por si todavía alguien no lo había adivinado, los alemanes Helloween, son el grupo al que hacía alusión unas líneas más arriba, y que, ya de una vez por todas, nos han entregado el tan ansiado sucesor a su estupendo 'Straight Of Hell' parido allá por el 2013.

Justo cuando se cumplen los 30 años desde que el grupo publicase su primer y homónimo EP, y encontrándose rayando un nivelón creativo casi equiparable al de la primera trilogía "derisiana", aquí que nos vuelven a la carga los míticos teutones con una nueva criatura de estudio, la cual responde al nombre de 'My God-Given Right'. Su derecho divino, por el cual la banda ocupa el puesto que ocupa en el panorama, y al que Martin Häusler vuelve a darle una nueva carátula, acertada en lo que a concepto de la misma se trata, pero que nuevamente flojea en el momento de la ejecución, con ese toque tan extremadamente digital al que nos tiene acostumbrados. Sea como fuere, y una vez asumido el asunto de la portadita de marras, como lo que importa es lo que importa, allá que nos vamos a desgranar lo que nos han grabado nuestros muchachotes para tan señalada ocasión. Y que no es poco, una vez más: 61 minutos, repartidos en 13 cortes. Abonados que parecen al supersticioso numerito.

Lo primero que se intuye, así a primera escucha, es que - tal y como ya nos anunciaron en previas entrevistas - el estilo se simplifica de alguna manera en buena parte del plástico, en base a que muchas de las composiciones se acercan más al heavy metal clasicote, en detrimento del característico power al que nos tienen acostumbrados. Que también tiene sus dosis, vaya por delante, pero sobre todo, y en canciones del pelo de "Stay Crazy" o "Russian Roulé" (rollito happy melódico la primera, algo más oscura la segunda, ambas de lo más logrado) sí que se vislumbra de alguna manera esa vuelta a los 80 que el grupo anunciaba en cuanto a simplicidad y entrada a las primeras de cambio. Claro que, por desgracia (o semi-desgracia) tampoco es que sea oro todo lo que reluzca, y si bien por ese camino se
puede apreciar una estupenda forma evolutiva para evitar anclarse en trillados clichés, la cosa en líneas generales no ha terminado pintando tan bien como hubiera podido.

Porque a poco que se conozca a las huestes de Weikath, Grosskopf, Deris y compañía, uno sabrá que en no pocas ocasiones la banda ha dado ciertos giros en cuanto a lo que aura o estilo se refiere. Bien sea por no encasillarse demasiado, bien por contrato, o porque les salía de sus germanos atributos, ahí que tenemos obras tan dispares como 'Pink Bubbles Go Ape', el aberrante 'Chameleon' o los logradísimos giros hacia la oscuridad más densa de la mano de 'The Dark Ride' (aquí quizás un tanto exageradamente) o el más reciente '7 Sinners' del año 2010. Que se niegan a dar vueltas siempre en torno a lo mismo y buscan renovar la propuesta, vamos. Y por lo visto, ahora tocaba de nuevo y desde luego que se perciben buenas formas, aunque la cosa haya quedado igual un poco a mitad de camino.

Y es que si con los ya citados cortes, u otros de la talla de "Heroes" (cojonuda simpleza de las que entran según te la calzas) o "The Swing Of A Fallen World" y la sombría atmósfera que destila, el grupo muestra algunas de sus mejores cartas. Con otros quizás en los que todo eso no ha terminado de cuajar del todo, la cosa pierde algún que otro entero. La también oscura "You, Still Of War", que arranca bien pero no termina nunca de despegar, o la balada "Like Everybody Else" (se agradece que huyan de lo típico, pero es más plana que una tabla de planchar con anorexia) serían un poco el contrapunto a todo lo analizado anteriormente.

Claro que aún así el álbum guarda algún que otro momentillo de furia heavymetalera de la mano de "Claws" y su arrollador inicio y contundencia general, pero cierto es que también flojea por otros lados. La trilladísima "Battle's Won" (estructuras escuchadas una y mil veces dentro de la misma banda), el simple tema título en el que se recuerda en exceso la línea vocal del "Power" del año 96, así como los refritos que "Lost In America" e "If God Loves Rock'N'Roll" muestran en sus estribillos (el de la primera un calco de "Who Is Mr. Madman?", "Final Fortune" auto plagiada en la otra), terminan por quitarle magia al invento. Y vale, alguno me dirá en favor de esta última que es un corte cachondo de los que siempre ha mostrado el grupo... pero siendo sinceros,  si aquí uno compara esto con lo que nos han podido brindar en otras ocasiones por esos derroteros, ya la cosa chirría más que nada. Y tampoco es por compararlo con temas de la talla de "Rise And Fall", "Perfect Gentleman" o incluso "Anything My Mama Don't Like". Eso ya sería hasta cruel... pero es que más que cachondeo, destila cierta ridiculez la tonadita de turno.

¿Que "Creatures In Heaven" y en menor medida "Living On The Edge" nos dan una muestra del innegociable sentimiento y estilo happy de la banda, pero sin repetirse como el ajo? Pues cierto es también y punto a su favor. Pero es que por otro lado, si uno planta la oreja sobre lo que nos ofrecen en todas sus bonus tracks ("Free World" sin complicarse mucho la vida, vale más que unas cuantas de las "oficiales" juntas), o si se le echa un ojo al atroz número de cortes con el que nuevamente nos vuelven a la carga, uno termina por asumir que lo que se pueda ganar con ambas, se puede perder por la manía que tienen en estirar los discos hasta el extremo. Aunque esto últimotampoco es que sea cosa exclusiva de ellos, vaya por delante, y sí de los tiempos que corren en los que muchas veces se exige por contrato ese engorde de disco, más propio de una granja bovina que de otra cosa.

Como ven, aciertos y fallos casi por igual, pero siempre con una esperanzadora visión. Y es que si de verdad el grupo tira por donde tiene que tirar en sucesivas entregas, si se queda con todo lo bueno que han sacado en la presente ocasión, nuevos y prometedores álbumes nos aguardan.

Sobre Andi, Weikath, Gerstner y demás, poco nuevo que añadir, a todo esto. Cada cual está genial en su apartado personal, como no se podía esperar de otra forma. Y seguramente incline la balanza un poco más en favor del disco, pero claro, aquí uno no puede obviar que, tras habérselo chutado en vena como cualquier otro del grupo, que las sensaciones finales no sean ni de lejos tan estupendas como las que quedan tras lo catado (por ejemplo) en las tres anteriores entregas. Y eso amigos míos, es lo que cuenta al final del todo.

No obstante, que conste que el que aquí escribe se los volverá a comer en vivo pase lo que pase, sigan editando lo que sigan editando. Que uno a pesar de todo es fan. Con su criterio, pero fan. O friki fan si me apuran. No lo descarten tampoco...

Álvaro López "Txondo"

Redacción
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Esta entrada fue escrita por Redacción

14 comentarios

  • Danilo dice:

    Que complejo el de la prensa, que siempre debe acabar con todo nuevo disco de Helloween. La ola creativa que inició con Gambling With The Devil tiene ahora otro de sus puntos más altos con My God-Given Right.

  • fan_helloween dice:

    Deseando de verlos en Madrid junto a Judas!!!!!

  • Juandie dice:

    Muy buen resumen por parte de TXONDO sobre lo nuevo de HELLOWEEN aunque si he de ser sincero de aquel power metal primigenio que inició esta banda con MICHAEL KISKE a la cabeza ya queda poco en su música, incluso llevan muchos años anclados en su tipo de heavy metal particular que solo ellos saben llevar tan bien en su terreno.La portada no esta mal aunque las he visto mejores en albumnes anteriores!!!

  • David dice:

    Joder Danilo. Ola creativa a partir del Gambling? Si a partir de ahí solo han sacado churros con algún tema suelto decente. Por no comentar el bochornoso Rock in Río, buscad el I want out y flipareis en colores

  • Nano dice:

    Bueno que conste que una vez mas les voy a dar una oportunidad esperando que de una vez por todas me dejen de decepcionar, no pretendo uan vuelta a los 80' eso es imposible porque el talento de aquellos discos se fue del grupo o al menos dos de las partes que hacian funcionar el engranaje. Eso de las vueltas a los 80' o recuperar el sonido de los Keeper es una estrategia(mala) de marketing que te ilusiona justo lo que tardas en comprar el disco y meterlo en el reproductor, despues ves que es mas de lo mismo. Yo puedo escuchar cualquier cosa y no podria explicar porque unas cosas te entran a la primera, otras necesitan varias escuchas y otras hacen que te invada la pereza y no quieras volver a escucharlo mas, este ultimo caso suele ser el que relaciono con estos Helloween. Despues de la trilogia inicial de Deris mencionada muy poquito por no decir nada, desde el Better than Raw hacia aca... Los ultimos discos que he intentado y reintentado y reintentado escuchar para ver si me terminaban gustando son el The dark ride y el mal llamado Keeper 3 (funciono el marketing) el resto de discos salvo uno o dos singles son completamente confusos e irreconocibles para mi, podrian ponerme dos seguidos y no saber cuando temina el uno y empieza el otro. Podriamos empezar que a pesar de caerme simpatico Deris no me parece el cantante adecuado para una banda como Helloween, pero no comparandolo con Kiske, haciendolo con otro cualquiera como por ejemplo Jorn Lande , Tobbias Sammet ...etc y no digo nada sobre su labor compositiva, no me encaja sin mas ni mejor ni peor , al menos de la idea o recuerdo que tengo de lo que deberia ser Helloween. A las guitarras las falta alma, alegria o quizas sea problema de afinacion, pero no son aquellos duelos Hansen- weikath de antaño . Quizas el problema sea mio, pero me aburren soberanamente y me da mucha pena que un nombre de leyenda musical se esteutilizando para esto. El Chamaleon? Uff incluso para momentos tranquilos se puede aprovechar y ojala sacaran algun que otro Giants mas... Bueno que les voy a dar otra oportunidad y no prometo que sea la ultima

  • Ey dice:

    Discazo. Son los 5 primeros temas son sublimes. El que hizo la crítica debe escuchar más veces el disco.

  • Txondo dice:

    Ey, sólo decirte que me lo he chutado en vena, sentadito, a todo trapo y libreto en mano siguiendo la letra. El ritual sagrado, como con cualquier otro disco de las calabazas, ya que son MI GRUPO... otra cosa es que tengamos opiniones bien distintas, y todas respetables.

    Gracias a todos por los comments!

  • alfredo salvatierra dice:

    Hombre Txondo , "opiniones distintas" ? , la diferencia es que tu tenéis tinta y plumero en una web "rockera" , tener mas criterio y ser menos subjetivo , si bien los helloween tienen rato sin algo decente los primeros 6 temas de este plástico son grandes , para dar 6.5 ? madre mía , pero no fueran las bandas infladas por esta web que les ponen 9.5 caso mago de oz , etc... en fin saludos ..

  • Adrian S. dice:

    El legado de Helloween para la historia será para siempre "Walls of Jericho" y "Keeper of the seven keys I y II". A partir de ahí hicieron buenos discos, y pese a gustos, lo cierto es que Helloween sigue siendo una banda respetada y con estatus en Europa. Si bien durante los 80 les escuché hasta la obsesión, la marcha de Hansen me empujó a abandonarles durante años, hasta que un buen día decidí retomarlos. Para empezar, Deris no me gusta; es un gran profesional, es un buen showman, pero su voz, con ese estilo que tanto gusta en el metal alemán, no me entra, no acaba de convencerme. Tras mi reconciliación con Helloween pude apreciar un buen disco en "Pink bubbles go ape", una digna continuación de "Keeper II" teniendo en cuenta la marcha de Hansen. "Chameleon" está lejos de ser una aberración, como dice el firmante de la reseña de este nuevo disco de las calabazas; es posiblemente uno de los álbunes con más estilo y musicalidad que se haya grabado nunca dentro del heavy metal, pero es cierto que está alejado del power que les encumbró, y que con el tiempo les ha restituido su sitio. Los dos primeros discos con Deris son francamente buenos, pero "Better than raw"... no sé, siempre he tenido la sensación desde entonces que Weikath se limita a hacer 2 ó 3 temas con gancho, y el resto son relleno. "7 sinners" no me gustó, y este nuevo disco pintaba bien en inicio, sobre todo porque se notaba frescura... pero al final me quedo con la misma sensación: dos temas salvables, el resto no cuajan.

    Pero es mi opinión; sé que el disco gustará a muchos fans de Helloween, y sé que harán una buena gira. Porque si algo han sabido hacer Weikath y Grosskopf durante estos años es mantener las esencias más ochenteras de Helloween, y de dar a sus fans, salvo algún cambio de rumbo (a lo cual tienen derecho como músicos, desde luego), lo que quieren.

  • Nano dice:

    Definitivamente me parece muy malo, no se porque un tio como Deris tan campechano y simpatico en el cara a cara , canta de un tiempo para aca como si estuviese enfadado incluso en una cancion como Lost in America que se supone relata una experiencia graciosa. Ya he dicho que no es el tipo de cantante que me gusta para Helloween pero por ejemplo en The Time of the oath hace un gran trabajo incluso en algun disco mas, pero de tres discos para aca se ha olvidado de la melodia totalmente, de la alegria vocal y de los cambios de registro, como digo parece que canta enfadado, agresivo que incluso en algun momento va a lanzar algun gutural ... En fin hasta esos dos temas mas accesibles que decis que sacaban echo en falta , los Power, I Can , Mr Torture, If a could Fly , Ms God ...etc al menos eran vitalistas, alegres y de alguna forma mas usuales de Helloween o de lo que yo creo que deben ser, igual estoy equivocado, pero sinceramente escucho Unisonic y disfruto de verdad y no solo por Michael Kiske. Yo a estos Helloween no les veo la esencia de los 80 por ningun lado, cada vez menos

  • Adrian S. dice:

    Bueno Nano, sí que las tienen: Weikath es el que en todos los discos mete esas estructuras típicas power de los Helloween de antaño, otra cosa es que sean acertadas, efectivas, o acaben por ser machaconas y aburridas. Pero claro, está la otra parte, que es Deris, el cual no proviene de una tradición power, sino más bien del hard rock, esencia que se nota mucho en buena parte de los cortes que compone. Y es cierto que llevan años intentando una orientación musical menos power y más oscura... pero no intuyo que tengan la habilidad de hacerlo bien. Quiero decir, hay bandas que han comenzado haciendo música con unas estructuras muy marcadas, pero que han sabido con el tiempo diversificar y hacer cosas distintas y que encima suenan divinas. No es el caso de Helloween. La grandeza de Helloween en los 80 residía en la capacidad compositiva que tenían, sobre todo de la mano de Hansen y Weikath; Weikath no es un mal compositor, pero a todas luces hoy tiene sus limitaciones, y si le sacas de su metro cuadrado se pierde. Es como si quemase todo su potencial hace años. Salvando las distancias (y vaya por delante que soy fan acérrimo de Maiden), veo lo mismo en Steve Harris; es indudable su pericia con el bajo y su liderazgo en la banda, pero su capacidad para componer en los últimos años se ha limitado bastante, cerrándose a unas estructuras rígidas y poco flexibles. En cualquier caso, Helloween tiene difícil adaptar su estilo; primero porque los fans no se lo perdonarían, esto ya lo sabemos, y segundo, porque tampoco cuando varían las esencias hacen algo realmente interesante.

  • Nano dice:

    Quizas Adrian S. Lo que yo intentaba explicar lo has definido tu mejor, puede ser que mantengan un sonido ochentero o clasico generico dentro del metal de esa epoca, lo que queria decir es que no creo que lo que hacen ahora sea power metal o al menos como lo hacian antes. Discos como Master of rings o The time of the oath(que me parece un discazo, el mejor con Deris) si creo que estan en una onda parecida, en Better than raw canciones como Push empiezan a salirse del tiesto, the dark ride no me parece un mal disco es mas oscuro en las letras pero sigo viendo power al igual que en Rabbit dont... Que no me parece brillante pero sigue una progresión, Al igual que el legacy en el que no encuentro mucha diferencia con el anterior, salvo por volver a meter un tema de trece minutos. Es a partir del Gambling... cuando siguiendo el estilo Kill it se radicalizan , se tornan mas agresivos sobre todo vocalmente y se hunden en la monotonia, las guitarra me parecen todas iguales, sin alegria, con extructuras hipersimples me da igual un disco que otro hasta este ultimo incluido ¿inspiracion? ¿Afinacion? De todo un poco, creo que simplemente hacen heavy metal con algun toque hard como dices por parte de Deris, pero vamos porque mete algun medio tiempo o balada poco agradecida. Alguien dijo un dia que Weikath era un tio poco trabajador con la guitarra, que pasaba meses sin tocar absolutamente nada, que no le interesaba aprender nada mas desde muy al principio, basicamente que se aburria tocando y seguramente esto tiene mucho que ver . Ademas siempre tiende a culpar a los demas de sus propias fustraciones, la culpa de Chamaleon era de Kiske, la de the dark ride de Grapow y uli kush y todos a la calle, nunca se responsabiliza

  • Adrian S. dice:

    Weikath es un tipo complicado, no debe de ser fácil tratar con él, si bien creo que el tiempo le ha hecho madurar. Como guitarrista sí, siempre me ha dado la impresión de ser un poco vago, y eso se le ha notado incluso en las giras, sobre todo en su lenguaje corporal al tocar, y ya ni mencionamos la cantidad de veces que estaba tan colocado que no daba ni una nota bien. Ya en el estudio... pues es lógico que si te cierras a una sola forma de hacer las cosas llegará un momento en que todo parecerá igual. También creo que Weikath ha hecho un esfuerzo por hacer power intentando alejarse de los discos grabados con Hansen, y eso en mi opinión es un error. En cualquier caso, sus fans les adoran, y siempre que hacen un disco se colocan en lo más alto de la palestra del metal; no son los Helloween apabullantes de los 80, pero son Helloween al fin y al cabo.

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