Entrevista a Lülu: “Estoy convencido de que “Saudade” es uno de los mejores discos de 2020 y tiene que ser escuchado”

 ¿Cómo surge la idea de hacer una canción de estas características?

“Hace muchos años que tenía en mente hacer algo así, pero nunca había dado el paso. Tenía varias ideas en la cabeza y sólo había que sentarse a ponerlo todo en orden y empezar a trabajar”.

¿Cuándo se gesta y cuánto tiempo te lleva la grabación?

“Empecé a grabar las primeras ideas antes de que nos confinaran. Tenía algunas melodías en la cabeza y algunos fragmentos de letra. Toda la parte de las gaitas, por ejemplo, ya la había compuesto y maquetado antes del confinamiento; se lo pasé a Óscar Rodríguez (el gaitero) con la idea de la melodía, y él me la devolvió con cinco pistas de gaita. Ahí ya supe que iba a ser un temazo. Poco después nos confinaron, así que empecé a meterme en el estudio que tengo en casa hasta ocho horas diarias. En dos semanas tenía la estructura completa maquetada y empecé a currar a distancia con los músicos que grabarían cuando terminase el confinamiento. Cuando nos desconfinaron, Rodri Arias se vino a mi casa a grabar las guitarras, y Fernando Quintela los bajos. El resto de músicos grabaron en sus respectivos estudios; esas grabaciones tuve que producirlas a distancia, entre mails, audios de WhatsApp y llamadas: “Esta parte de la flamenca mejor cámbiala; en esa parte de saxo mejor mete estas notas; ese redoble de batera es demasiado largo, cambia ese bombo de sitio...”. Luego se le envió todo a Álvaro Rodríguez (pianista de Robe) para que metiese pianos y teclados y se ocupase de la mezcla, y la verdad es que no puedo estar más contento con el resultado”.

Para cualquier seguidor del rock estatal, es inevitable escuchar ‘Saudade’ y no acordarse de ‘Pedrá’. ¿Cuánta influencia hay de ese LP de Extremoduro en tu nueva obra?

“Bueno, la influencia de Robe y de Extremoduro está presente en mis composiciones desde que hago música, no solo en este trabajo. Es verdad que al ser una única canción de larga duración, es inevitable pensar en Extremoduro; en el ‘Pedrá’ o en ‘La ley Innata’, pero luego en lo musical hay muchas influencias que a lo mejor nadie ha notado...”.

¿Y cuáles son esas influencias?

“Desde Mike Oldfield hasta algún cantautor e incluso de bandas de punk en algunas partes, y luego están las influencias de los músicos que grabaron, que son muy diferentes a las mías y se notarán en los arreglos”.

¿Qué parte del tema es la que más te costó rematar?

“La letra en general. Tenía varias partes de la letra y las melodías, pero luego hacer una letra tan larga intentando decir lo que quería en cada verso respetando rimas y métricas, que transmitiese y que tuviese sentido como un “todo”... Por poco me da un ictus” (risas).

¿Tienes ya preparado nuevo material?

“No. Me he vaciado con ‘Saudade’ y la he sacado ya porque no me gusta guardar las canciones en un cajón esperando a que sea el momento; las canciones tienen que estar frescas, pero quiero darle tiempo a este trabajo para que llegue lo más lejos posible, ya que estoy convencido de que es, no sólo mi mejor trabajo, sino uno de los mejores discos de 2020 y tiene que ser escuchado (ndr. - Yo también). Así, sin paños calientes”.

Cuando salgamos de esto, ¿qué le espera a Lülu en el futuro más inmediato?

“Pues espero que podamos tocar en 2021, ya que de momento sólo he podido dar un bolo de presentación de ‘Saudade’ (eso sí, con un equipazo y sonidazo increíble). Me gustaría poder estar en festivales con la banda el año que viene, pero está difícil porque muchos festis repiten cartel. De todas formas, me toca dar el coñazo y llamar a todas las puertas que se pueda para intentar tocar en 2021 todo lo que no hemos tocado en 2020”.

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