Crónicas

The Rolling Stones en Nueva Orleans: La grandeza de los hijos predilectos del blues

«Siguen siendo los más grandes, los hijos predilectos del blues que llegaron a lo más alto del mundo del rock´n´roll. Si se mantienen en este ritmo, y la salud les respeta, no descarto que pronto pudiéramos tener noticias de una gira europea en 2025.»

2 mayo 2024

Festival de Jazz de Nueva Orleans, Fair Grounds Course Race

Texto: Mariano Muniesa.

Había que estar allí. Nueva Orleans, el delta del Mississippi, la cuna del jazz y del blues, el origen de toda nuestra historia, acogía a sus hijos predilectos, a la banda que dio a conocer al mundo a Muddy Waters, Robert Johnson, Willie Dixon, Elmore James y a todos los grandes pioneros. Los Rolling Stones aceptaron participar en la edición 2024 del Festival Internacional de Jazz de Nueva Orleans, un magnífico evento de carácter intercultural que reivindica sus raíces más genuinas y autóctonas dentro de la historia de la música popular contemporánea, y lo hicieron en un concierto muy especial por varios motivos. Un show que me consta será inolvidable para todas y todos los que tuvimos el privilegio de presenciarlo.

En primer lugar, porque esta es de las pocas veces que el grupo renunció a desplegar toda su parafernalia habitual en los conciertos del molde del “rock de estadios” e hizo su show en un escenario relativamente sencillo, propio de un festival de tipo estándar, comentábamos Mariskal Romero y yo que era como si los Stones tocasen en el Viña Rock, y en el que la sensación de cercanía, de genuina y radical honestidad, que los Stones siempre desprenden cada vez que se suben al escenario, si cabe, se hizo todavía más palpable.

En Nueva Orleans vimos a un grupo de rock, de puro blues y rock´n´roll disfrutando y haciendo disfrutar a todo su público. Como dato curioso al margen, este concierto comenzó a las 17.00 de la tarde y terminó exactamente dos horas después, todavía con luz natural, aunque en medio de un atardecer de una belleza y un contraste de colores propio de la magia que el grupo sabe crear.

Aunque nuestro objetivo fundamental eran obviamente los Stones, no quiero dejar de mencionar, aunque solo sea someramente, a los excelentes músicos que compartieron cartel con ellos en esta histórica jornada del festival. Dentro de la más pura ortodoxia del jazz clásico, con una fuerte base de soul y de funk, alrededor de las 12 de la mañana nos regalaban un excelente concierto de la mejor música negra New Breed Brass Band, banda que os debo reconocer que no conocía y que a partir de ahora no le perderé la pista.

En torno a las 13.30, Samantha Fish, una frontwoman rockera, pero con el alma blues de las pioneras del género, salía al escenario y de nuevo la sorpresa no podía ser más positiva. Temas fuertes, potentes e intensos del mejor hard rock y de blues contemporáneo arrancaron del público entusiastas ovaciones que nos dejaron a todos con un magnífico sabor de boca.

Y justo antes de los Stones, otra magnífica banda de funky jazz rock, que moviéndose en otros parámetros musicales, por momentos me recordó a aquellos Living Colour de finales de los 80 a los que descubrió Mick Jagger una noche de febrero de 1987 en el CBGB de Nueva York y a quienes llevó de gira con ellos y Guns N’ Roses en el ‘Steel Wheels’ Tour del otoño de 1989. Dumpstaphunk es un combo de un sonido ecléctico, mestizo y lleno de originalidad y virtuosismo que en una hora nos mostró una gama de recursos musicales, una calidad como instrumentistas y un talento tan extraordinario que me confieso su nuevo fan a partir de este momento. Como una mezcla entre James Brown, Funkadelic y Living Colour versión 2024.

Y por fin, como no podía ser de otra manera, en medio de una ovacion ensordecedora, The Rolling Stones aparecieron en escena atacando un “Start Me Up” que, con toda la sinceridad de este mundo, no tuvo la misma potencia ni la misma carga de impacto que debe tener un tema de los Stones a la hora de abrir un concierto. Sonó con el pie bajado del acelerador, hasta tal punto que nada más terminarlo, Mick Jagger les señaló a Steve Jordan y a Keith Richards que había que meter mucha más energía y mucha más potencia al ritmo del concierto.

Y así lo hicieron, como para llevarle la contraria a Jagger en una cosa así, y ya en el segundo tema, “Get Off My Cloud”, el panorama cambió por completo. Rock fuerte, la banda a toda velocidad y a toda potencia poniendo a cantar a todo el auditorio el “Hey hey, you you, get off my cloud!”.

 

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Vuelve al repertorio “Out of Time”, esa vieja joya de los 60 que estrenaron para todo el planeta en directo en Madrid en junio de 2022, y para seguir con piezas memorables de su historia, un “Let It Bleed” que va a contar con la colaboración de un excelente acordeonista como Dwayne Dopsie. Una versión sensacional del gran clásico de 1969 a la que sigue nada más y nada menos que "Time Is On My Side", con la colaboración de Irma Thomas, la genial cantante de blues que grabó este tema a comienzos de los 60 y que el grupo versionó en 1965.

Inevitable para mí el recuerdo a aquella noche de lluvia, rayos y truenos de julio de 1982, primera actuación de los Rolling Stones en el estadio Vicente Calderón de Madrid, donde tocaron este inmenso blues dedicado a mi añorado amigo y maestro Jordi Tardá, que vio aquel concierto desde el backstage del estadio recién recuperado de un grave problema de salud.

 

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Dos temas de ‘Hackney Diamonds’ integran el setlist en esta primera mitad de la actuación, “Angry”, que suena que atruena, con Keith Richards y Ronnie Wood golpeando con una fiereza y una fuerza descomunal el riff de guitarra de este nuevo clásico rockero crudo stoniano, así como “Whole Wide World”, que creo sinceramente está llamado a ser un imprescindible en el setlist de esta gira.

“Tumbling Dice” y “You Can´t Always Get What You Want”, ambas muy bien recibidas y en las que la banda lo borda, nos llevan a ese momento especial en cada show de los Stones. Mick presenta a todo el personal que se encuentra arriba del escenario dejando para el final a Keith, que ya no hace dos temas como antes, sino simplemente uno. En esta gira parece ser que ese tema será “Little T&A”, y espero que lo ensaye más… No es la primera vez que le pasa, se le volvió a olvidar la letra. Pero es Keith Richards, el riff humano, el rock hecho espíritu, y verle a poco más de diez metros no deja de estremecerme, aunque obviamente, hoy no lo hizo bien en su canción.

Entramos en la segunda parte del concierto con “Sympathy For The Devil”, otro de los temas mejor acogidos por el público, en el que Mick Jagger hizo uno más de los alardes de liderazgo que hacen que, a nivel de directo, los Stones echen el peso del concierto sobre sus espaldas. Es de verdad increíble la fortaleza física, la energía que desprende y como con 80 años de edad corre, baila, anima al público y canta con su voz intacta dos horas de concierto a un nivel de exigencia de verdad impresionante. Es, sin lugar a dudas, el mejor frontman de la historia del rock desde 1962.

Un potente y endurecido “Honky Tonk Women” nos lleva a “Miss You”, en el que el protagonismo es, como viene siendo habitual en las últimas giras, para el bajo de Darryl Jones. Le siguen “Gimme Shelter”, “Paint It Black” y un “Jumpin’ Jack Flash” de verdadera apoteosis. Este temazo debería volver a ser el que abriera sus actuaciones. Tras una breve retirada, vuelven para hacer una maravillosa “Sweet Sounds of Heaven” y acabar definitivamente con “(I Can´t Get No) Satisfaction”.

Los Stones están en un estado de forma increíble, con independencia de que tal vez Keith necesite que pasen algunos conciertos más y adquirir el rodaje que quizá le haga falta para poder darlo todo, pero en actuaciones como esta no dejaron lugar a la duda. Siguen siendo los más grandes, los hijos predilectos del blues que llegaron a lo más alto del mundo del rock´n´roll. Si se mantienen en este ritmo, y la salud les respeta, no descarto que pronto pudiéramos tener noticias de una gira europea en 2025.

Los Stones, siempre los Stones.

Mariano Muniesa
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Esta entrada fue escrita por Mariano Muniesa

1 comentario

  • Juandie dice:

    Pedazo de resumen hacia otro gran concierto por parte de los históricos THE ROLLING STONES presentando su nuevo álbum junto a sus clásicos de siempre en la cuna del Blues como es Nueva Orleans. Un puto placer disfrutao de este clásico en directo a través de este cojonudo video.

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