Crónicas
St. Vincent + Anna B Savage: Un cuadro de rock para la memoria
«St. Vincent llegó a Madrid dispuesta a meterse al público en el bolsillo y no tardó en conseguirlo pintando un oscuro cuadro de rock para dejar en la memoria de cada asistente»
20 octubre 2024
La Riviera, Madrid
Texto: Mauro Nicolás Gamboa. Fotos: Alfonso Dávila
La gira de St. Vincent llegaba a nuestro país con la reciente publicación de los temas del álbum 'All Born Screaming' en nuestro idioma, una iniciativa que iba a tener mucho peso durante la actuación en la capital que no nos podíamos perder.
Anna B Savage, custodiada solamente por su guitarra y una caja electrónica que le disparaban sonidos, realizó su corto y emocionante set con el que logró hacer vibrar a los fans con canciones como “Corncrakers”, “The Ghost”, "In|FLUX” o "Pavlov's Dog” entre otras. Enorme aplauso se llevó al concluir su concierto.
El momento estelar de la velada llegaba. La Riviera, que había colgado el cartel de “sold out”, apagaba las luces al completo. El escenario completamente a oscuras, todo el fondo cubierto por una inmensa cortina negra, la cual contenía una flor del revés estampada en uno de sus laterales, una luz en el suelo que ilumina a la artista desde atrás, intro disparada, silencio sepulcral y expectante en la sala que luce abarrotada, y comienza con… Pues no comienza.
Lamentablemente, debido a problemas técnicos, no se escuchaba la voz de St. Vincent, lo que obligó a los músicos a salir del stage. Pasados unos minutos y después de solucionar el contratiempo, ahora sí, llegaba la descarga. Abrieron con “Reckless”, de la cual cantaron parte en castellano, “Fear The Future” y “Los Ageless”, y la potencia se adueñaba del show. Tremenda demostración de talento de Annie Clark. El alma mater de St Vincent.
El "All Born Screaming Tour" deja huella. Lo garantizo. Su virtuosismo es evidente desde que conocimos su trabajo debut, 'Marry Me', y la evolución es notoria. Su rock tiene distintos matices que hacen que el público conecte con St. Vincent desde el incio del show.
El solo incendiario que hizo en “Morrow” fue épico. La artista estadounidense demuestra sobre las tablas por qué es una de las mejores guitarristas del rock en la actualidad.
Recordó su última visita a Madrid, y en castellano comentó estar "muy inspirada por vuestra gente, vuestra música, vuestro lenguaje, vuestro arte". Continuó: "El último disco está inspirado en las pinturas negras de Goya. El álbum 'All Born Screaming' se ha grabado de nuevo este año en español”, y el público la ovaciona por su esfuerzo para hablar en la lengua de Cervantes.
En “Violent Times” continuó demostrando el poderío de su gola acompañada en esta oportunidad sólo por un teclado, y parte de la canción la hizo en castellano. Guiño muy valorado por el respetable, que cantaba acompañando a St. Vincent en todo momento.
La artista recorría el escenario de costa a costa. Toca las manos de los fans de las primeras filas, coge un cámara para filmar un video durante el show sin dejar de cantar y se muestra feliz.
La sólida banda demuestra su virtuosismo en “Digital Witness”, el público acompaña incesantemente con palmas en “Sweetest Fruit”, en “Flea” hacen una coreografía los ejecutantes de los instrumentos de cuerdas y en “Cheerleader” la frontwoman se mueve hasta la posición de cada uno de sus compañeros cantando y la canción termina con un sólo de batería a puro fuego.
Seguramente el espíritu de Goya y Lucientes se haya apoderado del alma de St. Vincent y eso hace que sus “brochazos” con las seis cuerdas sean puro fuego que se transforma en piezas que canta toda la sala. La oscuridad de una de las últimas etapas del artista maño se percibe en las liricas y la estética de las canciones nuevas de la norteamericana, y la cantante muestra cómo su cuerpo es un lienzo sobre el que se ha posado la inmortal pintura llamada música.
Prosiguen el show con “Broken Man”, “Birth in Reverse”, “Hell Is Near”, todas de su última placa de estudio, 'All Born Screaming'. De “Candy Darling” comentó que estaba inspirada en un film de Almodóvar y realizó una épica interpretación ante una sala completamente en silencio que sólo tenía oídos para disfrutar de la histórica versión.
Annie agradece a su staff, a los fans, a la banda, a todos los que la ayudan y ejecutan “New York” para que los presentes demuestren su devoción por la cantante que sabe llenar al completo el escenario. Posee una solvencia sobre las tablas digna de destacar.
Según la canción, coge su guitarra eléctrica para hacer temblar el recinto y por momentos solo canta para hacer vibrar a sus seguidores. Una artista completa y virtuosa que hipnotiza con su show. St. Vincent lidera con creces uno de los grupos de rock de todo el orbe que más adeptos va logrando con su sólida propuesta y la defiende con honor y sangre sobre las tablas.
En la etapa final del apoteósico concierto, en “Sugarboy”, se bate a duelo con su guitarrista, cada uno hace arder su guitarra tirados sobre el escenario y la banda realiza un final de canción majestuoso.
La penúltima bala es “All Born Screaming” y concluye la frontwoman, acompañada solamente por su tecladista, con “Somebody Like Me” para poner punto y final a una noche de verdadero rock con evidente aroma a pintura goyesca.
St. Vincent pasó por Madrid dejando un cuadro musical para que los fans lo cuelguen en su memoria.
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1 comentario
Pedazo de resumen para el buen concierto que se curró esta banda como son ST. VINCENT a través de estos conocidos temas en La Riviera madrileña.