Crónicas

Mr. Big + Jared James Nichols en Madrid: ¿La última gira?

«¿Será realmente la última gira de Mr. Big o se unirán al club de grupos como Scorpions o recientemente Mötley Crüe? El tiempo dictará sentencia, pero si echaran marcha atrás, creo que se lo perdonaríamos sin dudarlo.»

28 marzo 2024

Sala La Riviera, Madrid

Texto: Alex Rico. Fotos: Jason Cenador.

En tiempos de Semana Santa, para los que nuestra religión es la música, hay pocas maneras mejores de convertir el escenario en un altar que recibir a Mr. Big, una de las bandas que coparon puestos muy altos en el hard rock mundial a principios de los noventa con el maravilloso ‘Lean Into It’, álbum que íbamos a poder paladear de forma íntegra esa noche. Este aliciente, sumado a que presumiblemente será la última oportunidad de ver a Eric Martin y compañía en una gira de despedida que han bautizado como "The Big Finish Tour", era algo realmente tentador como para dejarlo pasar y que dio como resultado el “no hay entradas” para sus fechas por nuestra península.

Mr. Big

Una gira en la que el trío original formado por el carismático vocalista Eric Martin, el bajista Billy Sheehan y Paul Gilbert como jefe de las seis cuerdas, se unirían a Nick D’Virgilio (Big Big Train) en la batería cubriendo así el lugar del tristemente fallecido Pat Torpey, que nos dejó en 2018 después de haber estado luchando varios años contra la enfermedad de Parkinson.

Como aperitivo, el virtuoso guitarrista Jared James Nichols calentó la sala La Riviera gracias a su habilidad para fusionar la nostalgia del blues con la intensidad y crudeza del rock moderno. Ataviado con chaleco vaquero y gorro tejano, no tardó en meterse al público en el bolsillo a base de riffs como los que deslizan “Easy Come, Easy Go”, con la que arrancó el pequeño espacio de tiempo del que disponía antes del plato principal de la noche.

Venía a presentar su último y homónimo disco y en él basó prácticamente la totalidad del repertorio. A la ya mencionada, se unieron las melodías hipnóticas de “Down The Drain”, la pegadiza “Hard Wired”, donde hubo algún pequeño problema con el sonido de su guitarra que se solucionó rápidamente, “Skin 'n Bone” o el maravilloso groove de “Good Time Girl”. Finalizaba el set con el inconfundible “War Pigs” de Black Sabbath, en detrimento de “Mississippi Queen”, canción con la que estaba cerrando sus conciertos habitualmente.

Jared James Nichols

El de Wisconsin demostró ser uno de los abanderados del presente y futuro del blues rock. Además, gracias a su habilidad para tocar sin púa, le hace tener una marca personal indeleble dentro del género que no dejará indiferente a nadie.

Uno de los mayores poderes de la música es ver una mezcla ecléctica de generaciones congregándose en un mismo concierto. Aunque era obvio que la media de edad de los allí presentes reflejaba una juventud vivida en los albores de los noventa con ganas de revivir por un par de horas aquellos días dorados, me sorprendió gratamente ver que algunos de ellos venían acompañados por hijos, sobrinos o cualquier parentesco que cimiente ese puente entre generaciones tan necesario en nuestros días. Cuando sean mayores, lo agradecerán.

Y ahora sí, con el “Blitzkrieg Bop” de los Ramones atronando por los altavoces, se apagaban las luces para comenzar la homilía de la emblemática banda californiana Mr. Big. Como si cronológicamente se tratara, abrieron su concierto con “Addicted To That Rush”, tema de una instrumentación magistral que también daba el pistoletazo a su álbum debut, y por ende, al comienzo de su carrera. Acto seguido, Paul Gilbert introducía una atmósfera progresiva de acordes para dar la bienvenida a la melódica “Take Cover” y terminar con los riffs de “Price You Gotta Pay”, donde Billy Sheehan toma la armónica brevemente mientras Eric Martin, situado detrás de él, extiende sus brazos para continuar tocando la línea de bajo de Billy en una muestra de la conexión que la banda tiene encima de un escenario.

Tras estos primeros temas, llegaba el momento de disfrutar íntegramente su obra maestra ‘Lean Into It’, lanzada en 1991. Un álbum considerado como uno de los trabajos más importantes de hard rock de la década de los noventa para el que parece que no han pasado los años. Cada una de las once canciones que lo componen fue un viaje al pasado y seguramente alguno pensaría en su cabeza qué estaba haciendo o cuándo fue la primera vez que oyó cualquiera de los singles que rotaron en la MTV.

La energía arrolladora de “Daddy, Brother, Lover, Little Boy (The Electric Drill Song)” se apoderó de todos nosotros en este tema conocido también en directo por el momento en que Paul Gilbert y Billy Sheehan sustituyen su púa por un taladro, creando así un efecto de un solo tan extremadamente rápido que es imposible de reproducir sin la herramienta. Sin pausa, “Alive and Kickin'” nos golpeó en la cara con esos guantes de boxeo setenteros que te noquean una y otra vez en cada compás. La siguiente en sonar, “Green-Tinted Sixties Mind”, con sus deliciosos coros, convirtieron a la sala en un karaoke multitudinario. Un tema con un claro ambiente a radiofórmula que engancha desde el hipnótico primer fraseo de guitarra de Gilbert que ejerce de hilo conductor.

Mr. Big

Cuando tienes el privilegio de escuchar este disco completo en directo, aprecias todavía más que cada canción es como un ladrillo bien colocado que construye un sólido muro de éxito sobre éxito. Con esta premisa aparece “CDFF-Lucky This Time”, un tema compuesto por Jeff Paris al que Mr. Big le dio su toque ochentero que sonó a gloria, pese a que Eric Martin no atravesaba su mejor momento vocal en este tramo de la gira.

Recordemos que hacía tan solo una semana el propio Eric anunció que estaba arrastrando unos problemas en su voz y que había tomado la decisión de reclutar a su amigo Michele Luppi (teclista y corista de Whitesnake) para que le acompañara en algunos conciertos mientras recuperaba fuerzas: “No sé cómo va a funcionar esto, pero es mejor que las alternativas y seguro que me hará sentir muchísimo mejor”. Y a la vista está que funcionó.

Seguíamos con “Voodoo Kiss”, que tiene un aroma que siempre me ha recordado a Aerosmith en su época del ‘Permanent Vacation’ y “Never Say Never”, con Billy Sheehan ya instalado en su bajo de dos mástiles y cuyo estribillo es imposible que no se mantenga durante horas revoloteando en tu cerebro. Es muy probable que para muchos, especialmente aquellos que no son seguidores acérrimos de Mr. Big, el nombre de la banda les resulte familiar gracias a sus míticas baladas, como es el caso de “Just Take My Heart” que sonó simplemente deliciosa.

Mr. Big

Tiempo para la vacilona “My Kinda Woman”, “A Little Too Loose” y “Road To Ruin”, otros claros ejemplos de cómo la dupla Sheehan - Gilbert está engrasada a la perfección. De esta forma daban paso a “To Be With You”, su himno por excelencia y el pilar fundamental del reconocimiento mediático de la banda en la década de los noventa. Poco que añadir.

El último tramo del concierto comenzaba con Eric Martin, guitarra acústica en mano, interpretando el famoso tema de Cat Stevens, “Wild World”. Todavía resuena en mi cabeza la sala completa cantando al unísono el “Oh, baby, baby, it's a wild world”. Como es menester, tanto Paul Gilbert como Billy Sheehan tuvieron la oportunidad de brillar y demostrar su virtuosismo con sus respectivos instrumentos. Primeramente, fue Gilbert quien se arrancó con esas frenéticas progresiones de guitarra y, tras la poderosa “Colorado Bulldog”, Sheehan se apropiaba del escenario para hacer bailar las cuerdas del bajo a su antojo.

Mr. Big

Nos acercábamos al final con “Shy Boy”, un tema de Talas, la primera banda de Sheehan antes de su disolución en 1983, y “30 Days In The Hole”, del grupo británico Humble Pie, que otros artistas como The Black Crowes también se han animado a hacer suya. Todo un temazo, por cierto. Y ahora sí, el concierto llegaba a su fin, no sin antes deleitarnos con “Good Lovin', original de The Olympics, donde Billy Sheehan toma las riendas vocales cambiándose con Eric Martin, que ejerce la labor de bajista, y “Baba O'Riley”, el clásico de The Who con el que se despedían para siempre de la audiencia de la capital.

¿Será realmente la última gira de Mr. Big o se unirán al club de grupos como Scorpions o recientemente Mötley Crüe? El tiempo dictará sentencia, pero si echaran marcha atrás, creo que se lo perdonaríamos sin dudarlo.

Mr. Big

 Setlist James Jared Nichols:

Easy Come, Easy Go
Down TheDrain
Hard Wired
Threw Me ToTheWolves
Skin 'n Bone
Good Time Girl
WarPigs

Setlist Mr. Big:

Addicted to That Rush
Take Cover
Price You GottaPay
Daddy, Brother, Lover, Little Boy (The Electric Drill Song)
Alive and Kickin'
Green-Tinted Sixties Mind
CDFF-Lucky This Time
Voodoo Kiss
Never SayNever
Just Take My Heart
My Kinda Woman
A Little TooLoose
Road to Ruin
To Be With You
Wild World
Colorado Bulldog
ShyBoy
30 Days in theHole
Good Lovin'
Baba O'Riley

Alejandro Rico
Etiquetas: , , , , , , ,

Categorizado en: , ,

Esta entrada fue escrita por Alejandro Rico

1 comentario

  • Juandie dice:

    Pedazo de resumen hacia el gran concierto que se curraron unos históricos del Hard Rock como son esos musicazos bajo el manto de MR.BIG a través de estos grandes clásicos junto con alguna que otra versión en La Riviera madrileña. Gran concierto igualmente por parte de un gran músico y guitarrista como es JARED JAMES NICHOLS y sus buenos músicos como digna banda telonera.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *