Crónicas
Killdozer + Retador + Horrific: Triple ofensiva thrasher
«Me quedó la sensación de haber disfrutado de una noche intensa cien por cien, pero muy corta, gracias a tres bandas de un gran nivel, del que en muchas ocasiones no le exigimos a otras tantas que vienen de fuera»
6 mayo 2023
Sala Even, Sevilla
Texto y fotos: Jesús Manuel García Barba jesusmgbarba@gmail.com
Bajo el nombre de Triple Thrash Strike se presentaba esta propuesta en Sevilla después de que hace aproximadamente un año Killdozer, Retador y Horrific decidieran unirse para hacer unas cuantas fechas conjuntas por el territorio nacional, pero especialmente, en las localidades de cada banda. Habiendo pasado ya por Almería y Málaga, y la fecha añadida posteriormente de Murcia, le tocaba el turno a la capital andaluza.
Los almerienses Horrific se encargaban de abrir el show. Desde el principio, lo que más me llamó la atención fue la labor de Ricardo a la guitarra, sin olvidar una base rítmica con Rubén y Antonio (batería y bajo, respectivamente) muy contundente, con lo que creaban un sonido compacto; y la voz de Juan, sin efecto ninguno pero plagada de matices, algo que a veces se echa de menos en bandas de este estilo.
Los temas suelen estar inspirados en películas de terror o hechos escabrosos reales, y dicho esto, cuando leáis el título con el que abrieron seguro que pensáis en la misma película que yo: “Cosecha maldita”. ¿"Los Chicos del Maíz"?
Tras este primer pepinazo, siguieron otros tantos como “El séptimo día” (de su EP 'Creado en el Infierno'), “Noche sin ojos” o “Habitación 237”, basada en "El Resplandor", en la que ciertos pasajes me recordaron a los Motörhead más pesados.
Debido a lo apretado de los horarios al ser tres grupos en el cartel, a partir de este tema llegábamos al ecuador de su actuación. “La Ley del Diablo”, canción que en su día salió como single digital y que saldrá en una edición recopilatoria en vinilo de bandas españolas, nos fue encaminando al final del show.
Tenían al público en el bolsillo con esa mezcla de influencias que a mí me recordaban a bandas como SepticFlesh, Distillery, Vader o Morbid Angel, por nombrar algunas, y sin darse ni darnos un respiro, atacaron el tramo final con “Agujas de hielo”, "Crystal Lake" ("Viernes 13"), la versión de los venerados Death de Chuck Schuldiner con letra adaptada al español, y el tema homónimo de su EP, “Creado en el Infierno”, para despedirse dejándonos un gran sabor de boca y ávidos de más. Como se suele decir: “Lo bueno, si breve, dos veces bueno”.
Tras una corta parada para el cambio obligado de platos, algo de equipo y demás, llegaba el turno de Retador. Los malagueños nos dejaron claro que la noche no iba a decaer ni un ápice por ellos.
Abrieron con el tema que da nombre al grupo, que trae una intro previa con la que entran de manera frenética y ¡sin voz! Un tema instrumental de poco más de dos minutos para abrir un disco y un concierto. A eso le llamo yo tener las cosas claras y creer en uno mismo.
“La venda”, que es lo que no tienen ellos de ninguna de las maneras, nos ponía los ojos como platos. Un comienzo fulgurante es una cosa, lo de Retador es otra. Lo de Jofre, su vocalista, es para ser estudiado. Puro nervio sobre las tablas. Si fueran un elefante entrando en una cacharrería, destrozarían la cacharrería y el resto de locales de tres manzanas colindantes.
Para todo este “destrozo” se limitaron a hacer un “corta y pega” de su disco, titulado con el nombre del grupo , y pasarlo al setlist con sólo dos variaciones en la mitad y el final de la actuación.
La pegadiza “Furia” hizo las delicias del respetable, acompañando a la banda y coreando entre todos el título en parte del estribillo, empalmando casi de inmediato con la reivindicativa y espídica “Títeres”.
Por unos segundos se relajó el ambiente, quedándose en un espejismo, pues el comienzo de “Violencia” nos engañaba dando paso a un tema con muchas reminiscencias Megadeth en sus primeros acordes.
“Deseo de matar” podría ser el tema que resume lo que hace Retador (que se me entienda, en el sentido musical). Es como una montaña rusa que comienza con thrash-death, algún pasaje heavy metal entre medias, y vuelta al thrash de toda la vida, llevándonos a la mitad de su actuación.
El ecuador del show se cruzaba con un título que está muy presente en la vida política y empresarial de nuestro país, la canción titulada “Corrupción”, con la que sellaban que sus influencias más poderosas están dentro del thrash metal de la vieja escuela, de la que demuestran ser unos alumnos muy aventajados (lo de alumnos es un decir, claro...), trayéndome a la cabeza bandas de la talla de Overkill, Exodus, Kreator, Angelus Apatrida, Sodom, los ya nombrados Megadeth o Artillery...
Estábamos llegando al final, la banda había sido presentada y “Juicio Final” junto con “B52” serían de los últimos temas en sonar. “B52” en concreto me recordó mucho al “Alexander the Great” de Maiden por sus guitarras del comienzo y hacia el final, finiquitando la actuación con el trallazo “Lluvia de sangre”, que no pertenece al disco, y con la que nos dejaron con la sensación de: “¿Qué ha pasado?” Otra buena banda a seguir.
Tiempo para un cigarro, el que fumara, que se alargó en demasía, puesto que el batería de Killdozer tenía esa tarde pluriempleo con su otra banda y llegó con algo de retraso. En cierto modo la sala fue comprensiva y permitió que la actuación de los sevillanos no se viera coartada demasiado.
“Desecrate his Corpse”, con su ritmo pesado y un riff a lo Sabbath al inicio, nos llevaba de nuevo a la vorágine en que se había convertido la noche.
Ni se resintió el público ni la banda por el inesperado parón, más bien lo contrario, y nos vino de perlas para tomar aire, reponer líquidos y cambiar impresiones con algunos colegas y amigos.
Killdozer tenía muy claro que, “por si acaso”, debían tener al público atento al escenario, y de ello se ocupó muy bien Ángel, su vocalista, invitando e incitando a que los más animosos hicieran “mosh pit”.
Ni que decir tiene que la corta afluencia de público ayudó a que los involucrados en esta manifestación de aspavientos, saltos y patadas al aire se lo pasara de puta madre y, como casi siempre, no llegara la sangre al suelo.
“Deserve to Die” fue la antesala de “Into the Pit”, tema de Testament que Killdozer lleva a su terreno hasta hacerla suya.
La extensa “Released from Suffering” no hizo más que agitar a los más participativos de aquel baile de locos en el que se había convertido la zona inmediata a pie de escenario, bajo las indicaciones dirigidas desde el escenario por Ángel.
Y no quedaba tiempo para mucho más, siendo “Killdozer's Hate” la canción elegida (y bien elegida) para rematar la noche de la forma más machacona posible, dejándome la sensación de haber disfrutado de una noche intensa cien por cien, pero muy corta, gracias a tres bandas de un gran nivel, del que en muchas ocasiones no le exigimos a otras tantas que vienen de fuera pero que tan sólo por el hecho de cantar en inglés tienen ganado lo que a las de aquí les negamos por prejuicios absurdos.
Hacía tiempo que no disfrutaba tanto con tres grupos en una misma noche de esta forma y sin ser precisamente el estilo metalero que más me llena.
Conclusión: ¡no sólo de Angelus Apatrida vive el thrash metal español!
- Leyendas del Rock lanza un nuevo avance de 16 bandas para su cartel de 2025 liderado por Fear Factory, Lord of the Lost y el supergrupo Cemetery Skyline - 21 noviembre 2024
- Bolsa de noticias: Cradle of Filth (horarios de los conciertos) - Ancient Settlers - Serafín Mendoza - Rockbender - Sexitanian MetalRock Fest - 21 noviembre 2024
- Crónica de Nurcry + Judas Resurrection en Madrid: Reyes del heavy metal - 21 noviembre 2024
2 comentarios
Pedazo de resumen hacia las potentes y metaleras descargas que se curraron estas tres buenas bandas de nuestro pais como fueron KILLDOZER, RETADOR y HORRIFIC presentando algunas de ellas sus nuevos álbumes en la Eve hispalense.
Hermano en el concierto de killdozer fue tremendo, estaba como un puto loco gritando, bailando, me metí a to los mosh pits (era un jipi con una camiseta gris rasgada por los lados y pelo corto) fué una noche increíble se me hizo hasta corta.