Aerosmith: 50º aniversario de su debut, el álbum maldito que creó la leyenda
Blog: Mariano Muniesa
4 enero, 2023 1:39 pm 1 ComentarioEl 5 de enero de 1973 llegaba a las tiendas de discos de todo el mundo el debut de un grupo que con el tiempo, llegaría ser uno de los referentes clave del hard rock y el heavy metal en Estados Unidos. Steven Tyler, Joe Perry, Brad Whitford, Tom Hamilton y Joey Kramer crearon un proyecto musical que, partiendo de raíces claramente zeppelianas y stonianas, construyó su propio lenguaje y su propia identidad musical, siendo todavía hoy Aerosmith, 50 años después, una de las bandas más grandes de la historia del rock. Los pormenores y la historia desconocida de cómo se gestó aquel álbum debut, que no fue apreciado ni valorado hasta pasados varios años después, cuando el grupo asaltó los cielos y conquistó los escenarios, os la cuenta Mariano Muniesa en este reportaje especial.
Perdonen, pero ustedes no estaban invitados a esta fiesta…
Aerosmith surgió en el mercado musical como una alternativa de grupo de blues rock, que en cierta manera se podían considerar una versión americana tardía de aquellos grupos británicos de finales de los 60 –Cream, Led Zeppelin, Fleetwood Mac, etc.- que sentaron las bases del hard rock como estilo que llegó a lo más alto en la primera mitad de los años 70. De hecho, generacionalmente pertenecen a ese mundo y esas fueron sus influencias más primigenias, pero cuando finalmente consiguieron un contrato discográfico y editaron este primer disco, aunque el hard rock gozaba de excelente salud, el glam rock y rock progresivo eran los nuevos estilos que acaparaban la atención de la prensa musical y que más éxitos lograban en los charts a ambos lados del Atlántico.
Ello explica que comercialmente estuviera muy lejos de llegar a ser un éxito en 1973, aunque con el tiempo se ha revalorizado muchísimo y ha adquirido una popularidad y una consideración acorde con la calidad musical real que atesoraba.
‘Aerosmith’, hay que decirlo con toda claridad, no contenía nada particularmente innovador musicalmente, pero aún así aportará a la historia del grupo algunos momentos inolvidables. Es sin lugar a dudas el disco en el que el blues deja una mayor huella en sus canciones, algo que tratarían de replicar tres décadas después con el álbum de versiones de 2004, 'Honkin 'On Bobo', y como sucede en la mayoría de los discos de debut, es seguramente el más sincero. ‘Aerosmith’ es simplemente una banda de rock empapada de british blues, mucha esencia Stones y una actitud rockera descarada, sin doblez ni trastienda alguna, tanto cuando se escucha el penetrante riff de “Mama Kin”, la armónica y el rollo rock'n'roll bluesero de “Write Me A Letter” o su devoción por las raíces más primigenias de sus influencias directas, como dejarían claro en su versión de “Walking The Dog” de Rufus Thomas.
Recordando los orígenes
Un dato que muchos fans de la banda desconocieron hasta que el propio Steven Tyler lo explicó en su autobiografía es que empezó como músico siendo batería en su New Hampshire natal, a mediados de los 60, formando un grupo llamado Chain Reaction, con el que llegó a grabar algunos singles. Allí mismo, el guitarrista Joe Perry y el bajista Tom Hamilton habían formado un grupo de blues a mediados de 1968, The Jam Band, comúnmente conocido como The Joe Perry's Jam Band. En 1970 conocieron a Joey Kramer, un estudiante de Berkley que entró como batería justo poco antes que Joe Perry invitase a Steven Tyler, cliente habitual de la heladería donde trabajaba, a ver una actuación de The Jam Band en el Club The Barn de Sunapee, donde eran el grupo residente y donde también habían tocado alguna vez Chain Reaction.
Tyler se quedó prendado del grupo, Perry y los demás a su vez se mostraron impresionados por el rollo de estrella de rock que ya llevaba Tyler en esa época y la química entre ambos surgió de inmediato. Steven Tyler, al estar ya ocupado el puesto de batería, se incorporó al grupo como cantante, y a partir de ahí nació un nuevo grupo: Aerosmith, en el que entró de la mano de Steven Tyler otro guitarrista, Ray Tabano, quien no obstante no duró más de un año en la formación. Otro estudiante de Berkley, Brad Whitford, se unió como segundo guitarrista en 1971 en lugar de Tabano, completando el cuarteto clásico que conforma la banda hasta el día de hoy.
“Cuando empezamos, no éramos demasiado ambiciosos. Simplemente queríamos ser la mejor banda de rock de todo el jodido planeta” (Steven Tyler, 1977)
Cuando se lanzó su álbum debut, la banda había estado tocando constantemente durante casi tres años, ayudando a forjar un estilo de boogie-blues muy sólido y un sonido de hard rock basado en riffs directos, potentes y pegadizos. Pero una ciudad como Boston estaba muy lejos de ser el lugar más adecuado para lanzarse a conquistar el planeta, y de hecho, a pesar de la buena fama que Aerosmith fueron acumulando como banda solvente y profesional, no lograron tener un manager profesional hasta comienzos de 1972. Frank Connelly, promotor de conciertos y conocido empresario del mundo del espectáculo por aquel entonces, les vio en directo, le gustó la banda y se ofreció a ser su manager.
En primer lugar, y consciente de que el grupo tenía nivel para presentar un proyecto a una compañía de discos, les alquiló durante cuatro meses un hotel para que preparasen la base de un buen álbum que convenciese a alguna compañía. No siendo Connelly alguien con contactos importantes en la industria del disco, se asoció con Leber & Krebs, agencia de management que sí tenía esos contactos -años más tarde trabajaron con gente de la categoría de AC/DC y Metallica- y ellos fueron quienes presentaron las maquetas a Clive Davis, el todopoderoso director de Columbia Records, quien antes de tomar una decisión, insistió en ver al grupo en directo. Tras presenciar un concierto de Aerosmith en el Max's Kansas City de Nueva York, Davis se acercó al backstage y se limitó a decir: “Chicos, creo que podremos hacer algo con vosotros”.
Una semana más tarde y después de haber sido rechazados por Atlantic Records, Aerosmith firmaron el 21 de julio de 1972 con Columbia Records su primer contrato discográfico y entraron el 2 de octubre a los Intermedia Sound Studios de Boston para grabar su primer larga duración.
La producción corrió a cargo de Adrian Barber, productor de renombre que ya había grabado con Vanilla Fudge, Young Rascals y The Allman Brothers Band, aunque el grupo nunca guardó un buen recuerdo de su experiencia con Barber de productor.
Según contó Joe Perry en la biografía escrita por Stephen Davis, ‘Walk This Way’, “nuestro productor era un completo inútil. No tenía ni idea de cómo sacar lo mejor de nosotros. Cuando escuchaba las tomas terminadas de los temas, a pesar de que aquello no estaba mal, seguía pensando: "Somos mejores que esto. Deberíamos sonar mejor que esto. Nos están grabando mal. Sonamos jodidamente planos". Pero como carecía de experiencia acerca de cómo trabajar en un estudio y se suponía que Barber era un talento, me quedé callado. Me dolió sin embargo notar que mi guitarra no estaba sonando como debía sonar... hay magia en ella, pero no la magia que había imaginado”.
Brad Whitford, en la biografía de Aerosmith publicada por Martin Huxley: “Si vieras ahora, en los 90, el equipo con el que grabamos ‘Aerosmith’ te tirarías al suelo de risa. Hace poco volví a ver la mesa con la que grabamos el álbum y joder… ¡vaya pedazo de mierda! Se parecía a lo que usas para poner a punto el coche, pero en fin, lo que queda en la grabación es lo que de verdad cuenta”.
El 28 de octubre el álbum quedó definitivamente terminado y listo para entregar a fabricación. Repasemos tema por tema:
“Make It”
La carrera discográfica de Aerosmith comienza con un excelente ejemplo de las características de su sonido inicial. Para abrir el álbum, un riff poderoso que cabalga sobre una trepidante batería para desembocar en un hard rock muy zeppeliano, denso y que muestra a los Aerosmith más duros, más heavys en este disco. Un tema muy de directo que todavía podrían reivindicar.
“Somebody”
Es un tema muy similar a “Make It”, con un riff de guitarra fuerte al que ciertamente, aunque le falta garra, le falta cuerpo desde la producción –lo mismo sucede con el solo de guitarra- es la base de un tema muy característico en su composición del estilo Aerosmith y en el que destaca la buena labor de Steven Tyler como vocalista. Parece que la banda buscaba un hit-single para la radio con este tema -que probablemente habría funcionado para los Aerosmith posteriores y más pulidos-, pero nunca se hizo popular y, de hecho, la compañía lo rechazó como opción para sacar como sencillo.
“Dream On”
Es indudablemente, el gran clásico de este disco debut. Tuvo más éxito como single que el álbum en su conjunto, y en esta ocasión, entiendo que sí hay que poner en valor el buen trabajo de Adrian Barber como productor, que aquí sí supo dotar a la canción de esa intensidad y ese sentimiento que incorporaban tanto la melodía como la calidez de las guitarras, el piano y el mellotrón. Como single, alcanzó el puesto 59 de Billboard en 1973. Le fue mucho mejor durante un segundo lanzamiento en 1976, alcanzando el Top-10 después de que Aerosmith llegasen a la cima de su éxito en los 70.
“One Way Street”
Steven Tyler reconoció en la biografía de Stephen Davis, ‘Walk This Way’, que este tema estaba fuertemente inspirado en el “Midnight Rambler” de los Rolling Stones, y es cierto. Un hard rock con un rollo muy stoniano, un apoyo muy sugerente de la armónica y una base de ritmo muy fuerte y densa que le daba una gran solidez a uno de los mejores temas del disco, en el que Brad Whitford, que hace en “One Way Street” la guitarra principal, nos regala un solo formidable.
“Mama Kin’”
El clásico por definición de ‘Aerosmith’. Puro hard rock marca de la casa, con un riff de guitarra sensacional –aunque una vez más, no bien producido-, idóneo para el directo, pegadizo, con una excelente colaboración por parte de David Woodford en el saxofón y que ha quedado con el tiempo como una pieza imprescindible en todos los conciertos de la banda. Y como todo el mundo sabe, la pieza favorita de unos de sus más reconocidos fans, Guns N’Roses, quienes la versionaron para su EP ‘Lies’ de 1988.
“Write Me A Letter”
Siempre reivindicaré este medio tiempo rockanrollero, pegadizo y crudo como uno de esos clásicos de Aerosmith que nunca ha llegado a serlo pero que está para mí al nivel de “Toys In The Attic” o “Sick As A Dog”. Da toda la impresión de haber sido grabada en directo a una sola toma, contagia rollo de club, destila vapores de bourbon y es una pieza que, personalmente, no me canso de escuchar y disfrutar. Maravillosa una vez más la armónica que recubre de esencia blues esta canción.
“Movin' Out”
Es una canción con una cadencia blues muy acusada, incluso con un aire de rock sureño sugerente y bien trabajado. Su entrada, muy peculiar y característica me vino a la memoria en seguida la primera vez que escuché “Livin' On The Edge”. Decía de ella Steven Tyler que fue la primera canción que escribió con Joe Perry.
“Walking The Dog”
Los Rolling Stones grabaron una versión de este tema de Rufus Thomas en su primer álbum en 1964. Ocho años después, emulando a uno de los grupos que más les gustaban, Aerosmith grabaron también una versión de “Walking The Dog” en su debut, dándole obviamente un aire más rockero, recubierto de guitarras más recargadas y tal vez siendo más fieles al sonido blues de la versión original.
Un éxito que tardó varios años en ser reconocido
Según todos los rankings, ‘Aerosmith’ fue un fracaso en su lanzamiento, y al igual que su sencillo principal, que sin embargo sí fue mejor recibido comercialmente, recibió una nueva vida solo después de que la banda se abrió paso con éxito merced a sus álbumes de mediados de los 70 ‘Toys In The Attic’ y ‘Rocks’. Sin embargo, musicalmente este álbum resistió la prueba del tiempo y décadas después suena fresco, convincente y sobre todo, sincero, auténtico, puro blues rock despojado de cualquier artificiosidad. Y pese a todo, Columbia no dejó de creer en el grupo - ¡que diferente la mentalidad de la industria del disco de aquellos años, que creía en la maduración del talento y que trabajaba con proyectos a largo plazo de la actual! – siguió apostando por ellos y dos años después recogería los frutos de su fe en la banda multiplicados exponencialmente en relación al dinero que invirtieron en ellos.
50 años después, ‘Aerosmith’ es un disco que si indudablemente adolece de una producción no muy afortunada en algunos aspectos, muestra a una banda fuerte, sólida, con calidad, inspiración e imaginación. Y volverlo a escuchar, una auténtica gozada.
Escucha 'Aerosmith' en Spotify:
- Entrevista a The Dire Straits Experience: “Nunca olvidamos que la historia de Dire Straits terminó en España” - 12 noviembre 2024
- Entrevista a Juan José Castellano (Guitar Legends Hall): “El museo no es un espacio estático, queremos que tenga vida y que pasen cosas en él” - 7 noviembre 2024
- Crítica de Sínkope: Creer y luchar - 31 octubre 2024
1 comentario
Currado resumen hacia el 50 aniversario de el debut homónimo de los históricos AEROSMITH junto con sus temas más conocidos y algunos en directo.