TONY MACALPINE: CULTO A LAS SEIS Y A LAS OCHO CUERDAS

20 marzo, 2012 10:55 am Publicado por  1 Comentario

Ritmo & Compás (Madrid)

De vez en cuando somos testigos de representaciones musicales como ésta, que suponen una auténtica delicatessen en la poblada agenda escénica de nuestro país y que hacen que algunas pasen un tanto desapercibidas, quedando la visita del maestro Tony MacAlpine para seguidores incondicionales del género.

Apenas un centenar de personas fuimos testigos de la revisitación en forma íntegra de un álbum como “Edge of insanity” que supone una de las cumbres del metal neoclásico instrumental de mediados de los ochenta a principios de los noventa, y que como el mismo Tony Hernando (guitarrista de Saratoga) nos comentaba antes de empezar el concierto, merece estar en el top ten de este estilo, junto al ‘Surfin with the alien’, de Joe Satriani, ‘Mind's eye’ de Vinnie Moore, ‘Rising force’ de Yngwie Malmsteen, ‘Passion and warfare’ de Steve Vai, ‘Perpetual burn’ de Jason Becker, ‘Dragon’s kiss’ de Marty Friedman e ‘Infra-Blue’ de Joey Tafolla entre otros.

Para abrir el show, tuvimos un pequeño aperitivo con el joven guitarrista brasileño Daniel Piqué, que a sus 22 años se ha ganado sus doce minutos de gloria, que son los que empleó para enseñarnos sus virtudes y manejo de las seis cuerdas. Se valió de una guitarra Gibson, que llevaba incorporada una mini cámara, que nos imaginamos que le serviría para autoevaluarse después de la actuación. Con una camiseta de los Angeles Laker y una sudadera de Brazil, utilizando el sonido pregrabado de bajo y batería, nos ofreció tres temas que demuestran que el chaval apunta maneras y que músicos como Billy Sheehan, Mike Mangini y Virgil Donati ya han podido comprobar en sus colaboraciones discográficas con él. Su trabajo ‘Boo!’ le ha valido para obtener el reconocimiento internacional y eso es lo que nos quiso enseñar.

A continuación, una banda que practican un estilo que ellos denominan Rock Progresivo Sureño, venían a presentar su nuevo EP ‘From the ashes’, con la incorporación de Mike Martin como nuevo guitarrista. Su nombre Agent Cooper, desconocemos saber si tiene algo que ver con el famoso personaje de la serie ‘Twin Peaks’. El quinteto de Atlanta lo completaban el vocalista y guitarra Doug Busbee, el teclista Eric Frampton, el bajista Sean Delson, y el batería Ganesh Giri Jaya.

Durante cuarenta y cinco minutos, nos ofrecieron una vibrante actuación de unos músicos que combinan una técnica exquisita, utilizando un bajo de seis cuerdas y una guitarra de siete, en una actuación plena de fuerza, donde canciones muy potentes se mezclaban con otras más melódicas, logrando mantener la atención de un público que aunque desconocía los temas los acompañaba con el ritmo.

Temas como el inicial y cañero “Good for my soul”, “Tornado dream”, la acústica “The desolate supreme” o “Mother”, fueron una perfecta muestra de lo que esta banda ofrece en directo. Un metal progresivo de la escuela de Dream Theater, con un teclado muy presente, un virtuoso guitarra y el resto de miembros que cumplen muy bien su papel, en temas donde los cambios de ritmo se suceden combinando sonidos hard y heavies, consiguieron dejarnos un gran sabor de boca en una formación que seguro que vuelve a nuestro país con mayores pretensiones.

Y llegó el momento esperado por todos. El veterano guitarrista de Massachusetts se preparaba para ofrecernos en vivo, un álbum como ‘Edge of insanity’ que databa de 1985, y que nos acompañó durante muchas jornadas de nuestra juventud, en una época donde la mayoría de los músicos americanos pasaban de largo de nuestro país, en sus visitas al viejo continente europeo. Once trabajos en estudio y uno en directo jalonan una brillante carrera personal, que ha convivido con múltiples propuestas como la de los progresivos Planet X, o Seven the Hardway, el metal de Ring of fire o las apuestas más jazzísticas como CAB, o en menor medida Devil’s Slingshot, hasta las apariciones junto a Steve Vai en el G3.

Para esta ocasión, Macalpine se hizo acompañar por unos músicos que eran toda una garantía de éxito, desde el batería Aquiles Priester ex Angra, al bajista Bjorn Englen ex Yngwie Malmsteen y Uli Jon Roth y una sorprendente y jovencísima guitarrista israelí de 23 años llamada Nili Brosh, que me hizo comprar su disco en el puesto de merchandising después de ver su portentosa actuación.

El pretesto de esta gira denominada “Dream mechanism tour”, era la puesta de largo del nuevo trabajo de Macalpine, llamado como él ‘Tony Macalpine”, que salió en 2011 después de diez años sin grabar nada desde aquel ‘Chromaticity’, y del que desgranaría algunos temas en la segunda parte de la actuación. En esta primera, arrancó con “Wheel of fortune”, el primer tema de “Edge of insanity” lleno de fuerza y potencia  ejecutando todos los cortes en el mismo orden que en el disco. A un cañero “The stranger” con uno de los mejores fraseados compuestos por este músico, le sucedían un más relajado “Agrionia” y un maravilloso “Empire in the sky” de bellas melodías, con ese tremendo cambio de ritmo que nos dejaba con la boca abierta. La fuerza y la rotundidad llegaban de nuevo de manos de “The witch and priester” y “The taker”, después de un solo de teclados de Tony entre ambos temas. El preludio de Chopin nos mostraba la faceta pianista de Macalpine, que durante esta noche iba a ser testimonial, apareciendo en un pequeño solo y en contadas ocasiones.

La parte final del álbum era la vigorosa y rítmica canción que da título al álbum “Edge o insanity” y una de mis preferidas la fantástica “The raven”, que empieza con esos teclados que enseguida te meten en situación, y donde el maestro del Shred se recrea y recorre el mástil haciéndonos seguir ese ritmo endiablado. “No place in time” puso el broche de oro a una obra maestra del metal instrumental.

Fue realmente extraordinario ver tan de cerca la elegancia y el virtuosismo del músico americano que usó una guitarra de siete cuerdas, pasándose después a una Ibanez de ocho, y que se hizo acompañar por una chica que llevaba otra Ibanez de siete cuerdas, realizando las escalas y los solos a la misma velocidad que Macalpine, aunque en otra tonalidad, doblándole perfectamente y demostrando una soltura impropia de su edad. La base rítmica no le iba a la zaga, con un Aquiles que dominaba los parches y demostraba su tremenda pegada, acompañado por un Bjorn que se lucía con su bajo de cinco cuerdas.

La segunda parte del concierto comenzaba con “Angel of twilight” y “Ölüdeniz” una preciosa isla al sur de Turquía, en un viaje en el tiempo desde su trabajo inicial hasta este más reciente, con veintiséis años por medio. Vino después un bonito repaso a su carrera con “The sage” de su disco ‘Evolution’, ‘Tears of Sahara’ del imprescindible ‘Maximum security’, “The violing song”  de ‘Premonition’ y la actual “Serpens cauda”, dedicada a la ciudad de San Sebastian donde pasa bastante tiempo con su prometida que es de allí.

Después del solo de batería de un entusiasta Aquiles, volvían las vertiginosas digitaciones con “Stream dreams” de “Freedom to fly” y el punto final lo hacía con “Pyrokinesis” del último disco, brindándonos después un incontestable bis con el segundo tema de ‘Maximun security’, un ovacionado “Hundreds of thousands” que nos dejó a todos tremendamente satisfechos después de una emotiva y magistral interpretación de algo más de noventa minutos. Desde aquí nuestro reconocimiento para el gran Tony Macalpine, que es uno de los grandes de la guitarra y no va de artista endiosado, dando protagonismo a todos sus músicos y mostrándose muy cercano con sus seguidores, a los que no nos hizo esperar más que un par de minutos para firmar sus discos, posters y hacerse fotos con todo el que quiso. Una vez más, nos quedó claro que el virtuosismo no tiene porqué estar alejado del entretenimiento.

Texto y fotos: José Luis Martín

Set list:

Wheel of fortune

The stranger

Quarter to midnight

Agrionia

Empire in the sky

The witch and the priester

The taker

Chopin prelude 19 opus

Edge of insanity

The raven

No place in time

Angel of twilight

Ölüdeniz

The sage

Tears of Sahara

The violin song

Serpens cauda

Psychoctopus solo de batería

Stream dream

Pyrokinesis

------------------

Hundreds of thousands

Redacción
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Esta entrada fue escrita por Redacción

1 comentario

  • Pepe Bolo dice:

    "en una época donde la mayoría de los músicos americanos pasaban de largo de nuestro país"
    ¡Ja! ¡y ahora la gente pasa de ellos! ¡Qué curiosa contradicción del destino!

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