Convertirse en una cita señalada en el panorama local no resulta para nada una sencilla tarea. Sobre todo si hablamos de un contexto con tanta oferta cultural como el actual. Por lo tanto, ante un festival que celebra su decimocuarta edición luchando contra las enfermedades neurodegenerativas de la mano de
La mística siempre es importante. Revestir todo de una dignidad que nos eleve por encima del suelo y que nos certifique que lo que vamos a presenciar es un espectáculo verdaderamente único. Es necesario en ocasiones abrir claros espirituales que destierren las toneladas de vulgaridad que nos inundan en múltiples
Sala Santana 27, Bilbao Hace falta tener clase hasta para levantarse de la cama. No vale cualquiera para comprometerse con una decisión tomada, abandonar el sofá, desentumecer los huesos y lograr que el personal vibre como en la época gloriosa de la banda. Revivir los dorados ochenta sin que aquello