
La mística siempre es importante. Revestir todo de una dignidad que nos eleve por encima del suelo y que nos certifique que lo que vamos a presenciar es un espectáculo verdaderamente único. Es necesario en ocasiones abrir claros espirituales que destierren las toneladas de vulgaridad que nos inundan en múltiples
Kafe Antzokia, Bilbao Ya decía el inolvidable Holden Caulfield en ‘El guardián entre el centeno’ que hay cosas que no deberían cambiar nunca, “cosas que uno debería poder meter en una de esas vitrinas de cristal y dejarlas allí tranquilas.” Se podrían citar miles de ejemplos, aunque algunos de ellos