
Fue uno de los baterías más grandes que han existido en la historia del rock duro, y de hecho su currículum es realmente inabarcable. La práctica totalidad de todos los grandes de nuestra música en algún momento contaron con la participación de este formidable músico, que desde su kit de

Allá por el lejano 2000, Brian May colaboró en el álbum en solitario de Tony Iommi 'Iommi'. Participó en dos temas: "Goodbye Lament", al cual Dave Grohl prestó su voz, y "Flame On", con Ian Astbury de The Cult. Pero hay más: si nos remontamos a 1989, el 'Headless Cross' de Black