STEEL HORSE: EL CABALLO VUELVE A VALLECAS
20 julio, 2010 4:10 pm Deja tus comentariosMadrid, sala Excalibur
La cita era esperada, y no por lo trascendental que pudiera ser, o porque conllevase un motivo en particular. Era la oportunidad de presenciar el directo de una joven banda de heavy metal que en el último año ha visto crecer su popularidad de una forma envidiable a raíz de su debut discográfico con el álbum "Wild power", el Heavy Metal en esencia, como el de los padres del género, en pleno siglo XXI. Y como marco la discoteca vallekana Excalibur, centro neurálgico de las noches de heavy en Madrid hasta los primeros rayos de sol del día. Como poco, tentador desafiar al calor con un concierto semejante.
Abría el show Wildam, combo también de heavy metal que pudo disfrutar de una entrada bastante más que aceptable, contando con el aforo medio que asiste a las primeras horas de los conciertos en Excalibur, que sigue siendo uno de los puntos pendientes en la organización de estas fechas. La banda dispuso la presentación en directo de las canciones de su último trabajo y primero hasta el momento de título "Keep on metal". Heavy con toques visuales glam a cargo de su voz y bajo Guillermo, que consiguieron recoger la atención de los asistentes así como atraerles a las primeras posiciones y arrancar su participación en el show. Un grupo del cual apenas teníamos referencias y de cual nos quedamos con el nombre, Wildam.
Ahora sí, tras el concierto de Wildam y los pertinentes minutos entre banda y banda, arrancaba el show de Steel Horse con un interesante y crecido número de asistentes. Las primeras sensaciones que transmiten son precisamente aquellas que están llevando su nombre prácticamente alrededor de todo el planeta, que les ha llevado a editar su disco en Japón y Estados Unidos y ser incluidos en varios festivales de renombre como Leyendas del Rock, Headbangets Open Air (Alemania) o Heavy Metal Maniacs (Holanda), y es ese especial gusto por el heavy metal sin concesiones y con respeto a los orígenes, tanto en lo musical como en la apuesta visual.
Y como fuerte formación, desde las primeras canciones queda constancia de la presencia de su frontman, Jorge Cortés, que aparte de contar con una voz digna de cualquier rock star también cuenta con la imagen del cantante sin complejos, convencido de su situación, de cuánto quiere transmitir y de que no hace falta lucir una larga y alisada melena para dar la imagen de una auténtica voz del metal. Quizá por estos detalles sea difícil no recordar, en situaciones, al Rob Halford de principios de los ochenta.
Dentro de las cuerdas del grupo, con Willy Gascón a la guitarra y Ángel Muñoz al bajo, la energía desborda el escenario. Son músicos de aquellos a los que con sólo ver sus rostros, uno sabe que están disfrutando con lo que hacen, que son conscientes de la energía de su sonido y que gustan al público asistente. Toda esa fuerza, toda esa energía son el perfecto conductor de Cortés, una voz envuelta en lo eléctrico del sonido conformado y que se apoyan en el trabajo de Rubén Salvador en su batería.
Todo esto arma el espectáculo de Steel Horse del que disfrutó un elevado número de asistentes a la sala. La banda cuenta con una cada vez más amplia parroquia de seguidores que les siguen allí donde van, aunque queda claro en jornadas como esta que el número de nuevos fans sigue creciendo concierto a concierto. El público, agradecido al trabajo sobre las tablas de Steel Horse, respondió e interactuó con la banda canción a canción y en raras ocasiones pudo haber algún asistente que perdiera detalle, salvando necesidades humanas.
Cumplen con todas la expectativas acerca de su nivel; en su disco ya lo habían demostrado y en directo han convencido al que escribe. A día de hoy, ver un concierto de Steel Horse en una sala, tiene toda la pinta de ser algo por lo que algún día uno podrá "tirarse el rollo" contándolo en reuniones sociales.
Texto y fotos: XANTI FAKIR