MANOWAR: CON LOS OÍDOS SANGRANDO

12 abril, 2011 6:17 pm Publicado por  4 Comentarios

Sala La Riviera, Madrid

Mientras estoy escribiendo estas líneas, dos días después del concierto de los neoyorquinos, mis oídos siguen pitando y mis entrañas siguen en estado de líquido viscoso, por obra y cortesía de la máxima que sigue imperando en sus conciertos: LOUDER THAN HELL! Los que estuvieron en primera fila y al lado de la PA, sabrán muy bien a que me refiero. Pero tomemos las cosas desde el principio.

Desde el año pasado que los de Auburn, nos dejaron un buen sabor de boca con su actuación en la misma sala, donde mostraron ser los de siempre y no aquella banda que se perdía en interminables discursos y actuaciones que dejaban mucho que desear, las ansias para volver a verlos eran muy grandes y nuestra fe a esos guerreros del metal se había restablecido. Esta vez, además la ocasión venía cargada de sentimientos ya que no solamente nos iban a presentar en su integridad su histórico debut ‘Battle Hymns’ de1982 (del cual acaban de editar una versión regrabada donde las voces de narrador corren a cargo del legendario Sir Chistopher Lee, quien reemplaza a otro mito de cine, Orson Wells, que hacía dicha labor en el original) sino además todos tenemos muy fresca todavía la pérdida prematura de Scott Columbus (4 de abril). Era una ocasión que merecía ser atendida, por parte del público, y ejecutada, Por parte de la banda, por todo lo alto y ambas partes cumplieron con su cometido. Aunque la sala no registró un aforo completo (hubo más de 2.500 personas), su procedencia era variopinta: desde Portugal (en un momento dado le tiraron a Eric una bandera del país y él se limpió su sudor con ella) y Polonia, hasta Sudamérica, Italia y Grecia.

Obviamente la aplastante mayoría del público tenía las pintas que se esperan ver en un concierto de estas características, pero personalmente me llamó la atención una chica, justo detrás de mi, con unas pintas a lo Amelie (la heroína de la homónima película francesa) quien afrontaba la demora del inicio (el bolo arrancó con una hora de retraso) leyendo el libro “Miedo y Asco en Las Vegas” de T.S. Thompson. ¿Quién ha dicho que ser metalero y “cultureta” son dos cosas exluyentes? Por otra parte, tal como mencioné antes, la acumulación de PA (parecía que habían rellenado todo el hueco posible sobre el escenario con ellos), ya daba muestras sobre lo que nos venía encima. Cuando el backliner de las baterías (oculto detrás de la tela que cubría el kit) dio solo un pego al bombo, sin que nosotros lo esperáramos, creí que había estallado una bomba y aquella fue solamente la primera onda expansiva de todas las demás que acabarían haciendo mella en nuestros cuerpos (el tema “Shell Shock” de su debut viene ni que pintado a este caso). El concierto arrancó por fin, con el público dando la bienvenida a la banda, haciendo el saludo “Manowar” (ya sabéis, alzando los brazos y sujetando la muñeca derecha con la mano izquierda) y ellos descargando su temazo “Manowar” y durante los siguientes 35 minutos desgranaron, aunque en orden diferente que el de disco, su debut, sin apenas un tomarse un respiro.

Hay que destacar la increíble fuerza vocal y aguante de Eric Adams y aunque usó varios efectos de voz (más que nada el reverb) o la voz  de ultratumba en temas como “House of Death”, se ve que mantiene la caja torácica y su garganta en una forma envidiable (imborrable de la memoria su poderío vocal en… “The Power”). Tampoco faltó el momento típico Manowar, cuando mientras sonaba “Sighn of the Hammer”, Eric, bajó hasta un roadie que estaba en el foso, y le señaló a una chica. Enseguida él y otro segurata sacaron a la chica de la primera fila y la metieron en el foso y allí permaneció hasta el final del concierto, aunque ignoró si después pudo entrar en el backstage. Eric, te saludamos. Joey DiMaio por su parte, guardó sus discursos al nivel justo y necesario (aparte de intentar dirigirse al público en un castellano “macarrónico” pero efectivo) donde no podía faltar la mención especial a Scott, quien Joey alabó como un buen amigo, músico y padre, y dijo que aunque les cuesta estar actuando y de fiesta como si no hubiese pasado nada, Joey está seguro que Scott les animaría seguir haciéndolo ya que él tampoco podía decir no a una buena juerga. También alabó a la empresa española que suministró los PA y no podría ser de menos: la fuerza atronadora del sonido hizo que en un momento dado se desprendiera el trozo de un foco del tejado y que cayera encima de un chico justo a mi lado; además podría jurar que se caían trozos de pintura del techo y esto hizo que tanto yo como el pobre chico a mi lado, que mirásemos de vez en cuando al techo en plan “espero que esto aguante hasta el final del concierto”. Tampoco pudo faltar el solo de bajo; aunque en el set list aparece “William’s Tale”, no conseguí reconocerlo. Ahora eso sí, metió algunas notas de rumba catalana y, como no, hizo el numerito de quitar una por una las cuerdas del bajo y regalarlas a chicas del público, dándolas él mismo; a una de ellas le dijo en el idioma universal de los signos (traducción literaria): “tú y yo después… ¡FOLLAMOS!” (también ignoro si dicha promesa llegó a materializarse posteriormente).

Después de su breve discurso, lata de cerveza en mano, Joey dedicó el tema “Gates of Valhalla” a Scott diciendo que era uno de sus favoritos. Con respecto a Karl Logan y Donnie Hamzic, se puede decir que cumplieron con su comedido (Karl también se lució con un solo en “Sun of Death”) pero se mantuvieron en un discreto segundo plano (de hecho Hamzic ni siquiera fue presentado al público). El repertorio estaba plagado de temas clásicos de la banda que hicieron que el público enloqueciera: hasta incluso un normalmente tranquilo servidor se desmelenó (pero sin su recién cortada melena) tanto mientras sonaba “Hail and Kill” que de repente sentí un toque a mi espalda, di la vuelta y vi un segurata haciéndome un gesto de “tranquilízate, muchacho”. Obviamente cada uno echa en falta algún que otro tema favorito (“Blood of the Kings” es mi favorito personal) pero nuestro ardor para metal fue saciado a base de sangre, sudor y lagrimas (de felicidad) y de temas que forman parte de la historia metalera. Lo que vimos, oímos y sentimos aquella noche nos hizo reforzar (más aún) nuestro juramento de fidelidad con el heavy metal y afianzó la confianza que tenemos hacia esta banda que parece estar viviendo una segunda juventud.

Aunque para ser justos, hay que decir que los caprichitos del señor DiMaio, quien es el que mueve los hilos de la banda, también hicieron acto de presencia en forma de sacar una fatwa, a media hora antes del concierto donde se prohibía que los fotógrafos sacaran fotos. Imaginaos a gente profesional que vino de varios rincones de la península (ya que esa fue su única fecha española) para que hicieran su trabajo y de repente veían su gozo en un pozo, por no hablar de la agresiva política de prohibir que el público sacara fotos bajo ningún concepto (se llenó el guardarropas con cámaras digitales. De verdad es algo incomprensible se mire por donde se mire. De todos modos, esa fue la única nota negativa de toda la noche y me gustaría cerrar esta crónica con el favor que nos pidió Joey durante su discurso: nos pidió que al final nos marchásemos de manera lenta hacia la salida para que el espíritu de Scott nos impregnara a todos en una noche tan especial y como manera de respecto hacia él. La gran mayoría del público lo hizo, mientras sonaba la grabación del majestuoso “The Crown and the Ring”. Lo dicho, fue una noche emocionante, irrepetible… y ruidosa a más no poder. Una experiencia IMPRESCINDIBLE  de dos horas y media para cualquier persona que se jacta de escuchar y apoyar el heavy metal. ALL HAIL THE KINGS!

SET LIST: “Manowar”, Death Tone”, Metal Daze”, Fast Taker”, Shell Shock”, Dark Avenger”, Battle Hymn”, Sun of Death”, Brothers of Metal”, “Blood of my Enemies”, “Sign of the Hammer”, “Fighting the World”, “Gates of Valhalla”, “Hail and Kill”, “Call to Arms”, “House of Death”, “Hand of Doom”, “Thunder in the Sky”, “The Power”, “Kings of Metal”, “Warriors of the World”, “Black Wind” y “Fire and Steel”

Texto: Yorgos Goumas

Fotos: Ninguna (por “cortesía” de Joey DiMaio)

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Esta entrada fue escrita por Redacción

4 comentarios

  • Antoniopowerslave dice:

    Joder después se queja la gente de que son cortos los conciertos de Manowar...

  • CHUSO_METAL dice:

    Tocaron Thunder in the sky?

  • Raul dice:

    No se en qué concierto estubiste pero Thunder in the sky, Kings of Metal y Call to Arms no las tocaron. Y os falta por poner Heart of Steel, Metal Warriors, The Gods made Heavy Metal y Kill Whith power.
    Por favor un poquito mas de seriedad en las noticias y crónicas y dejad de inventaros los setlist.

  • Patrick dice:

    Fue un gran concierto, irrepetible en todos los sentidos y con un gran setlist. Manowar lo hicieron genial, a parte super simpáticos y Adams en una forma envidiable, cantando mejor que nunca.

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