LA PULQUERÍA, MADRID

27-10-2010 (Sala Heineken)

Los valencianos de La Pulquería, llegaban a la madrileña sala Heineken para presentarnos su nuevo disco de estudio “Fast Cuisine, menú de tres platos”, en una gira que les está llevando a recorrer todo el Estado y que en Noviembre les hará cruzar el charco hasta Méjico, para realizar una mini gira en el país azteca.

Alrededor de las 21:30, la sala se encontraba con gran afluencia de público, a pesar de ser un miércoles, había muchos seguidores ansiosos por ver al grupo en acción. Comenzaba a escucharse la introducción habitual del grupo con unos tintes circenses y festivos para presentar a la banda ante el respetable. La primera canción en caer fue “Always” ,de su anterior trabajo “C’mon fandango” muy bien acogida por un público entregadísimo desde los primeros compases del concierto. A ésta le siguió “Machetazos en el corazón”, también de su segundo trabajo. El tercer tema elegido para el concierto fue “Dónde están”, de su nuevo disco, del cual se puede destacar un toque mas rockero que los anteriores, con unas guitarras mas cañeras, que predominan por encima de la sección de vientos.

La actuación siguió con uno de sus temas clásicos como es “Morirse de pena”, perteneciente a su primer disco “Corridos de amor” y a ésta le siguieron “Por fin” y “El gran chingón”, ésta última con un toque ramonero a lo “Blitzkrieg Bop”. La noche continuó con el tema de su primer disco “El día de los muertos” que les dio a conocer en el panorama del rock nacional y posteriormente cayeron “Zíngara” y “Cabeza hueca”.

El momento cumbre de la noche, tuvo lugar durante la canción “Pancho tequila”, en la cual, la banda y el público lo pasaron grande bebiéndose una botella de tequila entre los componentes del grupo y parte del respetable acomodado en las primeras filas. La cosa no acabó ahí y el cantante sacó una muñeca hinchable y se lanzó al público con la muñeca y la botella de tequila para dar de beber al técnico de sonido, siendo manteado por el público de una punta a otra de la sala. Tras éste momento de desfase el concierto prosiguió con “Plata o plomo” de su primer disco, canción en la que la banda pidió la ayuda del público para cantarla. Tras dicha canción llegaron canciones algo más lentas que el resto como “Mientras”, “No hay amor” y “Calaveras y diablitos”, ésta última algo más animada que las dos anteriores.

Antes de dejar el escenario, nos dejaron canciones como “Cualquier día”, “La huesuda” o “Gitano”, siendo la última muy aclamada por un público que a pesar de estar llegando al final del concierto no paro de bailar y cantar dicha canción. La banda, tras dejar el escenario, volvió para los bises; que fueron “En cada rincón” y “La migra”, ambas pertenecientes a su primer trabajo.

En definitiva, un gran concierto, en el que el único pero posible de la actuación fue la voz que por momentos se oyó muy baja. A pesar de ello, la noche no quedo empañada, puesto que, la banda supero esos problemas técnicos con una gran actuación que el público agradeció y disfrutó.

Texto: Javier Hernández
Fotos: Arturo de Lucas