ESTIRPE: EL TIEMPO, UN PLACER PARA DETENER

Gran Teatro de Córdoba

Sirva el tópico de una frase como "Una noche para el recuerdo" para comenzar esta crónica del enorme directo que nos regalaron los cordobeses Estirpe a todos los que llenábamos el Gran Teatro de la ciudad de la Mezquita el pasado 25 de Febrero. 17 años resumidos en un concierto, 17 años haciendo una música diferente y plena de calidad e imaginación. Quizás este sea parte del secreto de estos músicos que a diferencia con otras bandas de Rock no imitan ningún estilo ya antes inventado, evolucionando constantemente, innovadores en muchos aspectos. El concierto prometía desde semanas antes, carteles repartidos por la ciudad se encargaban de recordarnos a diario un momento histórico para Estirpe  y para todos sus fans, cita en un marco incomparable como el Gran Teatro donde, si no recuerdo mal hasta 7 cámaras se encargarían de grabar y registrar en imágenes el primer DVD en directo de la banda. Verá la luz este próximo verano como "El Tiempo, un placer para detener", y dispuestos a parar el tiempo se mostraron en una noche para mostrarnos su madurez musical, experimentada desde sus inicios con "Idolos de Papel" hasta la actualidad con "Buenos días Voluntad". Durante todos estos años en este mundo sin fe, han sabido esperar para con un esfuerzo día a día, seguir en pie y hacernos creer en su revolución, tratando de entender la eternidad sin miedo a equivocarse, sin temer al vértigo y dejarnos escapar para llevarnos desde su Córdoba natal hasta Ruanda pasando por América y París, recorriendo la Madre Tierra que ante la mirada de nuestro sol, nos regala agonizante hasta su último pétalo.

Mucho rockero de la ciudad a las puertas del Teatro y bastantes fans llegados desde lejos: Galicia, Barcelona, Almería... Una vez todos acomodados en sus localidades se apagan las luces y nos sorprende la aparición por la puerta de entrada de Manu, Javier, José Miguel  y Loren, el cuarteto que actualmente forman Estirpe recorriendo el patio de butacas hacia el escenario, saludando a un público que les rendirá la primera ovación. Tomaban posiciones en un escenario que les sería familiar, ya que en Enero de 2007 ofrecieron otro concierto allí mismo durante la gira correspondiente al disco en Acustico "El Sentido de la Calma", en un magnifico despliegue visual y musical.

Manu A. Mart haría sonar su flauta de madera para comenzar a inventarse el mundo con "Llévame" y "Vértigo", que nos meterían en ambiente puramente musical. Sin apenas dejarnos reaccionar cayeron  "Te Seguiré" y "Otro Mundo" de su sexto álbum "Buenos días  voluntad”. Continuaron con "América", "Llámalo Perdón", "Me Equivoqué", "Saber Esperar" ...  Hasta un total de 22 canciones extraídas de toda una vida musical que ha hecho de Estirpe una de las bandas que por méritos propios merecen ser reconocidas dentro de nuestro Rock. El público así se lo reconocería, rindiéndose a la evidencia de una puesta en escena inmejorable donde destaca la personalidad de Manu A. Mart, que nunca deja indiferente a nadie; pero es perfecta la conjunción de piezas de este grupo de amigos que completan Loren Gómez como guitarra, Javier Estévez a la batería y José Miguel Panadero al bajo. En esta ocasión estuvieron acompañados por otra pieza importante del puzzle y que hace apenas un par de años dejaba la banda, el teclista Daniel Puig.

Un set list de más de dos horas y media donde además de los temas más utilizados en sus últimos directos aparecerían otros de sus primeras grabaciones que apenas han sido interpretados por la banda. En algunos de ellos contarían con la presencia de una sección de vientos formada por tres músicos locales invitados para la ocasión: Cristóbal al saxo, Rafa al trombón y Arturo a la trompeta que aportaron un toque especial al espectáculo, además otro viejo amigo de Estirpe también tendría protagonismo al aparecer en escena aportando su maestría en varios temas; Luis Rubén Gallardo de nuevo nos regalaba el sonido de su violín como ya lo hizo anteriormente en diferentes conciertos y grabaciones de los cordobeses.

Destacar el ambiente y la comunión entre músicos y público, favorecidos por las tablas de un Manu Mart como maestro de ceremonias que demostraría un nivel vocal impresionante culminado con un final de fiesta donde nos dejaron su particular versión del clásico "O’ Sole Mío,  tema que aparecía en segundo álbum "Víctimas del mismo Sol".

Tras la emocionante noche vivida la banda tiene como próximo proyecto regresar a México para actuar en uno de los festivales más importantes de aquel país, el Vive Latino 2012, prosiguiendo con la promoción del disco recopilatorio "Hazme Creer", editado hace pocos meses en tierras aztecas y que tan buena acogida ha tenido. Posteriormente regresarán a nuestro país donde ya hay algún que otro concierto concretado y por supuesto ultimarán los detalles de lo que será la edición del DVD y CD en directo y la salida a final de año de un nuevo disco de estudio. Está claro que el tiempo de nuevo continúa inexorablemente su marcha para los Estirpe.

Texto y foto: Antonio Vázquez

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