CRONÓMETROBUDÚ + GN3: “La mecha sigue encendida”

Sala Taboo, Madrid

La banda burgalesa que se despedía de la capital tras tres descargas que en tres meses seguidos han querido afianzar la presencia de su nombre entre las más relevantes realidades del metal en castellano. En cada uno de sus conciertos han sido apoyados por diferentes bandas madrileñas como Muaka o 20 Segundos, y en este caso tuvimos oportunidad de disfrutar de los inclasificables GN3.

Seguramente la cercanía entre las dos fechas finales provocó que no fueran muchos los que se animaran a acompañarnos en esta última, algo que la banda también acusaría en su actuación, aunque volvieran a darlo todo como acostumbran.

El horario marcado por la sala provocó que el repertorio preparado para la ocasión por Cronómetrobudú sufriera algún cambio, pero no faltaron los grandes temas que han dado forma a su tercer trabajo como son “Quid Pro Quo”, “Pequeña Lua” o “Vida de Pez”, del que pronto tendremos también un nuevo videoclip.

Siempre tienen sorpresas preparadas y en esta ocasión, aprovechando el regreso de la banda de su padrino Carlos Escobedo a primera línea de fuego, nos regalaron como homenaje una especial versión de “Mis Cenizas”, a la que dieron su personal toque de flauta y violín, continuando con la sensación de endurecimiento de su sonido que ha marcado las tres actuaciones, hubiera mejor o peor suerte con el sonido del recinto, destacando la segunda actuación, en la sala Caracol, donde todo estuvo de cara.

Las bromas de su vocalista, haciendo referencia a los conciertos de Radio3 por la pasividad del público en los primeros compases, y su entrega, compensaban el que su voz no estuviera en el mejor estado de forma que le hayamos visto, jugando con diferentes registros como si de un ensayo se tratara, algo comprensible en esta ocasión.

Con los destacados “A Dios Rogando” y “Vuelve a Respirar” sabemos que el final se acerca, mientras seguimos disfrutando del singular sonido que crea la banda especialmente ahora que sus guitarras son un verdadero muro sonoro alzado sobre los poderosos cimientos que forman bajo y batería, con el especial atractivo que siguen siendo para quienes se van acercando al grupo los eléctricos dibujos creados por flauta y violín, que siguen haciendo de esta una de las bandas más originales, y de mayor calidad que nos podemos encontrar en la carretera.

Tras ellos saltaban al escenario los madrileños GN3, banda que lleva ya muchos años ofreciendo una singular propuesta de funkrock aderezado por unos textos cargados de sentido del humor entre los que destacan “Romanos” en la que recrean la famosa escena de ‘La Vida de Brian’ en versión rock, y “Ornitorrinco”, clásicos ya para quienes conocen a la banda, que además de hacerte mover los pies, te dibujan una sonrisa en la cara obligatoriamente. Junto a la base que oficialmente forma el grupo encontramos a Amir John Ardid a la guitarra, todo un virtuoso que aportó su particular visión musical con su laúd eléctrico en la grabación del último trabajo de Cronómetrobudú.

El grupo disfrutó de un poco más de color en el foro y nos divirtió hasta entrada la madrugada.

No faltará ocasión en lo que queda de año para volver a ver a los de Burgos, pero ahora habrá que seguirlos en su gira por el estado, ya que las oportunidades para verlos en la capital por ahora se han agotado, una lástima para el que se los haya perdido y una gozada para los que hemos podido disfrutar de su poder-rock, que sigue enriqueciéndose paso a paso.

La próxima gran cita será en su tierra, donde estarán abriendo para Sôber en su regreso a los escenarios, otra que no nos perderemos y en la que esperamos verte, pues no puede tener mejor pinta.

Texto y fotos: JORGE BOBADILLA