IAN GILLAN:EL CANTANTE DE DEEP PURPLE EN SOLITARIO

Con 'One Eye To Morocco' el vocalista de Deep Purple retoma su carrera en solitario relevando a 'Gillan's Inn', su disco de 2006. Aquel fue un álbum lleno de colaboradores y exhibiciones instrumentales, en este los solos y los invitados de raigambre brillan por su ausencia; también los tonos más agudos de Gillan, que presenta un elenco variado de canciones con el blues, el soul y por supuesto el rock -relajado pero rock al fin y al cabo- como principales reclamos. JUAN DESTROYER intercambia impresiones con el londinense, que se encuentra "realizando tareas domésticas en mi pequeña casa de un pueblo del Algarve portugués".

Por el título del discopensé que encontraría canciones de inspiración arábiga. Claro que eso fue antes de leer la historia acerca de tu viaje a Cracovia...

"Sí, como ves tiene poco que ver, es una expresión polaca que, dicha completa, "un ojo en

Haber traído a Steve Morse, Joe Satriani o Janick Gers al estudio habría sido una pesadilla

Marruecos y otro en el Cáucaso" viene a decir "ponerse bizco", que es lo que nos ocurrió a mí y al guía que estaba contando la historia de Oscar Schindler cuando nos fijamos en una chica de buen ver del grupo. Mi amigo polaco nos pilló y bromeó con eso. Del mismo modo yo tengo un ojo en Purple y otro en mi carrera en solitario".

Hiciste el disco mientras tus compañeros estaban forzosamente parados tras el fallecimiento de la madre de Roger Glover. Dinero no te hace falta, ¿será que simplemente eres incapaz de ponerle freno a tu creatividad y estar tranquilo en casa descansando?

"Bueno, en realidad las canciones no fueron escritas todas de una tirada, las vengo acumulando desde hace tres, cuatro e incluso cinco años. Las compuse con Steve Morris (el guitarrista) contribuyendo también de vez en cuando otras personas, y al final junté treinta y ocho canciones, con lo que lo más difícil fue escoger el material con el que trabajaríamos, el fijar una dirección musical con el productor (Nick Blagona). A partir de ahí ensayar y grabar fueron tareas suaves".

Hablando de "Steves", ¿no crees que Morse podría haber hecho unos buenos arreglos en este disco?

"Él es rockero de los pies a la cabeza, le gustan las canciones con pegada y le encanta hacer un montón de solos de guitarra. Tomé la decisión al principio del proceso de que no quería contar con una sección rítmica rockera ni tampoco con un solo punteo improvisado, todo estaría compuesto desde antes y teniendo como premisa realzar la canción en sí misma. Eso sí, su labor fue importante como observador objetivo del proceso desde la distancia. Estoy muy contento con la banda que he conseguido juntar, son fantásticos sesioneros y músicos de club de Búfalo, Nueva York, y quisimos preservar ese núcleo".

Sin duda es un álbum diverso, ¿te gusta escuchar tanta variedad en los discos de otros artistas?

"No veo esa diversidad, sé a lo que te refieres, pero todo lo que está incluido en 'One Eye To Morocco' me es familiar. Las maquetas previas tenían más componente rockero, pero al prescindir de todos los elementos de heavy-rock me he dado cuenta de que las canciones están muy enraizadas con la música que me influenció cuando era un niño. Si estas canciones las hubiera ejecutado Deep Purple esa apreciación no sería tan perceptible".

Ahora entiendo el porqué de la carencia de solos de guitarra, supongo que por lo mismo moderas el uso de agudos con tu voz.

"Decidí tiempo atrás que, exceptuando Deep Purple, no gritaría más cuando cantara. Tengo sesenta y cinco años, queda fuera de lugar aunque pueda hacerlo y de hecho aún lo haga con Deep Purple, pero quería experimentar con algo un poco más melódico. El problema con ellos, no el problema, sino más bien el hecho, es que todas las canciones, por regla general, empiezan en tonos altos. A partir de ahí la melodía ha de ir necesariamente hacia abajo, adquiriendo tintes de blues y quedando condicionada de alguna manera, lo que funciona para Purple, pero para estas canciones busqué líneas melódicas que estuvieran más en el medio y me dejaran progresar libremente. Vuelvo al título del disco: El Cáucaso es Deep Purple y Marruecos soy yo buscando un punto más exótico, este disco tiene un aire más seductor".

Me gusta el término aplicado al disco.

"¡Y a mis chicas! Este trabajo lo escuchan más mis amigos y mi familia que cualquiera de Deep Purple, porque pueden bailarlo".

¿Entenderán tus fans más jóvenes el álbum o será sólo digerible por los seguidores más maduros?

"No lo sé, me temo que nunca pienso en los fans cuando estoy elaborando un disco, si lo hubiésemos hecho alguna vez, habríamos desaparecido del negocio hace mucho tiempo. Ya desde nuestros comienzos rehusamos ser una banda que siguiera las modas, tanto Purple como Zeppelin y Sabbath -por cierto que la supuesta rivalidad entre nosotros fue un invento de la prensa, éramos buenos amigos-, pero al mismo tiempo, no habría tenido sentido que hubiéramos estado haciendo siempre lo que se entiende por rock clásico. La música ha de expandirse, si no dejas que lo haga, acabarás estando en entredicho artísticamente hablando. Si a los fans no les gusta este disco, sin problema, sé que a mis amigos y a mi familia les encanta. También depende de dónde vengas, si eres heavy, desde luego odiarás y despreciarás, lo mismo si eres seguidor del rock clásico. No vestimos de la manera adecuada y encima yo no chillo, si ésa es la manera en que ha de juzgarse un disco, por mí, OK".

Si en algún momento físicamente soy incapaz de seguir haciendo esto, abandonaré, no estaré dejándome la garganta a los setenta si no puedo ofrecer un show digno

Al final lo único importante es si se trata de buena música...

"Lo que importa es la expresión artística y la diversión y la involucración del oyente, si opinas que la música ha de ser separada por estilos, lo siento, soy la persona equivocada, yo y los demás miembros de Deep Purple, es muy aburrido hacer lo mismo día tras día".

Supongo que con "Always the traveller" querías plasmar tu gusto personal por viajar como turista más allá de las giras.

"¡Por supuesto! El tema se centra en toda la gente con la que tratas durante unos días y a la que luego tienes que decirle adiós, me ha ocurrido con amigos que he ido dejando en multitud de países a lo largo de estos cuarenta años, y lo bueno es que esas relaciones se mantienen a pesar del paso del tiempo. Una sensación parecida te embarga cuando sales de gira y has de despedirte de tu familia. Por cierto que estoy muy orgulloso de todas las letras de este disco".

¿Por qué no has contado con invitados esta vez?

"Porque en 'Gillan's Inn' ya tuve a todos mis amigos tocando, fue como una celebración, realizando versiones, algunas que ya hacía con Purple. Esto es completamente diferente, y como he dicho, no había sitio en el estudio para improvisaciones de guitarra, fue una regla estricta desde el principio, escapaban completamente al concepto del disco. Haber traído a Steve Morse, Joe Satriani o Janick Gers al estudio esta vez habría sido una pesadilla".

La forma en que haces crecer una canción puede determinar el resultado final, ¿cómo decides si es mejor para Purple o para Ian Gillan?

"Es que en Deep Purple las cosas no funcionan así, nunca compuse un tema para ellos, todos surgen de la nada en el estudio, con una hoja en blanco, sin ni siquiera un título, un ritmo, ni nada. Creamos mediante sesiones improvisadas, después de tres o cuatro días empiezas a tener claro qué músicas podrían funcionar, y exige mucho esfuerzo, porque pasada una semana te encuentras trabajando desde las cinco de la mañana en cinco canciones diferentes para poder probar todas las ideas que se te ocurran. Es un reto, esto sin embargo es mucho más relajado: "Tío, ¿quieres venirte un par de días?", nos ponemos a componer por diversión. Cada vez que viene Steve Morris me junto con cinco canciones nuevas a archivar, me olvido de ellas y las recupero cuando las necesito. Me han sobrado unas cinco, sigo buscándoles "casa" (risas).

¿Vas a girar para presentar este disco?

"No, estoy pensando... te va a encantar: drag-heavy metal (risas). Estoy pensando en hacer una fusión de música y danza en teatros para el año que viene, con una coreografía lunática que acompañe las canciones, igual cuento con sufíes dando vueltas, flamenco, jazz, pantallas y en definitiva un montaje muy teatral. Me encantaría hacerlo, pero dependerá del tiempo del que disponga y de si alguien quiere apoyar la idea".

Supongo el tiempo del que dispongas dependerá de la actividad de Deep Purple, ¿qué planes tenéis?

"No tengo la agenda delante, pero sé que nos reunimos el próximo miércoles (mediados de febrero) en la República Checa para afianzar nuestros planes. El primer lugar al que iremos será Sudamérica, concretamente a Brasil, Argentina y Chile, y luego vendrá Japón. He escuchado muchas cosas de cara a este verano en Europa, lo cual me agrada, pero no hay nada concreto" (está confirmado que la banda actuará en España en septiembre: 14 en el Sant Jordi Club de Barcelona y el 15 en sala por determinar de Madrid).

¿Aún sales a cantar descalzo?

"La mayoría de las veces, pero estoy pensando en dejar de hacerlo porque por fin he encontrado unos zapatos cómodos. Hace mucho tiempo me rompí un pie jugando al fútbol y por desgracia la recuperación nunca fue total, se me quedó un bulto con el que llevar zapatos empezó a resultarme una lata, pero cuando encuentro el calzado adecuado le doy uso".

He visto que tu web se llama "Caramba!", en castellano, ¿por qué?

"Porque expresa sorpresa y me gusta cómo suena, me hace gracia. Usé esa palabra anoche, vuestra selección hizo un gran partido (España 2 - Inglaterra 0), juega de manera muy inteligente. Es un equipo muy bueno, bien equilibrado en todas las facetas del juego".

¿Te gustan los españoles que juegan en la Premiere?

"¡Por supuesto! Xabi Alonso y sobre todo Torres, que es un jugador fantástico además de un gran atleta, tiene mucha elegancia corriendo, es increíblemente rápido y también poderoso".

¿De qué equipo eres?

"Del mismo desde que era un niño: Queens Park Rangers" (pequeño club de Shepherd's Bush, en Londres; al contrario que en España, donde por ejemplo un onubense es, por regla general pero incongruentemente, primero del Madrid y luego del Recre, en Reino Unido hay tradición de apoyar a los equipos de barrio). No apoyo a ningún equipo grande porque el mundo del fútbol profesional hoy en día es lo más parecido a Las Vegas, sólo importa el dinero. Sé que vivimos en una Europa sin fronteras, pero ¡por el amor de dios, en el Arsenal no juega ni un solo jugador londinense, ni siquiera inglés! Son todos de otros países europeos o sudamericanos. El problema no es ése, sino que los equipos grandes han perdido el apoyo de los que seguimos el fútbol desde su base. Antes sabías que al menos algunos jugadores de los que veías jugar en el barrio, acabarían siendo profesionales, y ellos mismos tenían arraigo por los equipos de su colegio primero, y por los que les dieron la gran oportunidad después. Ahora vienen y van y no están comprometidos para nada con lo que significa el equipo, su lealtad a unos colores es nula".

Aquí pasó lo mismo hace unos años, pero ahora los grandes clubes vuelven a apostar por el talento de casa, y fíjate, ¡hasta ha repercutido en la calidad de nuestra selección!

"Es que el compromiso es un elemento esencial en un equipo, sobre todo en una selección. Os deseo suerte y a ver si ganáis el próximo Mundial".

No lo creo...

"Sí hombre, ya verás como seréis vosotros o Brasil".

¿Si hubieras cuajado una exitosa carrera en solitario crees que hubieras abandonado Deep Purple para siempre?

"No, me encanta Deep Purple aunque hayamos discutido en el pasado, es algo así como mi hogar espiritual. Realizar un tour de grandes dimensiones como los que hago con ellos es realmente emocionante, me levanto todos los días con un cosquilleo en el estómago y nunca sé lo que va a pasar sobre el escenario esa noche, aun cuando toquemos las mismas canciones con respecto al show anterior. Un concierto puede durar una hora y cincuenta minutos y el siguiente alcanzar las dos horas y veinte minutos. ¿Qué hay de esa media hora extra? Se debe a la improvisación, que nunca sabes qué derroteros va a tomar, y eso es lo que hace que nuestra música aún suene tan viva. Si tocara mis canciones en directo creo que el concepto musical del show sería mucho más sencillo, pero ese no es el lado de las cosas que me gusta mirar, me fijo más en la diversión que me proporciona un proyecto como mi disco en solitario y el reto que sigue suponiendo crear con Deep Purple. Estoy muy orgulloso de la banda".

¿Echas de menos la capacidad de sorpresa en los grupos jóvenes?

"Realmente no estoy muy al día de lo que ha pegado últimamente, pero de toda maneras lleva muchos años el ser bueno improvisando, yo creo que aprendí realmente cuando llegué a los cuarenta, y sigo aprendiendo, aunque el resto de Purple ya eran buenos en eso desde los comienzos de la banda. Que conste que no estoy hablando de hacer el solo de un blues al que le cambias un par de notas cada noche, sino de crear fraseos nuevos que le comunicas al resto arqueando una ceja o con una mirada, ésta se adapta a la melodía o el tempo y todo fluye como un torrente. De verdad que es muy emocionante".

¿Estás en contacto con Jon Lord? ¿Sabes si es feliz desde que se jubiló?

"Se encuentra estupendamente, yo creo que muy feliz, y además no está retirado del todo. Nos tomamos dos meses de vacaciones en Navidades y yo aproveché para volar a diversas partes de Europa para promocionar 'One Eye To Morocco'. Cuando visité Moscú Ian Paice estaba haciendo un clinic allí, cuando estuve en Dusseldorf resulta que Jon ofrecía un concierto para grupo y orquesta (con la alemana), y cuando me encontraba en Bruselas me topé con que Don Airey actuaba en un club de Jazz. Como ves no paramos ninguno. A Jon lo vi por última vez en Londres hace tiempo ya, pero nos mandamos mensajes de vez en cuando. Sí, seguimos en contacto".

¿Vosotros no habéis pensado en ningún momento en seguir su camino?

"Los periodistas mencionan esa posibilidad a menudo, aunque no es algo que yo me plantee. Si en algún momento físicamente soy incapaz de seguir haciendo esto, abandonaré, no estaré dejándome la garganta a los setenta si no puedo ofrecer un show digno, pero continuaría haciendo música, cantando blues, por ejemplo; retirarme así porque sí no lo creo".

Recientemente has declarado que Glenn Hughes aún sigue copiando a Stevie Wonder, ¿te parece que al menos no le quitemos el mérito de haber sobrepasado la barrera de los sesenta años pudiendo llegar a los tonos de antaño?

"Es que yo no he dicho eso, dije que es una influencia muy fuerte en su manera de cantar, a veces algunos periodistas sacan de contexto este tipo de declaraciones, ¡que les jodan! Glenn es un cantante increíble, con una voz tremendamente poderosa más allá de que sea obvia su influencia de Stevie Wonder por el tipo de giros que utiliza, del mismo modo que sería ridículo que yo tratara de ocultar que Elvis Presley me marcó".

¿Es el alcohol tan malo para la voz como lo pintan?

"Diría que sí, todo es malo en cantidades exageradas, si comes mucho engordarás, y si bebes mucho, al día siguiente necesitarás un tiempo de recuperación, porque las toxinas de tu cuerpo tendrán un efecto negativo sobre tu voz. De chavales somos inmortales, puedes castigarte cuanto quieras, pero cuando llegas a cierta edad has de moderarte. Una pena, pero es mejor cumplir años que no cumplirlos (risas). En definitiva: alcohol y tabaco son malos para la voz, sí. Normalmente mi primer cigarro del día es a las once de la noche y suelo acompañarlo con alguna bebida, pero nunca bebo antes del show ni fumo mucho si estoy de gira, solamente me permito algunas licencias cuando estoy en casa con los amigos".

También he leído que opinas que el riff de "Perfect Strangers" te parece poco original. ¿Qué le pides tú a un riff entonces?

"Bueno, creo que había una canción de Zeppelin con un riff similar (¿"No Quarter" quizás?), pero no lo dije en un sentido negativo, al fin y al cabo en aquella época todos nos dejábamos influenciar los unos por los otros"