Entrevistas |Asger Mygind (VOLA)

«No me importa si la gente necesita muchas escuchas para poder apreciar nuestro disco»

Por: Ale Jimene

Han teloneado a Dream Theater y a Katatonia, y ahora, una de las mayores promesas del rock progresivo se embarca en su primer tour como cabezas de cartel. De sonido inclasificable, VOLA, consigue aunar elementos de metal, electrónica, djent y pop en una pócima que es sinónimo de éxito. Su segundo álbum de estudio, ‘Applause Of A Distan Crowd’, salió a la venta el año pasado, y en septiembre tienen dos fechas en España: día 24 en Sala Rocksound (Barcelona) y día 25 en Sala Nazca (Madrid). Asger Mygind, vocalista, guitarrista y líder de la banda, entra en detalles sobre todo ello y más con Ale Jimene.

¿De dónde viene el nombre de la banda? ¿Lo pronuncio bien? (le digo VOLA, tal y como se lee).
“Depende del lenguaje que hables, pero como lo dices está bien. Hasta donde yo sé, es italiano (“volar”). Nos gustaba el significado, es muy neutral. Es difícil decir qué tipo de música hace la banda basándote en el nombre. Creo que hace que la gente sienta curiosidad”.

Es cierto, y, además, creo que da una pista sobre lo que es vuestra música, tan variada en estilos y difícil de clasificar.
“Gracias, lo considero un halago. Suelo escuchar bandas que se encuentran entre el rock y el metal como Porcupine Tree, Opeth, A Perfect Circle, Deftones… Creo que está bien crear un espacio para ti mismo en el que sea posible escuchar cosas suaves en algunos momentos y bastante heavy en otros. Es donde me gusta estar”.

Pero  además tenéis una parte electrónica muy latente.
“Sí, nos gusta tener ese elemento en nuestra música también. Nuestro teclista es un gran fan de la música electrónica y muchas de las ideas que él trae tienen ese toque. A mí me gustan artistas alemanes como Modeselektor y Moderat. Me gusta esa melancolía que puedes crear con la música electrónica, esa onda de frialdad de las máquinas creo que es muy intrigante. Está bien incorporar ese tono”.

He escuchado vuestro último disco, ‘Applause Of A Distant Crowd’, como cuatro veces seguidas. Se va volviendo pegadizo con cada escucha. ¿Crees que vuestra música pueda ser difícil de escuchar de buenas a primeras? ¿Podría ser algo negativo a la hora de enganchar a nuevos fans?
“Creo que la gente necesita acostumbrarse al hecho de que hay un gran contraste entre las canciones, especialmente en este disco. Abarcamos un gran espectro. Nuestro álbum debut era más coherente en el sentido de un mismo género musical, pero, en este, creo que lo que las mantiene juntas es el foco en las melodías y el groove. Además, la producción de todo el disco las mezcla muy bien. Algunos de los discos que más me gustan han necesitado muchas escuchas para poder apreciarlos realmente, así que me da igual si eso ocurre con nuestro trabajo. En el paisaje musical actual, puede ser difícil, ya que la gente no suele dar muchas oportunidades al tener tanto entre lo que elegir, lo que es una desventaja. Pero si lo escuchan lo suficiente, sé que lo apreciarán. Espero que lo hagan (risas)”.

¿Qué pasa con todos esos cambios de ritmo y compases extraños? ¿Tenéis formación musical?
“Nicolai, el bajista, y yo, ambos fuimos al Rhytmic Music Conservatory en Copenhague (Dinamarca), pero no es algo en lo que me concentre mucho cuando compongo. Soy muy fan de Meshuggah, por ejemplo, y su música está casi toda en 4/4, el ritmo básico. Sin embargo, hay muchos compases sucediendo debajo de ese 4/4, lo que hace que suenen como si estuviera en movimiento, de alguna manera. Prefiero seguir ese planteamiento antes que hacer al resto de la banda seguir compases complicados, aunque algunas veces ha pasado”.

A raíz de esto, ¿cómo es vuestro proceso compositivo?
“Uno de nosotros crea un riff. Tenemos un servidor al que subimos nuestras ideas. A veces lo hacemos individualmente, grabamos cosas y las subimos. Otras, nos reunimos y trabajamos en esas ideas, tratando de desarrollarlas como un colectivo. Básicamente es siempre delante de un ordenador, con baterías programadas y eso. No somos una banda que se meta a un local y ensaye hasta que salga algo. Es más experimentar con software musical que hacer lo típico de ensayar”.

Eso me lleva a mi siguiente pregunta. Además de componer, tú has producido los dos discos de VOLA hasta ahora. ¿Cómo es eso?
“Bueno, es algo que disfruto haciendo. Supongo que fui inspirado por Steve Wilson, porque él siempre de hacerlo todo por sí mismo. Cuando empezamos, rápidamente comenzó a interesarme mucho la producción musical, no solo por el hecho de poder dar forma a los sonidos, sino porque también significaba poder lanzar música sin gastar dinero en un editor externo (risas)”.

¿Cómo ha evolucionado ese sonido desde los inicios de la banda?
“Creo que el cambio más importante vino cuando cambié las seis cuerdas por siete. En nuestro primer EP (‘Homesick Machinery’, 2008) utilizo una guitarra normal afinada en Drop D (bajando la cuerda más gruesa de Mi a Re), pero, en algún momento, la inspiración de Meshuggah se hizo demasiado grande y tuve que comprar una siete cuerdas. En el último disco, hay más influencias de Porcupine Tree y Opeth, mientras que en ‘Monsters’ (segundo EP, 2011) e ‘Inmazes’ (primer LP, 2016) es más Meshuggah. No queríamos hacer un “Inmazes 2”, sino algo más nuevo y fresco, lo que acabó en un disco más rock, con elementos heavy”.

‘Applause Of A Distant Crowd’ fue lanzado en 2018. ¿Hay nueva música de VOLA en camino?
“Bueno, estamos escribiendo nuevas canciones ahora mismo, y continuaremos con ello hasta finales de año. Las grabaremos a principios de año y creo que será de la misma manera que los otros dos discos, baterías en estudio y el resto en casa, aunque puede que tengamos alguien externo para mezclar esta vez. Va a ser emocionante, veo el nuevo disco saliendo en otoño de 2020”.

Venís a España en septiembre con dos fechas. He visto vuestro vídeo en Facebook anunciando saludando a vuestros fans españoles. ¿Hay ganas?
“¡Sí! Era Nikolai, hablando español (risas). Creo que la gente en España es muy extrovertida y enérgica, hacen los conciertos muy interesantes. Lo esperamos deseosos”.

He leído por ahí que no usáis amplis de guitarra, sino que vais con pedalera digital.
“Sí, es algo que llevamos haciendo desde ‘Monsters’. Me encanta la comodidad de llevar tan solo la pedalera conmigo, además de que suena igual, sin importar cuántos kilómetros ha recorrido o dónde la monte. Por supuesto, dependemos de cómo suenen las PAs (monitores de sonido de cada escenario), pero es que siempre dependes de cómo suenen las PAs. Puedo trabajar cualquier sonido en el ordenador y transferirlo a la pedalera. Es muy fácil y, realmente, no imagino volver a los amplificadores de guitarra”.

¿Cómo ves la escena del rock progresivo actualmente en vuestro país?
“Creo que hemos visto aparecer algunas bandas a raíz de la música djent hace unos diez años, con bandas como Periphery, Tesseract o Monuments. Ha habido un pequeño movimiento por aquí, aunque, por supuesto, sigue siendo una subcultura y no se acerca para nada el mainstream, como ocurre en Estados Unidos o en muchas más partes del mundo. Espero que la música de guitarras vuelva en algún momento”.

¿Alguna banda que hayas descubierto hace poco?
“No son para nada nuevos, pero he empezado a escuchar Daughters. Son muy ruidosos y agresivos, siniestros a veces. Pero el contraste que crean entre eso y otras partes mucho más melódicas es realmente increíble”.

Muchas gracias, Asger. ¡Nos vemos el 25 en la Sala Nazca!
"¡Genial! Será un placer veros por allí".

Etiquetas: , , , , , , , , , , , , , , , , ,

Categorizado en: , ,

Esta entrada fue escrita por Redacción

1 comentario

  • Juandie dice:

    Una banda que abarca muchos estilos musicales dentro de su propuesta musical pero que estará bien que descargen en nuestro país en breve.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *