Crónicas
Rata Blanca: puñetazos de heavy argentino
«Muy profesional fue el show, muy anti-profesional fue la espera»
19 octubre 2018
Vertigo Club, Houston (Texas)
Texto: El Lechón Atómico. Fotos: Neftalí Vélez Figueroa
Llegamos al Vertigo Club donde se presentaba Rata Blanca en una parte de la ciudad de Houston, Texas, que no conocíamos. Ya al llegar había una cola bastante larga y todavía no eran las 9:00pm. A eso de las 9:30pm abrieron las puertas y nos apostamos en la baranda. Mucha, mucha gente joven se dio cita para ver a estos veteranísimos músicos en su gira por el 30 aniversario de la banda. La edad promedio tenía que ser 20 años. La verdad es que se tardó muchísimo en comenzar. Nunca supimos por qué, pero nos tuvieron tres horas y media esperando parados frente al escenario.
Seguía llegando gente y más gente, y el alcohol seguía corriendo. La impaciencia hizo que muchos se intoxicaran, emborracharan y se molestaran en la espera. El ambiente se puso un poco cargado y hubo hasta amagues de peleas. No fue hasta las 12:30 de la noche cuando vimos a la banda tomar el escenario. La espera valió la pena, pues Rata Blanca arrancó con un “Los chicos quieren rock” súper bien tocado y con el sonido prístino de ‘Tormenta Eléctrica’, su última producción. Luego siguieron con el clásico “Solo para amarte”, dándonos puñetazo a puñetazo de heavy argentino. Estar en el público fue difícil, pues empujones, cerveza en el aire, brincos y gente tratando de llegar a la baranda molestaban a los que estábamos ya apostados allí. Adrián Barilari demostró que 30 años no son nada, y es que no parece que le han pasado tres décadas por encima. Está como nuevo y todo suena como en el disco. Así lo demostró en el tema “La otra cara de la moneda” y en el rápido “El círculo de fuego”. ¡Wow!
Luego le siguió el tema “Rock and Roll hotel”, donde Walter Giardino cambió su guitarra roja, veterana y curtida por una bella Fender nueva y dorada. Comenzaron entonces los acordes que juegan con el Blues del tema “Ella”, en el que Adrián volvió a reivindicarse como una de las mejores voces del heavy en Argentina. Prosiguieron con uno de mis favoritos, el clásico “Días duros”: siete minutos y medio de profesionalismo. Siguió el tema “Aún estás en mis sueños”, vitoreado y brincado por muchos. Fue el momento cumbre, ya que muchas parejas se abrazaban y otros saltaban cantando. Aquello no se detuvo ahí puesto que Walter volvió a tocar con su veterana guitarra roja coqueteando con solos y principios de canciones. Fue entonces cuando vino la parte más clásica y conocida del show con los temas “Volviendo a casa”, “Guerrero del arco iris” - que sonó fortísimo y al punto- y los más esperados: “Mujer amante” y “La leyenda del hada y el mago”, que todos cantamos. Esa noche el sonido estuvo a otro nivel.
Muy profesional fue el show, muy anti-profesional fue la espera. Nunca supimos por qué Rata Blanca nos tuvo esperando tanto. Debieron al menos haber explicado si se debió a algún problema técnico, de salud u otro motivo. ¡Aún así el sonido fue prístino! Sabemos que Rata no nos dio esa noche su set completo y solo tocó una hora. Mal, mal, mal. Sabíamos que en el show de Nueva York tocaron canciones como “Talisman”, “Agord la bruja”, “Tan lejos de aquel sueño” y “La llave de la puerta secreta”. ¿Por qué tan poco tiempo? ¿Por qué?
No puedo terminar esta crónica sin dar gracias a nuestro hermano Nerín Hernández de “The Fellowship of Metal” quien nos acogió en Houston, Texas. ¡Gracias, hermano!
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1 comentario
Quizás se tardasen mucho en aparecer en escena pero estoy seguro que la espera mereció la pena ya que en directo nunca defrauda a base del mejor Heavy Metal con esos temazos tan conocidos y Giardino con su típica Fender dando lecciones por doquier. Por mí parte que viniesen a España de nuevo por mucho que tarden en salir a tocar.