Knotfest Colombia: El mejor festival de Colombia en 2019

Accept

Arribamos antes de las 5:00 de la tarde, mucho después de lo previsto, cuando ya habían iniciado los argentinos A.N.I.M.A.L. Al ingresar escuchaba a lo lejos “Solo por ser indios”, canción que me recordaba el porqué de las luchas que hoy vemos en Latinoamérica. De la lista alcanzamos a temas como “Gritemos para no olvidar”, “Combativo”, “Los que marcan el camino” y el cierre con la canción “Cop Killer”, que nos movilizaron a continuar con las arengas que hacen de nuestro paro nacional. Los argentinos se despidieron agradeciendo por el “aguante” (apoyo). Luego del ambiente de jolgorio contestatario seguía el turno de los fineses y muy apreciados Stratovarius,  a quienes pude apreciar desde la barda y sin dejar de sentir una alegría desbordante. Su repertorio, muy clásico y muy corto, trajo temas como “Phoenix”, “Eagleheart”, “Paradise”, “4000 rainy nights”, “Shine in the dark”, “Unbreakable”, “Black Diamond” y “Hunting High And Low”. La bandera finesa adornaba la batería de Rolf Pilve debido a que este día se conmemoraba la independencia de este país escandinavo. Nuevamente, Timo Kotipelto se siente feliz por la respuesta de la gente que no deja de darlo todo y agradece al público.

Cabe señalar que los dos escenarios principales estaban situados uno junto al otro, por lo que mientras una banda se presentaba se hacía el montaje de la siguiente, de esta manera no se perdía tiempo, solo que tenías que estar en una ubicación estratégica para apreciar ambos escenarios de la mejor manera posible. Sin embargo, eso no fue impedimento para disfrutar el show de todas las bandas. Las pantallas ubicadas a los extremos exteriores de cada escenario ofrecían una solución, pero hizo falta una en la mitad de ambos.

Behemoth

Continuando con este magnífico cartel, le llegó el turno a Unleashed, la potente banda sueca de Death Metal que, además de sonar increíble, contó con un repertorio que no dejó una cabeza sin movimiento. Algunos de los temas que escuchamos fueron “Dead Forever”, “Don’t Want To Be Born”, “Lead Us Into War”, “They Came To Die”, “Hammer Battalion”, “The Dark One”, “Execute Them All”, “Into Glory Ride”, “Death Metal Victory” y “Before The Creation of Time”. Finaliza esta potestad sueca para dar paso a un show que dejó bastos cuestionamientos, el de Cherry Bombs. Este se podría describir como un perfomance al estilo “burlesque” por las cuerdas, acrobacias aéreas, telas, fuego, vestuarios sensuales y coreografías, que fueron los elementos que este grupo de chicas usó para mostrar que el rock y el metal se pueden llevar como telón musical para este tipo de espectáculos. Sin embargo, deja en el aire la siguiente pregunta: ¿Cabe dentro de un festival como el Knotfest? Pues muchos de los asistentes se retiraban y otros tanto no dieron ni un aplauso.

W.A.S.P.

El frío en la noche es parte natural de este sector de nuestra geografía, no obstante, parecía no hacer mella en los asistentes que ya estaban cerca de los escenarios, pues la temperatura fue elevada por los californianos de Testament. Con ellos vibramos con temas como “Brotherhood Of The Snake”, “The Pale King”, “More Than Meets The Eye”, “Into The Pit”, “Electric Crown”, “Practice What Your Preach”, “The New Order”, “Over The Wall” y “Disciples Of The Watch”. Una vez más, Chuck Billy, Alex Scolnick, Eric Petereson, Steve DiGiorgio y, en lugar de Gene Hoglan, Dirk Verbeuren (baterista de Megadeth), demostraron por qué esta banda sigue siendo un icono del thrash metal. Siguiendo esa línea, otro grande llega al escenario, Accept. Sin duda, un show que nos dejó sin aliento, y cómo no lograrlo con temas como “Die By The Sword”, “Restless And Wild”, “Pandemic”, “Princess Of The Dawn”, “Midnight Mover”, “Up To The Limit”, “Fast As a Shark”, “Metal Heart”, “Teutonic Terror” y “Balls to the Wall”. Estos tres últimos incrementaron esa felicidad, los saltos y los coros rompían el eco silencioso de las montañas y una noche de estrellas.

Sí, estrellas lejanas eran las que brillaban, esta vez desde Polonia, puesto que un referente del black metal, Behemoth, daría muestra de su calidad en la puesta en escena, no solo por su música, que es precisa, oscura, desafiante y armónica, sino también por su vestuario, maquillaje, sincronización y show final de percusión. Algo para aplaudirles a los polacos, que bajo el liderazgo de Nergal brindan un show sencillo, teatral y entregado al público. El repertorio fue: “Solve” (canción que inicia con los coros de niños), “Wolves ov Siberia”, “Daimonos”, “Ora Pro Nobis Lucifer”, “Bartzabel”, “Ov Fire And The Void”, “God=Dog”, “Conquer All”, “Sabbath Mater”, “Blow Your Trumpets Gabriel”, “Chant Your Eschaton 2000” y, para finalizar, “Coagvla” (precusion de Nergal, Seth, Orion e Inferno).

Slipknot

Vienen las dos cerezas del pastel, Wasp y Slipknot. Honestamente, mi favorita de la noche fue W.A.S.P., pero, a pesar de que no soy seguidora de Slipknot, su increíble show me dejó gratamente sorprendida. Ver a Blackie Lawless fue inspirador, me recordar el glam de los 80’s y me dejó altamente impresionada con su voz casi intacta, su carisma. Junto con los grandes músicos que lo acompañaron revivieorn esa década maravillosa con temas como “On Your Knees”, “Inside The Electric Circus”, “L.O.V.E. Machine”, “Arena Of Pleasure”, “Chainsaw Charlie”, “The Idol”, “The Great Misconceptions of Me”. Tras un breve receso, finalizaron con “I Wanna Be Somebody”. Lamentablemente, Blackie se veía algo descompuesto, quizá el tema de la altura le afectó. Quedó en el tintero “Wild Child”, sin embargo, quedamos complacidos de ver por primera vez a Wasp en Colombia, la espera no fue en vano.

Cerramos el festival con Slipknot. Como mencioné anteriormente, un show sorprendente, lleno de detalles, de luces, color, estrafalarios trajes y máscaras. Su ya infalible calidad musical se evidenció con un show de dos horas en las que sonaron “People=Shit”, “(Sic)”, “Get This”, “Unsainted”, “Before I Forget”, “Solway Firth”, “The Heretic Anthem”, “Psychosocial”, “The Devil In I”, “Prosthetics”, “Vermilion”, “Wait And Bleed”, “Sulfur”, “All Out Life”, “Duality”. Y, para terminar, “Spit It Out”, “Surfacing” y “Until We Die”, que cerró con un espectáculo de pirotecnia simplemente espectacular.

Así, termina el mejor festival que ha tocado suelo colombiano en este 2019, con excelentes bandas, buen sonido y organización. No se presentó ningún hecho que lamentar, pues justamente lo que se reclama en el país es no más violencia. La salida y el transporte tanto para llegar como para regresar son asuntos que debe plantearse la organización para el siguiente año. Aunque muy cansados, los espectadores salieron más que complacidos. Agradezco a las personas que hicieron posible este evento y mi asistencia a él, y gracias en especial a mi compañero fotógrafo German Rojas que le tomó casi cinco horas poder hacer realidad la primera toma de su cámara, desde que salió de su casa.

Slipknot

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