Crítica de Herrero: Nada es eterno - MariskalRock.com : MariskalRock.com

Herrero

Nada es eterno

Autoeditado (2023)

Por: Valle

En la vida, todo pasa, todo cambia y, por supuesto, todo llega. Por mucho que nos aferremos a los recuerdos y maquillemos a los muertos, nada dura para siempre y debemos estar preparados para adaptarnos a los cambios.

Cuentan que, una vez, un hombre arruinado, abandonado y deprimido estaba tan desesperado que fue a pedirle consejo al cura de su parroquia. Tenía tantos problemas que el sacerdote no sabía cómo ayudarle y, para quitárselo de encima, le dijo que buscara inspiración en la Biblia. Que, con los ojos cerrados, la abriera por cualquier página y señalara una frase.

Al año siguiente, la misma persona regresó para agradecer el consejo. Todo había cambiado. Volvía a tener dinero, amor y alegría. Sorprendido por lo que estaba escuchando, le preguntó que cuál versículo había leído y éste le dijo que, a ciegas, señaló donde ponía “capítulo 18”. El párroco insistió: “Muy bien, ¿y qué decía el capítulo 18?”. Aquel hombre respondió: "No lo sé, no lo leí. Pero, de repente, me di cuenta que el capítulo 17 había terminado”.

Sí, es posible que, a día de hoy, estéis empezando vuestro capítulo dieciocho. Por eso, os deseo mucho ánimo para conseguir vuestros futuros objetivos y que no os estanquéis en un ya acabado 17 porque, para bien o para mal, lo que está claro es que nada es eterno.

'Nada es eterno', aunque es el nombre de su primer álbum, es el ilusionante capítulo 18 de un artista experimentado y curtido que siempre ha sabido adaptarse a las nuevas circunstancias. Estoy hablando de Herrero, un músico multidisciplinar que ha colaborado, como instrumentista sobre todo, poniendo la magia de su saxo en infinidad de proyectos con los mejores intérpretes de nuestro país. Ahora, preparado y convencido, decide saltar a la palestra y rescatar algunas de las composiciones que iba creando en la sombra.

Este nuevo trabajo vio la luz el pasado viernes 10 de marzo, y comienza con la canción homónima al disco. Un tema de arreglos magistrales, estribillo pegadizo y buenas transiciones que, sin duda, resume lo que será la tónica de todo el conjunto. Su estilo soft rock con influencias americanas se hace más evidente en “Mañana quizás”, otro corte de muy alta calidad en la composición, al igual que “Mi ciudad tu habitación”, que además tiene un punto de potencia.

Dani Herrero es conocedor del poder de sus inspiradas melodías y, debido a esto, varias de las piezas de esta colección comienzan, directamente, cantando. Un recurso impactante pero, lo dicho, solo apto para casos como este, en el que las musas te arropan con sábanas de seda.

De esta manera empieza “Boomerang”, el single de adelanto al álbum, que pronosticaba lo que ya sabemos: 'Nada es eterno' es un discazo. Después, el romanticismo más enternecedor brota en la mágica “Besos de primavera”. Un coro que debéis aprender para susurrarlo al oído de vuestra pareja.

Más rockera y desgarrada luce “Miedo a bailar”, mientras que el saxo de Herrero vuelve a reinar en “Cicatrices”. Pese a que intuyo que este es el típico LP del que cada día te gusta una canción diferente, hoy mi favorita es “Salto Mortal”, no sólo por el precioso cambio melódico que tiene, sino porque, también, como “Mañana quizás”, goza de unos matices muy Eagles que me encantan.

No quiero terminar la reseña sin decir que estoy deseando verlo en directo el 29 de marzo en la sala Fun House de Madrid. Allí le acompañarán músicos de mucha categoría: Arturo Ruiz al bajo, un enorme Dani Griffin a la batería y, sobre todo, Javier Quintana Dampierre, un guitarrista al que sigo con devoción en todos los conciertos de otros artistas con los que colabora, como Nito Serrano o Antonio Hernando, y que nunca deja de sorprenderme.

Volviendo al álbum, el penúltimo tema, llamado “Si tú no estás”, flota en suspensión gracias a un precioso cuarteto de cuerda. Las cuidadas letras de 'Nada es eterno', aunque en una fase evolucionada de comprensión y aprendizaje, suelen tener la temática de la pérdida del amor.

No obstante, este trabajo discográfico acaba en un maravilloso country cuyo título es “Vuelvo a soñar”, porque, al final, en la vida, todo pasa, todo cambia y, por supuesto, todo llega.

Escucha 'Nada es eterno' en Spotify: