Gene Simmons (Kiss) se rindió ante Slade: “Sois los mejores teloneros que hemos tenido”

6 diciembre, 2020 3:36 pm Publicado por  7 Comentarios


El panorama del glam rock británico había explotado a principios de los setenta en una colisión brillante de estilos, espectáculo y canciones exquisitamente comerciales. Uno de los grupos más populares del glam rock fue Slade, una pandilla de rebeldes del rock and roll e inadaptados y famosos por su teatralidad que usaban extravagantes trajes e himnos potentes.

Entre 1971 y 1975, la ‘Slade-manía’ reinó en el Reino Unido. La fuerza de Slade se basó en las canciones de Noody Holder y Jim Lea, la voz de Holder, que solía alcanzar cotas de alucinada gravedad, rock intenso, aplicado con el máximo volumen y virulencia, la contundencia de su estilo e incluso la novedad de sus textos, escritos todos ellos en un dialecto inglés y manifiestamente callejero que doto al cuarteto de una aureola de grupo de barrio. Ellos formaban parte de aquellos grupos que supusieron una ruptura con la música y cultura hippie de finales de los sesenta. Slade no estaban interesados en unirse para cambiar el mundo, sino en encontrar un escape individual de la realidad hacia una eterna fantasía de fama y excentricidad.

Aunque fracasaron en el intento de alcanzar el éxito en el mercado estadounidense, dejaron su sello en Gene Simmons y Paul Stanley, que los consideran entre sus influencias. Gene admite que la filosofía en la composición y las actuaciones en vivo en los primeros tiempos de su grupo, Kiss, estaban inspiradas en Slade. El sonido, imagen y presencia escénica fueron una gran influencia. La banda compartió unos cuatro conciertos en una serie de fechas por Estados Unidos (Tennesse, North Carolina, Virginia y Pennsylvania) en 1975.

Slade tenía enérgicas actuaciones en vivo. Triunfaron en las listas de éxitos de la época en Inglaterra, sobrepasando comercialmente a otros grupos competidores encuadrados en el glam como Wizzard, Sweet, T.Rex, Suzi Quatro, Mud, Smokie, Gary Glitter, Roxy Music o David Bowie. Entre 1971 y 1976 lograron entrar 17 veces en el Top 20, con seis números uno, tres de ellos entrando directamente en ese puesto, y otros tres y dos éxitos en los puestos segundo y tercero, respectivamente. Vendieron, además, más singles que ningún otro grupo en los años 70. Una presencia semejante en las listas sólo es comparable con la de los Beatles y sus 22 canciones entre las 10 más vendidas en una sola década (años 60). Himnos distintivos de Slade son “Cum on Feel the Noize” y “Mama Weer All Crazee Now”.

“El personal de gira y Kiss no podían esperar a los conciertos que hicimos con Slade. Ellos fueron una gran influencia para Kiss y todo el mundo estaba emocionado de tenerlos compartiendo cartel con nosotros. Kiss les mostró una cantidad tremenda de respeto. El personal de gira, Ace Frehley y Peter Criss intentaron beber con Slade en el Holiday Inn, pero esos tipos británico-galeses bebían como una cuba, excepto Ace, que cumplió bastante bien (risas). Solo hay tres bandas que recuerde a las que tanto Kiss como el personal de gira observaron desde el lateral del escenario, y esos fueron Slade, Montrose y Raspberries”, contaba Mick Campise, antiguo road crew, a Ken Sharp, Goldmine Magazine.

Para Paul Stanley, en muchas formas, Slade eran los homólogos ingleses a Kiss, en directo tenían un sonido sencillo, pero te pateaban el culo. La banda entera parecía como si fuese una especie de dibujo animado y hubieran cobrado vida. Eran una apisonadora en directo, eran de barrio, como ellos. De hecho, su guitarra Iceman de espejos del 79 en realidad no fue una idea original de Stanley. El cantante de Slade tenía un sombrero con enormes espejos circulares en él, así que cuando la luz se reflejaba en ellos parecía que salían rayos de luz de su sombrero. Para Stanley aquello era una idea muy chula, de ahí salió la idea para la guitarra de espejos.

La novia de Gene Simmons por aquel entonces tenía un par de discos de Slade. A menudo sonaban en su sótano, y Simmons se quedaba anonadado. El material simplemente le dejaba flipado con su simplicidad y sus guitarras. Fueron una gran influencia para él, pero no hasta que los vio. La filosofía del tema “Mama Weer All Crazee Now” influenció en la composición de “Rock And Roll All Nite”, la parte de “You drive us wild, we’ll drive you crazy” es la misma”.

“Sabía que Kiss estaban muy influenciados por Slade”, apuntaba Noddy Holder, guitarrista de Slade. Para él fue un gran cumplido que una banda como Kiss les mencionara como influencia. “Cogieron todo lo bueno de Slade y lo llevaron al extremo más lejano. Al igual que Slade, Kiss hizo himnos pero al estilo americano. Llamaron a uno de sus discos Alive! y pensé, “Joder, lo han apodado con nuestro título del disco”, porque unos cuantos años nosotros habíamos editado un disco llamado ‘Slade Alive!’”, recordaba el bajista de Slade, Jim Lea. “Pero un tipo que solía velar por nosotros en América nos dijo: “No os preocupéis al respecto, estos tipos están locos con vosotros, es un homenaje, tomadlo como un cumplido””. ‘Nothin' to Lose: The Making of Kiss (1972-1975)’.

“Nunca había oído hablar de Kiss”, decía Jim Lea, el músico inglés de los Slade. “Tocamos con ellos por primera vez en Chattanooga, Tennessee (10 de Septiembre de 1975). Así que salimos, tocamos y nos metimos. Estaba de pie en el lado del escenario viéndoles y volví corriendo al camerino y le dije a la banda, “¿Alguien ha visto a este grupo?”. Don (Powell, el batería de Slade) salió y se puso de pie a mi lado. Me pareció que Kiss eran divertidos y escalofriantes, no toda la banda, pero Gene Simmos era tremendo en directo. No sabía qué pensar en absoluto de Kiss. Había una pequeña banda en Inglaterra llamada Light Fantastic que tenían a un bajista que se vestía como Drácula, este tipo saltó desde el anfiteatro y se noqueó, quedo KO en el suelo (risas). Pensé que Gene era como ese tipo. Acabaron la parte principal de su concierto y Gene vino hacia nosotros. Debía medir tres metros con esas enormes botas, el collar de perro con pinchos, y el pelo recogido arriba al estilo samurái. Además, tenía toda esta sangre esparcida por la cara. Don decía (con voz asustada): “Joder, viene hacia nosotros, ¿Qué vamos a hacer? Oh Dios mío, ¿Deberíamos irnos?” (risas). Y le dije (con voz asustada): “No, no, no debe parecer que nos asusta, simplemente nos quedaremos aquí” (risas). Vino y se quedó de pie junto a nosotros y mirando hacia abajo me dijo: “Oye, ¿Cómo está Roy Wood (líder de la popular banda británica de los sesenta Move)?” (Risas). ‘Nothin' to Lose: The Making of Kiss (1972-1975)’.

“A la noche siguiente estábamos tocando en Knoxville. Fui al backstage y había un tipo con pelo largo encrespado, camiseta y vaqueros y sentado en un baúl de gira. Pasé junto a él y me dijo: “¡Hola, Jim Lea!”. Yo era bastante tímido y no me gustaba que me señalasen. Empezó a hablarme sobre nuestro disco ‘Slade in Flame’ y dijo: “El batería de nuestra banda está loco por vuestro disco. Su mujer pone “How does It Feel” constantemente, y yo también creo que es una canción magnífica”. Le dije: “¿Tocas esta noche?”, y me dijo: “Sí”. Y le dije: “¿Cuál es tu banda?” y me dijo, “Kiss” y le dije, “¿Tú qué haces?” y me dice, “Soy el bajista” (risas). No le habría reconocido ni en cien años (risas). Gene dijo: “Nosotros seguimos el ejemplo Slade porque vosotros eráis cuatro personalidades distintas, y eso es lo que nosotros queríamos ser”. Me dijo que era un honor tenernos en el cartel. Ellos hacían una versión de cómic muy americana. Gene dijo que Slade fueron la primera banda que le enseñó al público a amotinarse. Kiss entendieron lo que estaba pasando, así que dijeron: “Muy bien, tomaremos su idea y simplemente la americanizaremos”. Y eso es lo que hicieron. Donde nosotros puede que tuviéramos una máquina de confeti, ellos lo hacían todo a lo James Bond. Todavía sigo guardando un gran afecto por la banda. Es casi como si el guitarrista se fuera y yo pudiera maquillarme y unirme a la banda y nadie notaría la diferencia (risas). En los setenta Kiss aguantó críticas por ser unos músicos de chiste, pero a mí me parecía que eran buenos músicos y una banda de rock realmente buena. Paul Stanley era realmente bueno como líder. Era como un Marc Bolan (líder de T. Rex), y también me gustaba mucho la forma de tocar de Ace Frehley. ‘Nothin' to Lose: The Making of Kiss (1972-1975)’.

“A mediados de los años setenta estuvimos de gira por los Estados Unidos con todo el mundo, desde ZZ Top, Aerosmith y Kiss. Nos divertimos mucho con Kiss estando de gira”, contaba Dave Hill, de Slade. “Puede que Slade fuera una gran influencia para Kiss, pero ellos realmente hicieron lo suyo y se lo curraron de lo lindo. Kiss se parecen mucho a Slade en lo profesional. Para nada fue duro ser  sus teloneros. Creo que les caímos bien. Fuimos una buena banda de apoyo, éramos una banda emocionante. Siempre hemos sido tipos muy centrados de clase trabajadora y de familias que trabajaron muy duro para llegar a tener algo en la vida. La gente de Kiss es igual en ese sentido. Su show era muy potente y teatral. Si los miras, son como versiones ampliadas de lo que hubo antes. Si iban a llevar botas de plataforma, iban a ser las más grandes. Veían una idea y la hacían más grande de lo que era antes. El arte de vender no solo tener el producto adecuado sino también la forma adecuada de venderlo es lo que Slade tenía y Kiss también. Tuvimos momentos geniales estando de gira con Kiss. Me quedaba totalmente alucinado viéndoles actuar”, recordaba Don Powell, el batería de Slade.

“Todo el montaje escénico era fantástico. Estábamos de gira con ellos cuando se editó ‘Alive!’. Nos mostraron un gran respeto y era un cartel magnífico. Gene Simmons nos dijo: “Sois la mejor banda telonera que jamás hemos tenido” porque levantábamos a la multitud y la excitábamos antes de que ellos salieran y reventábamos el lugar”. Una vez estábamos tocando con Kiss y pasó algo con su sistema de monitores o PA y tuvieron que usar el nuestro. Pero estaban acostumbrados a una configuración más grande que la nuestra. Durante el concierto, Gene Simmons seguía corriendo por el escenario hacia nuestro encargado de monitores, llamado Johnny Jones, gritándole: “¡Sube los malditos monitores!”. Aquí estaban Gene, con toda la sangre goteando en la cara, y nuestro encargado de monitores teniendo esta discusión. Yo estaba en el lateral del escenario viéndolo, y era una imagen muy divertida. Nuestro ingeniero de monitores era tres veces más pequeño que Gene Simmons, y ahí estaba él, señalándole y gritándole, diciéndole que se callara (risas). No había nada que Johnny pudiera hacer, nuestro sistema era mucho más limitado de lo que Kiss estaba acostumbrado”. ‘Nothin' to Lose: The Making of Kiss (1972-1975)’.

“Nos juntábamos con la banda después de los conciertos. Recuerdo hablar con Gene Simmons y yo era muy pequeño y cuando le miraba hacia arriba era como mirar al Empire State Building”, recordaba Dave Hill. “Gene me contó cuando él y Paul fueron a vernos tocar en la Academy of Music de Nueva York. Yo llevaba estas botas enormes de plataforma e iba pavoneándome por la pasarela y me caí de espaldas con la guitarra (risas). Me quedé tumbado en el suelo y no podía levantarme bien porque llevaba las plataformas así que levanté los pies en el aire actuando como si fuera parte de un truco. Gene me dijo lo mucho que le encantó. Creo que pensó que era parte de la actuación”. ‘Nothin' to Lose: The Making of Kiss (1972-1975)’.

Estaba claro; durante su largo viaje hasta la cima, tanto Slade como Kiss perfeccionaron sus actuaciones en vivo, tocando en cientos de conciertos, tocando en cualquier lugar y en cualquier sitio donde les contratasen. No fueron un éxito instantáneo de la noche a la mañana. Ellos lo hicieron de la manera más difícil, desde abajo y en un mundo desprovisto de la tecnología moderna que todos conocemos hoy en día. Aprendieron su oficio y se abrieron paso a golpes de rock hasta llegar a ser las bandas icónicas que han llegado a ser hoy en día.

Fernando Martínez

Etiquetas: , , , , , , ,

Categorizado en: ,

Esta entrada fue escrita por Redacción

7 comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *