Daeria presenta “Alter”, su nuevo disco, en el Hard Rock Café de Madrid

Menos de año y medio después de que Daeria surgiera de las cenizas de Döria con su disco debut apropiadamente titulado ‘Fénix’, el conjunto de metal barcelonés nos congregaba el 7 de febrero para presentarnos ‘Alter’, su segundo plástico, en un encuentro en el que sus integrantes nos hablaron del camino recorrido hasta  y analizaron los ocho temas que componen este disco (que llegará a las tiendas este 14 de febrero de la mano de On Fire Records) uno a uno.

Y es que precisamente la banda se ha preocupado en tener listo este segundo álbum con tan poco margen desde que editara el primero para continuar alargando el dulce momento que Daeria vive; en palabras del propio grupo, “para que el tren no se pare”. ‘Alter’ se apoya en esta ocasión en una premisa clara: hacer lo que te dice tu corazón a pesar de que puedas sentir miedo o que eso no sea aquello a lo que la sociedad de dirige. Un mantra que encontramos latente en varias de las canciones del redondo, el cual la banda destaca positivamente que no se hace largo (y algo que corroboramos con su escucha).

Comenzamos con “Miedo”, tema que Daeria ya había presentado previamente en forma de single y que precisamente habla de el temor que puede producir salirse de los cánones establecidos, como nos explicaba el vocalista Ángel Ortiz. Metal moderno con reminiscencias a rap metal de principios de siglo en lo instrumental de su intro seguido de una atronadora batería en el estribillo marca de Joel Marco. Este acelerado inicio prosigue de la mano de “El ojo de Aughra”, para cuya composición el grupo (y, especialmente, Joel, quien se define como el más friki de la banda) se inspiró en la serie ‘Cristal oscuro: la era de la resistencia’. El resultado es unos primeros segundos atronadores y directos al mentón que desembocan en un tema con cierto sabor a opening de manga y al que Ángel dota de luminosidad con su notable habilidad vocal.

Seguimos desgranando ‘Alter’ con “Bailarina”, otro de los adelantos del álbum y en el que, en esta ocasión, la banda aborda la fachada y la falsedad que te hace tener que estar siempre perfecto ante la constante vigilancia de la sociedad. La acogida por parte de los fans de Daeria ha sido muy buena, y no es para menos, ya que nos encontramos con un corte con una sensibilidad especial sumada a una ilusión de combinación de distintos compases como si de una propia danza se tratara, todo ello rodeado por un aura de misticismo. ¿Que cómo fue compuesta esta pieza? Tras unas cuantas cervezas que tenían por objeto sacar al grupo de un pequeño momento de falta de inspiración. Misión cumplida.

“Parte de ti” supone el primer corte en el que Daeria levanta un poco el pie del acelerador, un tema que la bajista Laura Moral define como una “power ballad sobre una ruptura amistosa”. El contraste entre las estrofas acústicas y los estribillos y puentes eléctricos es agradable, pero agradecemos la entrada del piano y la guitarra por separado en el último tercio para darnos una buena sacudida.  Y de este hiato en lo que a tralla respecta Daeria nos transporta al Egipto imperial de la mano de “Horus”, corte con tintes orientales y al que el hijo del de Osiris e Isis, que venga la muerte de su padre a manos de su tío, Seth, da nombre. La banda se encuentra cómoda echando mano de la historia para inspirarse en su obra, y no descarta en absoluto echar un vistazo a las mitologías griega y/o romana en el futuro. Otro solo impresionante entre armónicos menores, y van...

El último tercio de ‘Alter’ nos hace comenzar a pensar si con “Siete mares” la banda no está pecando de repetitiva en la estructura de los temas pese a añadir elementos diferenciales en cada uno, como el efecto wah-wah que impera en esta canción que versa sobre una princesa prometida que renuncia a su destino impuesto y se reinventa como pirata. “Instinto” no es que nos despeje estas ideas de la cabeza, ya que resulta disfrutable pero no aporta innovación frente a sus predecesoras. Afortunadamente, Daeria cierra con maestría su segundo esfuerzo discográfico con   “Hielo”, uno de los temas más especiales del plástico al tratar sobre las personas que sufren el síndrome de Asperger y que, por mucho que lo intenten, son incapaces de relacionarse con su entorno, algo tan en consonancia con la temática de ‘Alter’. Ángel niega que esta condición haya sido escogida como tema por proximidad en algún miembro del grupo (véase amigos o familiares), destacando que en casos como el expuesto la pelota está en el tejado de la sociedad, quien tiene que abrir las puertas a las personas que sufren mayores dificultades. Daeria no se reinventa en este tema, pero es que sencillamente se trata de una pieza que apunta a convertirse en fundamental en sus directos.

Los catalanes aseguraban haber apostado por un sonido más contundente que el que nos encontramos en ‘Fénix’, y lo cierto es que parece que Daeria haya dado con la tecla que buscaba, logrando un sonido con identidad propia y que destaca por méritos propios entre la oferta de metal patrio de la que gozamos. También merece la pena destacar que existiendo otras posibilidades de negocio instauradas en la actualidad tales como editar varios EPs sucesivamente en vez de lanzar un nuevo disco de larga duración, el objetivo del combo, como explicaba el guitarrista Víctor Vázquez, siempre había sido el de lanzar al mercado un álbum con ocho temas todos ellos válidos como singles. Algunos podrán tachar esta afirmación de pretenciosa, pero cuando se tiene la razón de una forma tan palpable (y habiendo dado cuenta de ello), no queda más que quitarse el sombrero.

Álvaro González

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