Crónicas

Sevilla Urbano Festival

«Dicen que la primavera la sangre altera y, si es a ritmo de heavy rock, mucho mejor»

4 y 5 de mayo

Centro Andaluz de Arte Contemporáneo de la Cartuja, Sevilla

Texto: Antonio Vázquez y Silvia Black Panther. Fotos: Antonio Vázquez

Con la tercera edición en el horizonte del histórico Rocktiembre, celebrado por primera vez el 22 de Septiembre de 1978 en la entonces plaza de toros de Carabanchel, encontramos una oportunidad de revivirlo en tierras andaluzas con el Sevilla Urbano Festival.

Asfalto

Imagino que muchos de los que vieron el cartel se sorprendieron al ver que todavía se apuesta por la cultura rockera clásica en estos tiempos que corren, y más aún por tierras del sur. La curiosidad por descubrir al promotor en cuestión se disiparía al ver que el encargado era el extremeño de adopción Ángel Vallekas, lógico si tenemos en cuenta que ha sido el único en homenajear, como es debido, al maltratado rock andaluz: Smash con Manuel Molina, Alameda, Triana, Imán Califato Independiente, Tabletom, Medina Azahara y Lole Montoya con su grupo actuaron en la edición 2009 del festival que él mismo creó, el Extremúsica.

En cualquier caso, el Sevilla Urbano Festival fue una llamada a los más veteranos aficionados al rock estatal y a los jóvenes dispuestos a conocer a los padres y maestros de nuestro rock. A lo largo de sus dos jornadas, contamos con las bandas que escribieron las mejores páginas de la historia de la música rockera de este país. Además, el precio fue apto para todos los bolsillos: tan solo 33 euros las dos jornadas. ¿El recinto? Magnifico: el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo de la Cartuja de Sevilla.

La primera jornada comenzaba coincidiendo con la puesta de sol. A las 21:30, dos bandas locales, Culebra & The Cheyennes, formada en los ochenta por Javi Culebra, ex bajista de Luzbel; y KILLdaCANE, con Vikingo de los Narco en sus filas, inauguraban este festival mientras poco a poco el recinto recibía al público asistente. Este fue de mil personas el primer día y mil trescientas el segundo, sumando ambas jornadas un total de casi dos mil quinientos asistentes.

Obús

Julio Castejón y sus Asfalto regresaban a la comunidad andaluza con dos nuevos trabajos editados el pasado año: ‘Crónicas de un tiempo raro’ y el directo en La Riviera titulado ‘Sold out’. Llegó a Sevilla con una banda consolidada que defiende su legado musical a la perfección. Además de Arturo a la batería, Pablo Ruíz al bajo y Nacho a los teclados, el hijo de Julio, Paul Castejón, brilla con luz propia, demostrando ser un auténtico musicazo, sin duda alguna. La agrupación más longeva de todas las presentes en el evento nos ofreció un repaso a sus temas más emblemáticos: “Déjalo así”, “Más que una intención”, “Ser urbano”, “Días de escuela” y “Es nuestro momento” tuvieron al público como un gran coro de excepción. Sus maravillosas letras nos hicieron retroceder en el tiempo, intercalándose con otras de su último plástico de estudio, el cual muestra que aún siguen muy vivos.

Unos "televisivos" Obús colocarían la bandera del heavy nacional sobre el escenario. Fortu sabe como nadie manejarse sobre un escenario y su fiel escudero, Paco Laguna, es su complemento perfecto. Como de costumbre, tiraron de su artillería para la ocasión. “Juego sucio” abriría el fuego para continuar encadenando clásicos imperdibles como “Necesito más”, “Te visitará la muerte”, “El que más”, “Dinero dinero”, “Prepárate”... Pequeños solos de Montesinos al bajo y Paco a la guitarra en la presentación de los músicos darían paso a un espectacular solo de Carlos Mirat a la batería, quien acabaría haciendo filigranas en una escalera. El más listo de la clase, Fortu, sacaría un tema extra a su tiempo, “Vamos muy bien”, con el que pusieron el punto final a su actuación.

Medina Azahara con Fortu (Obús)

Para cerrar la primera noche subían a las tablas los cordobeses Medina Azahara con un tijeretazo que recortaba su setlist habitual. Todo un clásico siempre aclamado por el gentío espectador como es "Paseando por la mezquita" era el encargado de abrir bocas seguido de temas que son ya imprescindibles: "Palabras de libertad", "Qué difícil es soñar" y "Niños".

Rock andaluz sin adictivos que supo enganchar con un público que, como es habitual, se sabe todas las canciones de "pe a pa". Sonó "La tierra perdida (O U A)" seguido de todo un himno dedicado a su tierra, "Córdoba". No dejó indiferente a la peña sevillana.

Como cortesía y homenaje a Triana, máximo exponente y banda precursora del rock andaluz, sonó "El lago", corte fijo en el setlist de los Medina. A toda "Velocidad" se iba anunciando el ocaso del festival en su primera jornada con "Todo tiene su fin", en la que Fortu apareció como invitado de excepción de los sultanes de la tierra cristiana y mora. Como colofón, presentación de la banda, foto final y hasta la próxima. Les sobra todavía mucha tralla que dar en esto del rock.

Storm

La historia del hard rock español tiene un nombre propio: The Storm. Los sevillanos se encargarían de abrir la segunda jornada del Sevilla Urbano. Tras su consolidado regreso en 2013, si no recuerdo mal, cada uno de sus conciertos que he vivido ha sido una autentica gozada y este no fue menos. Los hermanos Ruiz Geniz tienen el talento innato de los músicos de antaño, ahora acompañados de sangre joven: el teclista Manuel Muriel y el bajista José Ramón Torres, ambos de la banda de hard rock "Sierpe".  Su último trabajo hasta la fecha es ‘Trilogía’ (Arabian Rock). En él, combinaron temas nuevos con canciones de sus dos únicos discos editados en su primera etapa.

Durante el poco tiempo del que disponían nos dejaron temazos como “I Don't Know”, “El día de la tormenta” o “Trilogía”, una de mis favoritas. Cerraron con dos clásicos de los setenta: “It's All Right” y “Crazy Machine”. En estos cortes destacaron los esperados  solos de Ángel a la guitarra eléctrica. Imperdible también fue el momento en el que Diego salió fuera del set de batería percutiendo sobre todo lo que se fue encontrando a su paso. Me comunicaron una buena noticia: a finales de este año, tendrán nuevo disco en la calle.

Alameda

El rock andaluz también estaría presente en esta segunda jornada, al igual que los Medina la noche anterior. Protagonistas de la historia de este género o, mejor dicho, protagonista, los Alameda de Pepe Roca continúan en activo defendiendo la cultura musical andaluza por donde van, siempre rodeado de muy buenos músicos. En estos últimos tiempos han dado un giro a su estilo, ahora más lirico; otorgan protagonismo a lo instrumental pero sin perder esa voz tan maravillosa. No en vano se ganó el elogio de ser considerada la voz más bonita del rock en Andalucía.

“Calle abajo”, “Noche andaluza” o su conocida “Amanecer en el puerto”, en la que contaron con la colaboración del público, brillaron en su set. También rindieron homenaje a Camarón, con el que colaborarían en las grabaciones de algunas de sus creaciones. “La leyenda del tiempo” y “Volando voy” fueron gran parte de su directo, acompañado siempre en los coros de su pareja, la ex-Jarcha Toñi García. También preparan nuevo disco, según me comentaba Pepe Roca.

Ñu

Si hablamos de históricos, José Carlos Molina y sus Ñu son, sin duda, otros básicos del rock de este país. Incalculable su aporte a nuestro rollo, dando un extra en lo musical con matices diferentes de lo convencional. En la noche sevillana se presentaría con lo que es para mí una superbanda: Manolo Arias, ex-Niagara y ahora con Atlas y Monterrey, a la guitarra; Óscar Pérez a la batería, Juanmi Rodríguez de Cuatro Gatos a los teclados, Luis Calzada a la guitarra y César Sánchez de El Dorado al bajo. Sonaron como una puta banda de hard rock de la época dorada de este estilo. Además, Molina contó con un genial músico búlgaro a la viola, el señor Vesko. Aportó ese sonido folk y juglar que se complementa a la perfección con la flauta del también vocalista, al que vimos disfrutar sobre el escenario viendo como interpretaban estos musicazos sus creaciones: “No hay ningún loco”, “Viejos himnos”, “Preparan”, “Manicomio”, “Ella” o la imprescindible “El tren”. Finalizaron con “El flautista” esta vez sin su mandolina. Según palabras del propio Molina, fue olvidado en el AVE. Una delicia: sonido hard rockero y esa personalidad que siempre impregna en su música el líder de los Ñu.

Barón Rojo

La historia de Barón Rojo es muy grande, quizás de las más grandes de todas, pero pienso que hace tiempo que necesitan un giro radical. Esto es algo que lo sabe todo el mundo excepto los hermanos Armando y Carlos De Castro. En lo musical cumplen, pero les hace falta una voz que defienda ese legado tan importante. Se presentaban con nuevo bajista, José Luis Morán (ex-Esfinge) y auténticos himnos como “Incomunicación”, “Las flores del mal”, “Cuerdas de acero”, “Hijos de Caín”, “Concierto para ellos”, “Resistiré”, “Siempre estas allí”... Poco más se puede añadir a lo dicho. Sinceramente, no acabé el concierto entero. Una pena.

Dicen que la primavera la sangre altera y, si es a ritmo de heavy rock, mucho mejor. Esperamos que este Sevilla Urbano festival regrese de nuevo el próximo año y que la peña se sume al tren de la calidad musical, cualidad que en esta primera edición la ha habido con auténticos maestros y leyendas del rock.

Etiquetas: , , , , , , , , , ,

Categorizado en: , ,

Esta entrada fue escrita por Redacción

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *