Sum 41 + Neck Deep en Barcelona: Una despedida a su manera

Llegamos a la zona de pista bautizada como "Golden", el círculo delantero más cercano al escenario, y quince minutos antes de lo previsto Neck Deep salieron a aniquilar con un decálogo imposible de criticar.

Venían a presentar su último y homónimo álbum. Empezaron con "Dumbstruck Dumbfuck" y eso se convirtió en una locura colectiva de mosh, circle-pits y también walls-of-death. Me lo pasé pipa, y eso que el peso y los años son lastres casi insalvables.

Siguieron con "Sort Yourself Out" en el orden del disco actual. Nos regalaron "Motion Sickness" de su disco de 2017, "The Peace and The Panic" y luego fueron un poco más lejos con "Gold Steps", que nos hizo viajar casi una década atrás, a la época de ‘Life’s Not Out To Get You’, del que también tocaron la mayúscula "Citizens of Earth" y "Kali Ma".

Aunque el sonido no fue todo lo impactante que nos hubiera gustado, es una banda que en el Reino Unido ya ha anunciado una gira para 2025 con todo sold out y se van a Australia con State Champs en abril del próximo año.

A continuación, volvimos al presente con "Take Me With You". "Shut The Fuck Up" fue un sencillo lanzado en 2022 y una de las primeras flores que tuvimos después de la pandemia. La locura se volvió a desatar con la actual "We Need More Bricks", pero se despidieron con la melosa e impactante "In Bloom".

El futuro pinta muy bien para este quinteto de Wrexham, el pueblo del equipo de futbol del actor de Deadpool (Ryan Reynolds). Gracias.

Sabíamos que Sum 41 serían puntuales y saldrían con el "T.N.T." de AC/DC… y así sucedió. El resto: dos horas de locura de un concierto con cero fisuras que da mucha pena pensar que será el último en que veremos a Deryck Whibley y compañía.

Por cierto, menuda banda lleva: el guitarrista Dave Baksh toca lo que quiere, el solo de "Master Of Puppets" de Metallica fue alucinante; el otro guitarrista, Tom Thacker, no se queda corto. Tenemos también a Jason McCaslin (conocido como Cone), su manera de tocar el bajo me recordó mucho a Mike Dirnt de Green Day. Menuda bestia. Frank Zummo es soberbio. Su batería tuvo tiempo de lucir de forma individual en uno de los dos bises que se marcaron. Pero empecemos por el principio.

Si no contamos las versiones, tocaron treinta canciones propias durante 120 minutos. Menudo regalo de despedida con el que nos deleitaron. Empezaron con "Motivation", un tema que no tiene desperdicio. Sonó "The Hell Song" y eso ya no bajó de nivel.

"Over My Head" demostró que el disco ‘Does This Looks Infected?’ marcó a muchos cuarentones y que tiene 22 años. "No Reason" y "Out For Blood" se llevan quince años de diferencia y no se nota. Sonaron mayúsculos y el estado de forma del quinteto es envidiable. Pese a que Deryck se quiera retirar y todavía no sepamos el verdadero motivo, nos dejan en el mejor estado de forma que los he visto.

Poder despedirte de tu grupo favorito viendo su mejor concierto es algo que tendríamos que vivir más a menudo, pero que no es la norma. "War" dio inicio a las baladas, que también tuvieron su momento y que nos tocaron la patata sobremanera. "Underclass Hero" nos devolvió la cafeína que tanto necesitábamos.

"Noots" sirvió de entremés para los dos temas más radiados de su reciente ‘Heaven :x: Hell’: "Landmines" y "Dopamine". Tras esto, llegó el momento heavy con dos versiones de Slayer y Metallica para enlazar "We’re All To Blame" y destrozar la PA y nuestros oídos.

"Some Say" sirvió de respiro. La verdad es que las baladas a piano y los medio tiempos nos daban el respiro necesario para seguir sudando y dibujando una sonrisa que no se borró en todo el show. "Screaming Bloody Murder" junto a "Walking Disaster" (título del libro autobiográfico que Deryck ha publicado) fueron espídicas y sirvieron de introducción al cierre de la primera parte con "With Me" siendo el colofón de lagrimilla.

La segunda parte natural la inició "Makes No DIfference", un tema del año 2000. Entonces se cascaron seguidas en un medley loco "My Direction", "No Brains" y "All Messed Up". Tras el solo de batería, el tramo final del cuerpo del setlist fue rellenado con, nada más y nada menos que, "Preparasi A Salire" y "Rise Up", de su reciente doble álbum. "Pieces", "Fat Lip" y "Still Waiting" demostraron que si el concierto se acababa ahora ya estábamos más que satisfechos. Menudo bolo.

Hicieron un amago y regresaron para brindarnos dos encores. En el primero lo petó "Summer", una canción que aparece en dos de sus discos. Sum 41 se refiere a los cuarenta y un días de verano donde empezaron a funcionar como banda. El mítico elepé ‘All Killer, No Filler’ estuvo presente en cuatro ocasiones, dos de las cuales fueron en este bis: primero "Waiting On a Twist of Fate" y luego "Into Deep".

La mayoría del público abandonó el Palau Sant Jordi con la canción de "I’ve Gotta Be Me", popularizada por Sammy Davis Jr., cantante amante del alcohol. Pero con el recinto ya bastante vacío volvieron Sum 41 para tocar "So Long Goodbye" y el vacío total se hizo sonando "My Way" de Frank Sinatra.

Y así fue, lo hicieron a su manera, pero qué forma más impactante. Fue bonito mientras duró, estimados Sum 41.

Setlist de Sum 41 en Barcelona:

Screaming Bloody Murder
Motivation
The Hell Song
Over My Head (Better Off Dead)
No Reason
Out Of Blood
War
Underclass Hero
Noots
Landmines
Dopamine
Raining Blood / Master of Puppets solo
We’re All To Blame
Some Say
Screaming Bloody Murder
Walking Disaster
With Me
Makes No Difference
My Direction/No Brains/All Messed Up
Preparasi A Salire
Rise Up
Pieces
Fat Lip
Still Waiting
Summer
Waiting On A Twist Of Fate
In Too Deep
So Long Goodbye

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