The Sweet Metal Band
The Dead People Ballade
Maldito Records (2024)
Por: Alberto "Sarel" Cañete Zamorano
8
Cuarto de siglo después de la creación de The Sweet Metal Band, aparece este nuevo disco con quince canciones de puro groove metal llegadas desde Valencia y divididas en tres grandes actos, los propios de la posesión demoníaca.
Primer acto: Infestación
Esta gran obra arranca con "The Special Gift", en la cual los susurros y los platillos abren una melodía de densas y fuertes guitarras que da paso a una letra en el idioma de Shakespeare y cantada en gutural, lo que será la tónica de todo el álbum.
Continúa la escucha con "Dark", con un toque de épica oscura que le viene maravillosamente a la trama del disco. El ritmo presenta un cambio tan sutil como elegante con "Evil Clown". La voz posee un efecto reverberante que acentúa el tenebrismo lento pero extenuante de la canción, como quien se encuentra caminando en medio de la oscuridad, esperando encontrar algo que confirme todas sus sospechas.
"Per Semper", por su parte, entrega una caña que rompe con todo lo establecido anteriormente en el disco, ofreciendo algo nuevo, con una vocalización que se entrega al máximo. El quinto tema, "Goodbye", es una interpretación del tema de apertura de "Dark", la aclamada serie alemana de Netflix, al más puro estilo groove metal.
Segundo acto: Opresión
"Penitenciagite" comienza con un gran dinamismo, utilizando unos coros que le dan una textura entre lo sacro y lo blasfemo a la canción, mostrando un gran ejercicio de diversidad musical que siempre se debe valorar positivamente cuando que realiza correctamente, y desde luego que éste es el caso.
En cuanto arranca "Doubting Yourself", lo primero que apetece es introducirse en un colosal pogo, rebotando y golpeándose entre sí con todo el mundo que se encuentra en ese ruidoso, armónico y entregado círculo de personas. Es una canción digna de aclamar a las masas durante un concierto.
Al sonar "Monotony", la acelerada guitarra acompaña una voz tan gutural que parece arrastrar un incesante eco, llevando consigo un estilo tan propio de la banda que sería imposible no darse cuenta de lo que la misma está dando para interpretarla. Esto crea un contraste con "Seven", cuya densidad retorna para dar otro claro ejemplo de versatilidad musical en el álbum; y es que los detalles importan, y mucho, cuando se crea una obra de este calibre.
Es su décimo tema, "Nefarious", otro gran ejemplo de lo dicho, ya que inicia con un sonido nuevo, diferente y casi irreconocible, hasta que todas las voces aparecen ante nuestros oídos, gritando: "Aquí estamos nosotros".
Tercer acto: Posesión
En el caso de "Yesterday", la solemnidad hace acto de presencia, creando el que podría ser el tema más melódico hasta ahora (sin dejar su esencia de groove metal, por supuesto). Respecto a "Para Bellum", lo primero que destaca es el sonido de un helicóptero, seguido por las palabras de un soldado que te va introduciendo en la batalla que será este tema, con una densidad que plasma a la perfección el ambiente bélico y el precio que subyace en él.
Como acto de contraste, "Just Here" muestra una batería sólida y bien arrolladora, marcando el ritmo de la densidad que transmite la letra, la cual se va abriendo paulatinamente a un sonido musical tan contrastado como profundo. Un contraste que, precisamente, se remarca con "Grotesque", cuyo dinamismo ilumina el espacio con su sonido, como si tuviera la capacidad de configurar las propiedades físicas de la luz. Todo se cierra en el último tema, "Apathy", volviendo al poderoso tenebrismo que destaca en la banda.
Se notan las dos décadas y media que posee The Sweet Metal Band tras sus expertos hombros, el amor al groove metal, a la música, a la voz gutural, a una de las mejores series de ciencia ficción jamás creadas… Gloria al groove metal. Gloria a The Sweet Metal Band.
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