BERRI TXARRAK: UNA DIGESTIÓN LIGERA
19 mayo, 2015 11:09 am 2 ComentariosSala Santana 27, Bilbao
A veces es necesario que nos cuenten las cosas de una manera atractiva. No así de golpe y porrazo, y si no lo pillas, mala suerte. Pero no todo el mundo sabe manejar las palabras con soltura o tiene ese don innato para ir alambicando historias con una habilidad pasmosa. Una capacidad que no guarda relación alguna con el nivel académico de cada cual, sino con un gracejo especial que poseen los narradores con mayúsculas, no solo los literatos, sino también aquellos que desde una barra de bar te construyen asombrosas tramas con planteamiento, nudo y desenlace.
Por lo tanto, eso de la presentación cobra una importancia fundamental a la hora de la comprensión de un relato concreto. Ya habían dejado intuir los navarros Berri Txarrak que en su próxima gira dedicarían un tramo considerable del repertorioa su triple álbum ‘Denbora Da Poligrafo Bakarra’, lo cual es lo más lógico, habida cuenta de que se trata de la puesta en largo oficial del mentado esfuerzo. El problema reside en que la gente no suele informarse del espectáculo al que va a asistir, y claro, luego surgen las quejas, cuando lo suyo hubiera sido documentarse, igual que se debería hacer con los programas políticos antes de votar.
Las dos noches que Gorka Urbizu y compañía ofrecieron en la sala Santana de la capital vizcaína mostraron perfiles muy distintos de una misma banda. En la primera, se sobraron e interpretaron su último lanzamiento de cabo a rabo, las veinte canciones, así sin vaselina, por lo que los comentarios en torno a ello no fueron demasiado positivos. En la segunda, que fue a la que acudimos nosotros, cambiaron por completo el chip y a medida que nos hacían tragar los supositorios, nos hacían carantoñas con piezas inesperadas que añadían variedad al asunto, y a buen seguro, elevaron la impresión final.
Con el papel agotado desde hacía tiempo, el ambiente era agobiante a más no poder, en especial para las féminas, que debían soportar kilométricas colas para aliviarse y los responsables se vieron obligados a “habilitar un baño temporalmente para mujeres”, cosa harto insuficiente, pues muchas iban casi dando tumbos como zombies a los urinarios masculinos que no se asemejaban a vulgares abrevaderos. Para los tíos, sin problema, había el doble de sitios, curiosa paradoja.
Al margen de los problemas logísticos, Osso iniciaron su recital cuando todavía el grueso del personal se encontraba bebiendo en las inmediaciones. Muy compenetrado y con garra nos pareció este dúo con miembros de Eraso! o Cobra, aparte de que encajaban cual guante en la velada, con su rollo euskaldun muy en la línea de los protagonistas de la noche. Prometedores.
Todo lo contrario de los indies soporíferos Señores, que le daban a un palo tipo Los Planetas con algún leve toque shoegaze. No pegaban ni con cola, y si mirabas la cara de la concurrencia, más de uno parecía estar sufriendo, no era para menos, pues había que tener un par para aguantar ahí impertérrito. Por suerte, su concurso pasó rápido, igual que cuando la comida entra por el lugar equivocado.
No nos disgusta su reciente álbum, por lo que andábamos en plenas facultades para soportar algo tan contundente como un plato de lentejas, pero Berri Txarrak supieron desde el inicio dosificar las raciones, alargando incluso un poco de pan para ayudar a tragar. “Orain Norbait Zara” se antojaba un excelente tentempié para comenzar el banquete y “Ordaina” no desmereció en absoluto. Las gargantas se elevaron por primera vez en “Izena, Izana, Ezina”, que constató la nitidez de un sonido al que quizás le faltaran unos cuantos vatios.
Volvieron de nuevo con la medicación en “Aditu Bihurtuak” y “Lemak, Aingurak”, dos del segundo volumen producido por Ricky Falkner. Y el que sin duda fue uno de los tramos de la velada estuvo cuando se arrancaron con la tralla punkarra de “Folklore” y acto seguido “Gure Dekadentziaren Onenean”, con la batería de Galder a tope y Gorka levantando el mástil. Alucinante.
Aflojaron una pizca el pistón con la comercial “Oreka”, en la que intercalaron un fragmento del “Got The Life” de Korn, asumiendo influencias sin complejos. De hecho, en sus set lists suelen entremezclar sus propios temas con el nombre de otros grupos a los que les recuerdan sus canciones.
Luego nos dejaron a la mayoría con cara de póker cantando un corte en inglés que no acertamos a identificar, aunque sospechamos que era de The Mars Volta, y regresaron a su fuero hardcoreta melódico con “Xake-mate Kultural Bat”, que se recibió con la dignidad de un auténtico clásico. Era obvio que el tercer volumen cosechaba mayores alabanzas que los otros dos, seguramente por ese halo de inmediatez que desprenden esas piezas que no sobrepasan los dos minutos y entran como un tiro.
Otra de las inevitables que siempre levanta el pabellón es “Denak Ez Du Balio”, que para la parte en la lengua de Shakespeare contó con un invitado que movilizó a las masas de lo lindo y desató al máximo las gargantas. Y se acordaron de Iñigo Cabacas en “Helduleku Guztiak”, aquella negligencia que prueba una vez más que si en este país de lo que se trata es de investigar abusos policiales y exigir responsabilidades podemos esperar sentados.
La noche de los grandes clásicos sazonados con novedades iba culminando con “Libre” e “Ikasten” y el único recuerdo a ‘Haria’ lo tuvieron con “Soilik Agur”, antes de imprimir de nuevo garra punk con “Zerbait Asmatuko Dugu”. Ya solo les faltaba finiquitar con “Oihu” un bolazo en condiciones y recordar el motivo por el que estaban allí con “Poligrafo Bakarra”, con luces y punteos a lo Pink Floyd.
Lejos de aquellos artistas que se limitan a reproducir un repertorio idéntico para toda la gira, los navarros demostraron osadía en su cita del día anterior y optaron por quedarse con los fans de siempre en la jornada siguiente. Un caprichoso cara o cruz que determinó la condena o salvación para muchos asistentes. Tuvimos suerte por tanto en el suculento manjar de digestión ligera que nos brindaron. Ni repitió ni fue indigesto.
Texto: Alfredo Villaescusa
Fotos: Marina Rouan
¡¡ATENCIÓN!!: BERRI TXARRAK SERÁ UNA DE LAS BANDAS QUE ENCABEZARÁ LA SEGUNDA EDICIÓN DEL FESTIVAL SICK OF BEAN EN MADRID EL PRÓXIMO SÁBADO 23 DE MAYO. MÁS INFO AQUÍ.
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2 comentarios
Como siempre BERRI TXARRAK arrasando allá a donde van a tocar y esa noche en tierras vascas los navarros dejaron patente desde hace años que son una de las mejores bandas de metal que habitan en nuestro país.Tambien es de elogiar lo 20 temas integros que se marcaron de su ultimo plástico junto con lo clásicos de siempre para hacer de dicha velada algo más grande aún.En mi colección de albumnes tengo el PAYOLA y el HARIA y solo puedo decir que es un HONOR tener esos dos pedazos de albumnes del mejor metal cantao en vasco!!!
Buena crónica y gran concierto! Aunque me faltaron Lanbroan (la cuál me parece ideal para abrir concierto por su comienzo progresivo y su ritmeto posterior), la macarrada Alegia o la obra de arte "26 segundutan".
Un apunte, el que cantó en Denak ez du balio, es el de OSSO/Cobra, que por cierto, lo dió todo.